¡Esto es guerra!.
Parisa POV.
Ya hoy me toca ir a la casa de los niños para cuidarlos, ya regresaron de sus días con su papá —ellos extendieron un poco la estancia en la mansión— camino por las calles de Alemania, todavía me impresiona todas las personas que veo caminando, jugando y hablando en los parques. Yo ya era amante de Alemania solo por esa vez que viene pero de verdad me está encantando mucho más cada día, aunque mi bolso está lleno de botellas que tengo que reciclar en un rato.
El frío está empezando pero no es para exagerar, solo llevo una chaqueta, unos vaqueros negros, unos tenis negros y una camisa unicolor. Me maquillé natural y me hice unas hondas en el cabello pero nada más.
Me abren las rejas de la mansión, entro y veo un carro nuevo —seguro otro bebé del presidente— que sigue molesto sin razón alguna, yo no hice nada para molestarlo...bueno molestar si noche con mis vómitos pero yo le dije que se fuera y no quiso.
Toco le timbre, nadie me abre vuelvo a tocar el timbre y me abre Alessandro.
—Pero que tenemos aquí —se hace un lado para que pueda pasar—. Escuché tu conversación con el rey de la mafia italiana, al parecer se conocen muy bien— debí apagar desde un principio el micrófono pero si lo hacía iban a adelantar la investigación.
Me llaman los niños y agradezco eso, me acerco a el salón de juegos.
Abro la puerta y no veo a ninguno de los hermanos —. ¿Niños?, ¿Que juegan?— al llegar a una mesa Verde, con unos palos negros de madera y unas pelotitas de colores siento como gritan todos.
—¡Arriba de ella!— gritan todos.
—¿Cómo...— de me vienen todos encima, mi lindo bebé del teléfono estaba en mi tracero, seguro ya está más que triturado como mi columna.
Los niños se ponen de pie riendo, yo hago lo mismo con la espalda adolorida —. ¿Me puedenn decir, a qué viene eso?— salen corriendo a toda velocidad queriendo huir de mí.
Voy detrás de ellos y llegan a donde está Athan, entre todos sacan unos envases con algo verde y mocoso, ¿Son mocos? Yo no sé que es pero mejor es correr.
Me regreso corriendo pero Lucas hecha en el piso la cosa verde, mientras que Oliver lo ayuda —y eso que es mi favorito— me caigo por obvias razones y me hechan la cosa esa mocosa.
Me intento poner de pie pero no puedo porque me resbalo, todos estallan de risas. Cuando logro ponerme de pie voy caminando con mucho cuidado sosteniéndome de las paredes hasta el baño con el dolor de espalda más grande que he tenido, parezco vieja ya.
Cierro y con seguro porque ni en eso creo ya, me limpio la cara y me cambio de ropa, que bueno que la Nana me dijo que trajera ropa de respuesto por si tenía que quedarme por un imprevisto o los niños me ensuciaban.
Salgo descalza porque los tenis ahora están sucios, solo tengo una blusa suelta de color blanco viejo, con un vaquero blanco.
—¡La comida está servida!— dice desde el comedor la voz de la madre de los niños.
Me acerco al comedor —. Hola, preciosa. ¿Llegaste hace rato?.
—No, llegué hace unos 15 minutos.
Tomo asiento al lado de Athan porque no hay otro lugar disponible.
“es una trampa”
A todos nos van sirviendo la comida, veo que el mío tiene una tapa de metal como la de todos —. Es sorpresa, una nueva receta.
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La Corona Negra /The Crowns I.
RandomPrimer libro de la biología de las coronas o the crowns. Siguiente libro: La Corona Blanca. The Crowns II. ¿la reina roja? ¿la reina azul? ¿que tiene que ver?. Parisa es una princesa de Suecia, juntos a sus hermanos. ella decide emprender a estudia...