Capítulo 72

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Se levanta de la cama yendo a la habitación a su lado sabiendo que ahí estaría el héroe número dos. El hombre rubio está mirando al exterior aún con las vendas por su rostro, cuando siente la presencia del menor voltea a verlo.

—Me alegra que estes vivo, chico maravilla.—el menor se acerca sentándose en la cama.

—Yo también estoy feliz de que estés vivo, por un momento pensé que te habías vuelto pollo frito.—una carcajada se escucha por parte del héroe profesional.

—Honestamente hubiera muerto sino fuera por ti que viniste cual príncipe a rescatarme.—agradece a su modo.

—Es mi trabajo a final de cuentas.—declara, recordando por un instante el cuerpo inerte de Twice junto a las revelaciones de Dabi.—Dabi formó un gran desastre, ahora mismo estamos bajo investigación de todo tipo.—

—Por lo menos cuentas ahora con el respaldo del gobierno que ahora te ha tomado en sus manos.—informa con calma.—En mi caso estaré en tiempo fuera de servicio hasta que mis alas crezcan.—dice señalando su espalda con ausencia de alas que están creciendo apenas.

—Un descanso no te cae mal.—dice con una sonrisa.—Más bien, te lo mereces.—

—Sí, me lo merezco.—ahora mira las cicatrices ___.—¿La pasaste mal?—

—No tanto, puedo decir que pude comprender a los villanos, sus razones, sus dolores y eso me ayudará a ser un mejor héroe en el futuro.—sonríe mirando los rayos de sol que entran por la ventana.

—Mucha suerte con eso, te puedo entrenar si lo piensas.—sugiere.—Me agradas, a pesar de no estar interesado en entrenar a la nueva generación podría hacer una excepción.—

—Puedo pensarlo, me gustaría comer pollo frito contigo.—asiente para después bajarse de la cama en un pequeño salto.—Nos vemos, Takami Keigo.—

—Nos vemos, Shimura ____.—

El joven sale para volver a su habitación entrando notando la presencia de una persona ahí, de cierto rubio que siempre le ha movido el suelo. Cierra la puerta llamando su atención planeando acercarse para hablarle pero un golpe en su rostro lo hace esperar.

Cae al suelo quejándose.

—Ay, ay, ay.—aprieta los dientes adolorido.—¿No podías golpearme en el lado derecho donde la piel esta bien?—trata de levantarse otra vez pero otro golpe viene. Planea usar sus brazos para protegerse pero un abrazo le interrumpe.—¿Me vas a explotar la cabeza?, estoy algo confundido.—

Las manos del rubio se aferran a él dejándolo en un fuerte abrazo que logra calmarlo rodeándolo también con sus brazos sintiendo sus ojos aguarse comenzando a llorar.

No dicen nada sino que solo lloran ahí, parecen entenderse sin haberse hablado nada durante toda esa hora que estuvieron sin soltarse del otro llorando silenciosamente.

[***]

—¡Ay!, cuidado, Kacchan, esas heridas aún no han sanado.—se pone derecho cuando las vendas por su torso son apretadas demasiado.

—Te lo mereces por idiota.—escupe con su ceño fruncido.

—Esas heridas fueron por la pelea contra Geten.—responde recordando aquella pelea.—También por la de Dabi.—las vendas son nuevamente apretadas sacándole un quejido.—¡Carajo!—

—¿Me dirás que estuviste haciendo estos últimos meses donde estuviste supuestamente muerte, Shimura ____?—

La piel del menor se pone de gallina cuando un escalofrío es creado por la mirada y voz de Bakugo que a pesar de haber llorado hace un rato ahora parece estar hirviendo internamente de la ira.

Shimura sabe que se lo merece pero no quiere tampoco morir realmente, su mirada azulada grisácea se torna seria también mirando a su compañero.

—Hablaré de esos con TODOS ustedes cuando estemos en U.A, todos merecen saber la verdad ahora que el gobierno me ha dejado decir todo libremente sin problemas.—su tono de voz es serio con su nuevo aspecto daba un toque intimidante para el rubio.—Posiblemente pase unos dos días en U.A nada más antes de volver a Osaka por los asuntos de los reportes y mi investigación total.—

—¿Cuánto tiempo tomará eso?—lo vuelve a voltear colocando bien las vendas para después entregarle las ropas que All Might le ha mandado.

—Tal vez media semana, aún no se sabe mucho de este proceso pero también está la nueva constitución para los héroes ahora que Dabi hizo de las suyas.—comenta acomodándose su chaqueta.—Posiblemente ahora todo cambie para nosotros como futuros héroes.—

—Maldita sea, todo se salió de control.—

—Totalmente.—agarra su bolso saliendo de la habitación siendo acompañado por el ojirojo.—Aunque ahora lo más importante que los daños a la ciudad sean arreglados para que todas las personas afectadas pueden vivir nuevamente.—

—Tienes razón, ese maldito gigante destrozo muchas cosas.—aprieta sus puños.

Mientras el albino anota unas cosas en unos papeles del hospital también habla con unos agentes del gobierno para posteriormente asentir haciéndole señas a Katsuki para salir de ahí.

Suben a un taxi que los llevó hasta la estación para que puedan ir a los dormitorios de U.A.

Los orbes azulados grisáceos miran hacía el más allá cerrándose sus ojos de poco a poco terminando por quedar dormido apoyando su cuerpo en el de orbes rojos.

De reojo, el rubio lo mira, mayormente lo aprecia notando todos sus cambios comparándolo cómo cuando había desaparecido hace ya tiempo atrás.

Con una de sus manos se asegura de que nada sea un sueño logrando sentir el verdadero calor del albino anterior azabache. Las cicatrices en su cuerpo, en su rostro, su cabello, todo ha cambiado.

Pero aún está ahí junto a él durmiendo apoyado contra él como hace tiempo solía hacer cuando estaba muy cansado.

Apoya su cabeza de la otro, ya no está el olor a vainilla en su cuerpo ni en su cabello, ahora no huele a nada.

Cierra sus ojos por unos momentos aprovechando el momento para que su orgullo no salga a flote, logrando ablandarse sintiéndose muy feliz de que su novio esté vivo aún, a su lado.

Al paso de una hora ya han llegado a su destino, Katsuki tan brusco como siempre despierta al chico tirándolo al suelo. Ambos salen del vagón yendo directamente a U.A, por ahora todos están sanos siendo el único que se mantuvo más tiempo en el hospital fue Shimura.

—Después de esto debo hablar con mi papá.—dice algo preocupado.—Tengo miedo de cómo pueda reaccionar al verme de nuevo.—

—Estoy seguro que llorará como un bebé, porque te quiere mucho.—dice Bakugo para calmarlo.

—No quiero que me odie por lo que hice.—dice temeroso.

—No lo hará, es tu papá.—dice.—Te ama más que nada.—

El albino asiente mirando hacía los edificios de los maestros suspirando esperando que todo salga bien cuando hable con su padre a solas.

Estando frente a la imponente puerta de los dormitorios ____ suspira apretando las cuerdas de su bolso, sabe que muchas cosas pasarán ahí ahora

—Volvimos.—avisa abriendo la puerta.

Quirkless. [Bakugo Katsuki x Male Reader]Donde viven las historias. Descúbrelo ahora