DESTINO [ꜰᴀɴꜰɪᴄ]

C19 "Hombre libre"

Y ahí estaba ese hombre, completamente engañado, dónde tantas veces había caído: las trampas de Bianca.

Luego de una llamada y otro trago de licor ella se despojó de la ropa y entró junto a él a la cama.

Bianca: Ay Angelito Angelito ¿estás dormido?

Agarró su brazo y lo alzó para luego dejarlo caer, una sonrisa burlona llegó al percatarse que ese hombre era el mismo ingenuo de siempre.

Bianca: es unas lástima que la arrastradita se quedará sin ti una vez más [le daba ligeros golpes en la cara] y se va a morir cuando se entere que serás papá otra vez, la engañaste ¡Que malo eres!

Le dio un beso en la mejilla en señal de victoria y llevó una mano de él hasta su vientre.

Bianca: pero debes agradecerme ¿eh? este nuevo mocoso tiene el mismo papá del lento de Santiago, al menos se van a parecer y una vez más creerás que son tuyos, porque lo son Angelito querido [sonrió cínicamente] pero ni pienses que te diré algún día la verdad, morirás engañado como lo que eres, un pelele.

Muchas vueltas después al fin ella se durmió, casi al amanecer despertó y se abrazó a él, sabía perfectamente que el efecto del narcótico duraba unas 8 horas y quería estar lista para su gran actuación.

Ángel comenzó a moverse y sonrió en medio de su enorme dolor de cabeza al sentirse piel a piel junto a alguien, no recordaba nada, todo era muy confuso pero pensó en ella, en Vero.

Con mucha dificultad abrió lentamente sus ojos para hallar lo que jamás esperó: Bianca.

Ángel: ¿qué demonios es esto? [la alejó y se sentó rápido] Aush mi cabeza, Bianca, Bianca carajo despierta ¿qué pasó?

Bianca: ¿Ángel? ¿Qué hago aquí? [se miró la sábana] Ay no, no. No me digas que tú y yo...

Ángel: tú y yo nada [negó levantándose rápido]

Bianca: cuidado te caes [lo observó a punto del mareo] creo que tomamos mucho y bueno, solo sucedió. Perdóname.

Ángel: esto no puede ser, simplemente no. Vístete ya mismo.

Bianca: Ángel por favor, créeme no recuerdo nada pero miranos, en la cama y desnudos es evidente que...

Ángel: ya Bianca [corrió al baño y se encerró]

Bianca: "ni puedi sir" [susurró burlándose] pues es querido mío, si es.

Él entró enseguida a la ducha, agua helada corría por su cuerpo haciéndolo estremecer y reaccionar ante la situación insólita que vivía, era una locura ¿en que momento pasó?

Ángel: ¿que hiciste Ángel? [golpeó fuerte la pared] muñequita mía no me vas a perdonar esto, soy un imbécil ¡maldita sea!

Unos minutos más tardes salió del baño y se encontró a Bianca ya vestida sentada en la orilla de la cama.

Ángel: ¿qué haces todavía aquí? Vete de una vez por favor

Bianca: no quiero que pienses lo peor de mi ¿se lo dirás a ella? [aguanto la risa al observarlo tan nervioso]

Ángel: eso a ti no te interesa Bianca, nada de lo que pudo haber ocurrido pasó ¿estamos de acuerdo?

Bianca: por mi parte lo estamos Ángel [se levantó y fue cerca de él]  hoy mismo me voy de la ciudad y solo llamaré para saber sobre los niños, a ellos les hará bien estar cerca de ustedes.