Mi pecado 〔Eunhae〕ㅤ

Reuniones.

Hola, mis vidas, mis amores, ¿Pueden creer que pasó un poco más de un mes y yo estoy subiendo capítulo? Lo sé, es un milagro, pidan un deseo. Éste capítulo me llevó realmente muchos días, pero es que justo ahora que regresé a la universidad la inspiración me golpeó.

EN FIN, espero disfruten el capítulo.

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Heechul se había ofrecido a conducir, a pesar de ser mi auto, pues según él, yo lo hacía como un cachorro, no entendí muy bien a qué se refería con eso, pero supuse que era debido a que yo tomaba muchas precauciones, ya que al ser tan torpe, tenía miedo de chocar o algo peor, como atropellar a alguien.

Un par de horas más tarde, luego de un horrible tráfico debido a la lluvia, logramos llegar al aeropuerto. Obligué a Heechul a correr conmigo pues ya habían transcurrido veinticinco minutos desde el aterrizaje de Hyunsik.

  —Donghae, cálmate, no le va a pasar nada con unos instantes más tarde que llegues.— No respondí nada mientras continuaba caminando a paso rápido, esquivando  la gente y demás. Luego de correr al rededor de quince minutos, me detuve a observar a Hyunsik, se encontraba reclinado contra una pared, haciendo una llamada en su celular. Jadeante, tomé mi celular al sentir como éste vibraba, asegurándome que era una llamada de él.

Me quedé ahí de pie, observándole por algunos segundos, sentí algo extraño en mi pecho, como mi corazón se aceleraba, estaba nervioso, con temor a acercarme y hablar con él. No sabía muy bien qué era lo que sentía, por que estaba completamente seguro de que aunque no lo quisiera aceptar, estaba más que enamorado de Hyukjae, así que no podía comprender exactamente qué me estaba sucediendo con Hyunsik.

Sentí la mano de Heechul en mi hombro, me giré para verle. Él se llevó las manos a las rodillas respirando como si hubiese corrido una maratón. —Sabes que la actividad física no es mi fuerte.— Dijo jadeante. —Sí, lo siento, ya te lo compensaré luego.— Le di unas palmadas en el hombro mientras él regresaba a una posición erguida. —Ésta es nuestra última semana antes de irnos de vacaciones, el fin de semana iremos todos a una cabaña de mis padres, más te vale ir.— Solté una pequeña risa mientras asentía a su petición con la cabeza. —Hyunsik está por allá, iré por él.— Señalé con mi pulgar la dirección en la que Hyunsik se encontraba. —Sí, sí, ve, yo espero aquí.— Hizo un ademán indicándome que me fuera mientras intentaba recuperar la respiración.

Caminé lentamente hasta Hyunsik, quien sonrió de la manera más radiante que alguna vez haya visto una vez yo me acerqué, me fue imposible no devolverle la sonrisa. —¡Donghae! Pensé que ya no vendrías, Amber me envió un mensaje y me dijo que vendrías sin ella.— Dijo antes de rodearme con sus brazos en un cálido abrazo. Yo correspondí, pero no con la misma fuerza ni calidez, me sentía nervioso, pero intenté no ser muy obvio al respecto. —Había un terrible tráfico por culpa de la lluvia, pero lo importante es que ya estoy aquí, y ya nos podemos ir de éste sitio.— Él asintió sin dejar de sonreír. Tomé unas de sus maletas para ayudarle y así poder regresar con Heechul. 

Hyunsik se quedaría ésta vez en un departamento cerca de la casa de mi tía, lo cual me asustaba un poco, pues sabía perfectamente que mi tía lo querría tener en la casa todo el tiempo que le fuese posible, a pesar de ella no encontrarse ahí, después de todo, ella le tenía un inmenso cariño a él. 

Heechul se ''ofreció'' a conducir nuevamente, él y Hyunsik iban en los asientos delanteros mientras que yo me había quedado en el trasero. Ellos mantenían una conversación tal y como si fuesen viejos amigos, lo cual me incomodaba, pues Heechul era un peligro hasta respirando.

—Estoy planeando para éste fin de semana unas pequeñas vacaciones, tenemos los exámenes finales ésta semana, así que me pareció una excelente idea de relajación, serán en una cabaña en el bosque, es de mis padres, pero la puedo usar cuando quiera, irán nuestros otros amigos, deberías venir tú también.— Yo iba tomando agua al momento de escuchar la invitación que Heechul le hacía a Hyunsik, lo cual me tomó por sorpresa, provocando que me ahogara y comenzara a toser como loco. Ambos giraron la vista hacía mí unos segundos, regresando ésta al camino instantes después.