Frases y Cosas de un Chico Yandere[EDITANDO]

Memorias Perdidas 3:

*(T/n) Narra ahora*

Otra mañana más, no recuerdo nada.

-¿¡Eh?!- Digo viendo a un hombre(William) cerca de mi -¿¡Quién es usted?!- El puso un dedo en mis labios -Shh no hay necesidad de gritar. Lee tu diario, soy tu doctor William, aunque llámame William- Quitó su dedo enguantado de mis labios y me pasó mi diario. Lo leo y le recuerdo brevemente pero algo me dice que no hay algo bien con él.

-¿Qué hace acá tan temprano?- Veo hacia abajo y me alarmo al ver que tenía mi pecho al descubierto -¿Qué acaba de pasar acá?- Digo tratando de acomodar mi pijama pero él me lo impide -Necesito revisar tus heridas cariño, es mi deber- Él empieza con lo suyo y ¿por qué me llama cariño si yo... ah cierto, el diario pero no me siento confiada con él.

-Eh..William...no me siento cómoda con lo que ¡ngh! hace- Tocó una de mis heridas que según mi diario me hice en algún accidente. No sin antes inyectarme algo.

-Esto es por tu bien, no te alarmes, y esto es anestesia por si acaso- A pesar de no sentir nada de dolor permanezco de esta incómoda manera durante media hora hasta que al fin el tipo se aleja de mi.

- No tienes porqué sentirte incómoda de mi- Dijo cubriéndome el pecho -¿Cómo no va a incomodarme  si ni siquiera me despertó?- Dije mientras me intentaba levantar o acomodarme. Un poco más  y el tipo me besa.

Me trata como si fuera su pareja pero yo no tengo sus mismos sentimientos hacia él y ahora mismo en lo que estoy interesada es en salir de aquí y recuperar mi memoria. Ha intentado sacarme temas de conversación lo cual me encuentro anotando ahora mismo.

*Más tarde*

-¿Hmmp?¿Axel?- Digo viendo al enfermero frente a mi -Si (t/n), soy yo Axel- Él empieza a tomar mi presión, cambiar mi suero, limpiarme, ver mi temperatura, en fin, lo de siempre según mi diario mientras hablábamos un rato y tocamos el tema del enamoramiento. Ya nos teníamos confianza.

-¿Entonces Quién le gusta?- Él se paraliza un momento y luego me mira no sé si sonrojado -¿por qué la pregunta?- Dijo un poco nervioso mientras cambiaba mi vendaje de la cara. -¡auch! Solo es curiosidad- Dije mientras me daba un espejo en el que vi que tenía en mi cara unas cuantas cicatrices -Vaya, ¿con qué esta era mi cara bajo las vendas- toque una de las cicatrices ya totalmente cerradas, se sentía rara -Bueno, tú querías saber quién me gustaba,  ahí lo tienes-  Lo miro y él me sonríe-¿No es una broma verdad?- Él niega con la cabeza - No, no es para nada una broma- Yo empiezo a sonreír -Lastimosamente por la pandemia no puedo besarte ahora mismo- Me quedé rojita de la emoción y le correspondí y pues acepté estar con él para luego anotarlo inmediatamente en mi diario.

Cuando Axel se fue me quedé sola en la habitación, al parecer fue a buscar a mi doctor William. Escucho que la puerta se abre y es William. Mi incomodidad hace presencia otra vez.

-He escuchado todo tras la puerta- Dice serio -Sé que es algo que no debería de haber hecho pero eso no está bien mientras tú y yo seamos pareja- Dice acercándose a mi -Le pregunté a él y de hecho el no recuerda que usted le haya mencionado una pareja- Pareció maldecir en voz baja y luego volver a mirarme -Y si éramos pareja pues, yo no te amo, terminamos- Me miró indignado y en silencio por unos segundos pero procedió a hacer mis chequeos en silencio mientras me miraba con seriedad. Ahora si que me da miedo.

*Meses después*

*Narra Axel*

Al fin mi querida (t/n) pudo salir de ese hospital aunque tendrá que permanecer en silla de ruedas por el resto de su vida y si sucede cualquier cosa, el hospital estará totalmente cerca.

-¿Tienes tu diario?- Digo alistándola en mi auto. Ella asiente -Muy bien, en marcha- Poco antes de subirme veo a lo lejos a un enojado William desde la entrada del hospital. Él ya no puede hacer nada para incomodar a esta chica. Ella ya le terminó y tengo el permiso legal del hospital para llevármela a casa y darle los cuidados necesarios para hacer que se sienta feliz. Yo solo me subo a mi Jeep y nos alejamos de ahí.

*Narra William*

¡MALDITA SEA! Solo me he descuidado poco de (t/n) y ya viene mi compañero enfermero de mierda y me la quita... y de manera legal para colmo.

Me calmé. No puedo dejar que nadie en el hospital sospeche de mis celos. Me guardé mi rabia por un tiempo pero ya se me ocurrirá algo tarde o temprano.

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*Narradora PO.V*

El covid-19 azotó con fuerza el hospital dónde tu pareja trabajaba, sin embargo, él no pasaba tanto tiempo en el hospital por permiso de su jefe para cuidarte a ti, te amaba y tú a él a pesar de tus problemas de memoria. Al día siguiente puede que perdieras sus recuerdos pero la sensación de calidez y el sentimiento de amor y cariño aún permanece en ti, y eso te hace que aparte del diario que te dio hace que no lo olvides del todo e incluso consiguió que un neurólogo intentase tratar tu caso.

-Si, como me lo suponía. El problema principal aquí es tu hipocampo- Tu sólo diste un suspiro, sintiéndote tranquila, era lo que tu novio te había explicado -Pero no te preocupes, confío en que estarás mejor tarde o temprano- Tu sonreíste de alivio -Gracias doctor- Él empieza a empacar sus cosas para irse de tu nueva casa -El placer es mío, suerte- Dijo para luego salir hacia su siguiente cliente.

-Espero arreglar mi memoria dentro de poco- Dijiste en un susurro que tu novio a penas pudo escuchar -Descuida cariño, estarás bien- Dijo llevándote en tu silla de ruedas a la habitación que ambos ya que iban a ver una película de Marvel juntos. Te sube a la cama, luego se sube él, te abraza por detrás y se cubren con una manta mientras continúan con su película.

*Días más tarde*

-Vamos, ponte tu mascarilla amor, iremos a dar un paseo- Tú obedeciste y él se dispuso a llevarte en su auto a una montaña con senderos seguros para gente discapacitada como tú mientras que tú solo anotabas todo en tu diario. Tu vida estaba tranquila ahora, tenías un final feliz por ahora.