Mi Niñero Irresponsable. [°｡Luzuplay｡°]

[°｡Raúl｡°]

Narra ?????

Aplique un poco de presión sobre la puerta, estaba bien cerrada, conforme con eso, tome mi mochila y comencé a caminar a una cafetería que quedaba por la zona donde iba a trabajar. Al llegar al lugar, busque con mi mirada la mesa donde estaban mis nuevos jefes.

- ¿Quién eres? -hablo el Alfa al verme sentar, al instante extendí mi mano.

-Un gusto conocerlos, mi nombre es Raúl Álvarez, el reemplazo del niñero que contrataron. -casi al instante vi como frunció su ceño.

-Yo contrate a un Omega, exijo que me lo traigan. -hablo serio.

-Lastimosamente tiene un compromiso y no puede tomar el contrato, por eso me mando a mí, que estoy perfectamente calificado para el trabajo. -comenzó a negar con su cabeza.

-Mi hijo es un Omega, no pienso dejar que te quedes con él, tráeme ahora mismo al Omega que contraté. -decía serio, casi al punto de utilizar su voz de mando.

-Amor, el muchacho ya dijo que no estaba, si seguimos aquí podremos perder el vuelo, él se ve un buen chico. -hablo la señora soltando sutilmente sus feromonas.

-Confié en su esposa, llevo trabajando como niñero varios años y no es la primera vez que me toca cuidar Omegas, se muy bien controlar mis instintos. -en ese momento escuche su gruñido.

- ¡Bien! Donde la hagas algo te juro que te meto en la cárcel...-yo simplemente sonreí con amabilidad. -...Ten las llaves de la mansión, las llaves de los coches están en tu habitación, esta es la primera a la izquierda, y toma este dinero, en caso de que necesites más, solo para gastos de la casa, llámame y pide.

-A la orden Jefe. -hable dando un apretón, en ese momento pude sentir la fuerte presión, seguro por el disgusto. Al separarnos guarde las cosas en mi mochila y me gire donde la señora.

-Cuídalo bien, solo nos vamos unos 6 meses, mándanos fotos de él. -yo asentí, dejando un beso sobre su mano.

-No tendrán ningún inconveniente, que les vaya muy bien en su viaje. -todos nos paramos, yo tome mi mochila, mientras que ellos solo caminaban con sus guardias de seguridad detrás. Mientras caminaba decidí ver un poco más el contrato...

Narra Luzu

Abrí mis ojos por los rayos del sol que apuntaban a mi cara, más que molestarme hicieron que sonriera, me senté al instante en mi cama con mi más hermosa sonrisa, sin evitarlo corrí fuera de mi habitación.

- ¡Padre! ¡Madre! ...-grite sin recibir respuesta al instante mi sonrisa se extendió a más no poder. -... ¡Por fin solo!

Corrí a la sala y me tire sobre el cómodo sillón, no paraba de reír, podría hacer todo lo que quisiera sin que me controlaran, que mejor que esto. Tomé el control remoto y encendí mi televisor, colocando la canción "This Side of Paradise" a todo volumen. Escuchando la canción mientras miraba al techo, me sentía tan libre...

-Mmmm... ¿Quién podría ser a esta hora? ...-pregunte al escuchar unos golpes en la puerta, le baje un poco a mi música y comencé a caminar a la entrada, mientras cantaba parte de la canción. -...Are you lonely? ...Our fingers dancing when they meet...

Abrí la puerta encontrándome con un chico alto y musculoso, este tenía el pelo de un castaño oscuro y un mechón tinturado de rubio, también tenia un piercing en su ceja derecha y sus ojos eran de un hermoso color miel. Sin evitarlo olí el ambiente, tenia un fuerte aroma a Café y Menta olor digno de un Alfa como él.

-Hola. ¿Quién eres? -dije con una sonrisa, él también sonrió, se veía tan guapo y sexy. Note como tomo mi mano delicadamente y dejo un beso sobre ella. Mis mejillas se ruborizaron un poco por la acción, reí un poco para distraerlo.

-Un placer conocerte, soy Raúl, tu niñero. -al instante mi sonrisa se desvaneció y se me bajaron los colores de la cara, cambiando todo mi humor a uno muy serio, que broma de tan mal gusto.

-Se equivoco de casa. -dije con mi ceño fruncido y le cerré la puerta en la cara.

-No me equivoque de casa. Gracias por la cálida bienvenida. -lo escuché decir, al darme la vuelta vi como me mostraba las llaves de mi Padre.

- ¡Lárgate de mi casa! Yo no necesito un niñero. ¡Ya no soy un niño! -grite para salir corriendo a mi habitación y encerrarme en esta.

Rápidamente tome mi celular y llame a mi Madre, estaba muy enojado por la situación, ¿enserio mis padres no confían en mí? No me pueden hacer esto, yo he sido un hijo ejemplar siempre.

— ¿Luzu? ¿Pasa algo? -escuche la voz de mi Madre.

— ¡Sí, y algo muy grave! ¡¿Por qué tengo un niñero?! -mostré mi enojo lo más que pude, en ese momento sentí como mi padre tomaba el celular.

—Tienes niñero porque así lo hemos decidido, así que te aguantas. -gruñí, en ese momento escuché el gruñido de mi padre también.

—Es injusto, ya no soy un niño, me han dejado tres días solo y no me ha pasado nada, entonces porque debería tener un niñero ahora. -hable serio.

—Tres días no es lo mismo que 6 meses, además ya está ahí, te quedas con él y fin del problema, nos tenemos que ir, pórtate bien. -y sin poder decir más colgaron.

Dejé el celular sobre la mesita de noche que tenía y me recosté furioso en mi cama, sabía que no podía confiar en ellos, ahora todos mis jodidos planes a la basura por ese estúpido Alfa que atiende al nombre Raúl. Pero que ni crean que me voy a quedar de brazos cruzados, haré que renuncie y me deje tranquilo.

-No importa si traen otro estorboso niñero, también haré que renunci...ahh...-me encogí en mi cama, la primera oleada de mi celo había comenzado.

Cuando paro, tome rápidamente las pastillas que tenia en mi mesita de noche, mi celo se había adelantado, al tomarme la pastilla me recosté en mi cama, dándome cuenta que toda mi habitación se había llenado de mi aroma a Uva y Arándano, lo mejor que podía hacer ahora era dormir, ya después planeare como echarlo de mi casa...

.......[°｡Una hora después｡°].......

Un delicioso olor entro a mi habitación, yo me senté en la cama y aspiré ese aroma, parecía ser pizza, al instante sentí como mi estomago rugió.

~Deberíamos ir y comer un poco...

-regresaste, no pensé que te lo tomaras tan enserio -dije a mi gato interior.

~Sí regrese, no me gusto para nada que me gritaras diciendo que me callara, agradece que te deje en paz estos meses, no pensaba regresar, pero ya que. Mejor párate y vamos por un trozo de pizza ese olor me va a volver loco...

Yo me pare de mi cama y abrí la puerta, salí de mi habitación y camine siguiendo ese exquisito olor, cuando mire a la sala vi a Raúl sentado en el sofá con una caja de pizza mientras veía una serie, él se dio cuenta de mi presencia ya que me sonrió.

~¡¡Miau!!... ¡¿quién es el guapo?!...

~Cállate, solo es mi estúpido niñero...

- ¡Ey! ¿Quieres un poco? -yo lo mire serio, no por esto echaría a perder mi plan.

Caminé hasta él, cogí un trozo de pizza y me fui sin decir nada, volví a mi habitación cerré la puerta y me acosté en la cama, comenzando a comer mi pizza tranquilo mientras pensaba en diversas cosas y entre ellas me acorde que mañana me tocaba regresar a la universidad. Al acabar de comer mi pizza fui al gran baño de mi habitación, ahí me lave las manos y cepille mis dientes, cogí un poco de agua y me lave la cara.

Una vez listo me puse una camisa que me quedaba grande, perfecta para ser pijama, me acosté en mi cama y casi al instante todo mi cuerpo se relajó, yo cerré mis ojos y me dejé llevar...