Primer día.

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Creo que de todas las semanas, esta era una de esas que se sentían eternas, aunque a pesar de todo, fue muy entretenida, había comenzado a trabajar en una de las tiendas de mi tía, estaba en un centro comercial y me hacía todo bastante fácil ya que se encontraba entre la casa y la universidad.

El día había llegado, mi primer día en la universidad, al llegar me sentí como a un pez que le habían sacado de su pecera.

—¿Nervioso?— Me preguntó Jongsuk dándome una palmada bastante fuerte en la espalda.

—¿No se nota? Hasta creo que me voy a perder aquí.— Le dije con la voz algo entrecortada.
—No es para tanto, solo ve y busca tu respectivo salón con tu respectiva clase, ¿Cual llevas primero?— Me preguntó para luego tomar un sorbo a su café.

—Filosofía.— Le dije revisando mi horario.
—Bien, tú solo sigue las instrucciones del folleto, pero rápido, solo nos quedan 8 minutos, así que te dejo, Donghae, suerte.— Me dijo alejándose lo más rápido posible.

Finalmente me encontraba frente a mi salón, entré y vi como habían muchos chicos conversando con otros, así que me dirigí a un asiento que estaba vacío, los asientos estaban intercalados unos sobre otros (Como en el cine).

Me senté y esperé que el tiempo pasara rápido para que comenzara la clase, cerré los ojos pero mis pensamientos fueron interrumpidos por un ruidoso chico que se sentó a mi lado.

—Ah maldición, regresar a clases justo cuando mis vacaciones se ponían interesantes.— dijo mientras se recostaba en el escritorio.

—¿Todo bien?— Le pregunté, aunque era claro que hacía un berrinche.

—¿Ah? Ah sí, es solo que no quiero volver a estudiar.— Dijo mientras levantaba la mirada para verme, su apariencia era bastante diferente a su voz, llevaba el cabello largo, y su piel era bastante pálida, tenía una imagen bastante dulce.

—Ah, no a muchos les gusta la idea de volver a clases.—

—¿Algunos? ¿Tú sí querías entrar a clases?- Me preguntó viéndome con una expresión sorprendida.

—En realidad sí, de hecho es la razón por la cual vine a esta ciudad.— Le dije sonriendo, era la primera vez que estaba en un lugar tan grande además que era mi primer día de universidad.

—Debes ser de primer ingreso entonces.— Dijo sacando una libreta de su mochila. —Heechul.— Me dijo extendiendo su mano.

—¿Ah?— Me había tomado por sorpresa.

—Mi nombre, es Heechul.— Dijo riendo, aún no era muy bueno con las presentaciones ya que desde mi llegada a la ciudad rara vez había hablado con alguien desconocido.

–Ah, sí, mucho gusto, mi nombre es Donghae.— Le dije tomando su mano.

—¿Donghae? Que peculiar.— Dijo soltando una pequeña risa.

—¿Por qué?— Le pregunté, aunque las razones eran obvias ya que no era un nombre tan común.

—Nada, nada, olvídalo.— Me dijo riendo, a pesar de lucir potencialmente arrogante, era muy carismático y llevadero.

—Me caes bien, sabes, cuando llevemos clases juntos deberías sentarte a mi lado.— Me dijo sonriendo

—Me parece bien.— Le dije devolviéndole la sonrisa.

—Excepto cuando una chica linda lo haga, no la quitaría por ti.— Me dijo ya algo serio.

—Ah ok, entiendo.— Le dije agregando algo de seriedad a mi voz.

Mi pecado 〔Eunhae〕ㅤDonde viven las historias. Descúbrelo ahora