CAPÍTULO 13

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Siempre me dio miedo la oscuridad.

Mis padres lo saben.

Pero igual me dejan a oscuras y sola.

Mi muñeca de trapo me acompaña siempre cuando voy a la cocina a ver a mis padres, es así desde hace tres años.

Por las noches me desean los dulces sueños, y a los pocos minutos se escuchan los gritos y las peleas.

¿Por qué esta vez duró menos de lo normal? ¿Por qué la casa está llena de un líquido rojo y viscoso? Huele y se ve asqueroso.

Papá está en ese líquido durmiendo, mi mamá a su lado arrodillada mirándolo y mi hermana al lado mío abrazándome.

¿Por qué estamos así? Hay que llevar a papá a la cama, quiero decir, pero la voz no me sale.

Solo quiero dormir y que mis padres también lo hagan, ¿es tan difícil que pase eso?

Hace tan solo unos minutos se estaban gritando de cosas y de pronto yo...

-¡Jolie despierta! -escucho que me gritan y abro los ojos de golpe.

Me enderezo en la cama y empiezo a respirar agitadamente tocándome el pecho. Al lado mío está Carol con una mano en mi espalda sobándomela.

-¿Tuviste una pesadilla? -me pregunta y asiento- Tranquila ya pasó.

Me calmo un poco y trago saliva.

-Jolie ya tienes que levantarte y comer, son la una de la tarde -¿Qué?- ¿A que hora te dormiste?

-Creo que a la una de la mañana -miento- es que estaba haciendo unas cosas y me cansé mucho, necesitaba dormir.

Me mira extraña y asiente mientras me pasa la comida.

-Come algo para luego darte tus medicamentos, no las puedes tomar con el estómago vacío.

Le doy una sonrisa fingida y empiezo a comer el pure con papas.

Cuando termino me pasa las pastillas junto con el agua.

-¿Cómo te has sentido últimamente Jolie? -me pregunta mientras acaricia mi cabello.

¿Le digo la verdad? Que sé que este hospital es de experimentos y que Phishman es un hijo de su mami.

¿Le miento? Que me siento mejor y que es el mejor hospital de todo el mundo porque todos son buenos.

-Bien, muy bien.

Bien, bien...

-Me alegra escuchar eso -me sonríe- hoy las enfermeras iremos de retiro unos dos días. Ya sabes dónde están tus medicamentos y cuando los debes tomar, ¿verdad?

-Por supuesto -asiento.

-Bueno, cuídate linda -me da un beso en la frente- nos vemos en dos días.

-Claro. -digo cuando sale por la puerta y la cierra.

Me recuesto en la cama y agarro mi celular. Paso un rato viendo fotos y videos de mis cantantes favoritos cuando escucho que alguien llama a mi puerta.

Me levanto de la cama refunfuñando y me arrastro hasta llegar a la puerta.

Cuando estoy a punto de abrir veo que hay un sobre debajo mio.

¿Y esto?

La levanto del suelo, me dirijo al sillón, y la abro mientras me voy sentando.

Secretos OcultosDonde viven las historias. Descúbrelo ahora