𓆩𝑪𝒂𝒎𝒃𝒊𝒂𝒔𝒕𝒆 𓆪꒱࿐ [윤민]

09

Tenía frío, mucho frío. Todo su cuerpo le dolía, pero sobretodo su espalda, lugar en el que había recibido la mayoría de los golpes con la correa. Su cuerpo temblaba, quería acostarse y dormir para no volver a despertar jamás.

ㅡ Vamos, Taehyung, tú puedes. ㅡ  se alentó a si mismo y tomó un poco de impulso para levantarse del suelo, aún le faltaban cosas por hacer.

Fue caminando entre quejidos hasta la cocina de su casa, donde una pila de platos sucios lo esperaba. Dio el agua de la llave, tomó la esponja algo rota entre sus manos, y bajó el chorro frío de agua comenzó a lavar uno por uno los platos.

"Quiero morir" era lo único que su mente le decía.

Una vez terminó, abrió el refrigerador y un pequeño suspiro salió de sus labios al notar que estaba completamente vacío.

Quizás para alguien con una vida normal, ir a comprar al supermercado porque faltaban cosas sería lo más normal del mundo, pero para Taehyung, era algo difícil, muy difícil.

Tomó aire y camino cuidadosamente hasta el comedor, donde aquel hombre estaba sentado en el sofá frente a la televisión, con una lata de cerveza en su mano.

ㅡ U-uhm, disculpa, el refrigerador...el refrigerador está vacío y m-me gustaría ir a-

ㅡ ¡Habla de una vez, maricón! ¡¿Acaso eres estúpido o es que la zorra de tu madre no te educó bien?! Dios, todos los omegas son unos buenos para nada.

Se quedó en silencio por unos segundos y no supo de dónde, quizás era la adrenalina, pero por primera vez le respondió de vuelta al hombre.

ㅡ ¡No hables así de mi mamá! ¡Y- y si no te gusta, la puerta es lo suficientemente ancha para que te vayas, monstruo! ㅡ el hombre no le respondió de inmediato, cosa que hacía sentir más nervioso al omega.

De pronto, el alfa se levantó del sofá, tirando la lata haciéndola estampar contra la pared. Taehyung quería salir corriendo de ahí, pero sus piernas no le respondían, el miedo lo tenía paralizado.

ㅡ Ven acá, maricón de mierda.

Y antes de que pudiera reaccionar, estaba siendo jalado de su cabello mientras el hombre lo golpeaba sin piedad en el rostro.

¿Por qué había abierto su bocota?

.......

Se encontraba en los pasillos del supermercado, ocupando un gran poleron que le cubría todos los brazos y unos pantalones anchos que le cubrían los moretones de sus piernas. Y por supuesto, utilizaba una mascarilla y lentes de sol para tratar de camuflar los hematomas en su rostro.

Caminaba cabizbajo, tratando de no hacer contacto visual con nadie. Repasaba mentalmente las cosas que hacían falta en su casa y poco a poco las metía en el carrito. Dobló en el pasillo de los dulces, si tenía suerte lograría encontrar las únicas galletas que le gustaban y que de vez en cuando compraba.

Cuando divisó el paquete con una envoltura infantil de dinosaurios, una pequeña sonrisa se formó en su rostro. Apresuró su paso y estiró su mano para tomar el paquete, pero en lugar de eso, chocó con la mano de otra persona.

ㅡ ¡Oh, lo siento, yo no quería- ¿Hoseok? ¿Qué mierda haces acá? ㅡ ah, que buen día, recibía una paliza y ahora se topaba con el bully de su escuela.

ㅡ Comprando, duh. No sabía que te gustaban las cosas infantiles.

ㅡ Lo dice el que anda literalmente con un collar de oso. ㅡ al mencionarle eso al alfa, este se sonrojó levemente y se tocó el cuello tratando de ocultar el accesorio.

ㅡ ¡Tks, es de mi hermana!

ㅡ Sí, sí. Alfa macho pecho de hierro grr.

Tratando de ignorar la presencia del chico, estiró nuevamente su mano para tomar las galletas, haciendo que la manga del poleron se deslizara un poco y dejara a la vista algunos moretones.

ㅡ Oye, ¿qué te pasó? Tienes muchos moretones. ㅡ el pelinegro acercó su mano tratando de tocar el brazo del omega, pero este solamente se alejó a modo de respuesta.

ㅡ ¡No me toques, imbécil! ¡¿Quién mierda te crees para venir y hacerte el bueno después de todo lo que le hiciste a mi amigo?! Tks, por favor, no trates de engañarme con tu imagen de chico bueno. ㅡ tiró el paquete de galletas dentro del carrito con algo de fuerza, seguramente estarían todas molidas cuando las abriera en su habitación. Dio media vuelta y comenzó a alejarse lentamente de ahí, pero antes de doblar para ir a pagar, miró por última vez al alfa para luego seguir con su camino.

Qué día de mierda.