En el receso pude hablar más tranquila con Minseok, nuestras clases habían terminada y no asistiriamos a la primera clase luego del receso.
- ¿Por qué te pusiste tan mal? - pregunté tomando de mi botella de agua un poco de la misma.
- Ella.......ella me había contado la vez que se le declaró en el receso, me contó que le había dado una carta y que él simplemente la rompió en frente de su cara y la rechazó de una forma muy humillante. - sus ojos brillaron por lo cristalizado que comenzaban a ponerse.
- ¿Cómo sabes si es verdad? - él me miró, solo quería llorar así que decidí no tocar más el tema - ¿por qué me molestabas?
- Porque ella lo hacía, se que suena tonto pero ella me gustaba, una vez pude notar que estaba triste pero nunca le pregunté el porqué. - jugaba con la comida en su plato, no había comido ni un poco.
- Claro, muy lógico, en vez de ayudarla a molestarme tal vez hubiera sido mejor detenerla y saber que le pasaba. - solté como opción, no era con alguna intención realmente.
- Tienes razón, pero estaba enamorado de ella y no sabía cómo tratar de acercarme a ella, por eso hice eso.
Nuestra conversación siguió un par de minutos más hasta que volvimos cada uno a su salón, ahora me tocaba Inglés por lo que estaría con Yeji, casi siempre me tocaba ayudarla en las actividades ya que no le iba muy bien en la materia.
- Te ví con Seok, ¿paso algo? - pregunto mi compañera de banco mientras sacabamos algunos cuadernos esperando la llegada de la profesora.
- No es nada importante, solo algunos asuntos que quería resolver con él. - respondí con la vista al frente, no estaba interesada en hablar detalladamente sobre él.
- Si te comienza a molestar de nuevo puedes decírmelo y yo le parto la cara sin problema. - me daba risa como siempre fue así de valiente, ojalá y yo pudiese ser como ella.
Pasamos la última hora y pudimos salir para regresar cada uno a su hogar, sabía que en la salida me encontraría con el rubio de oyuelos, sería un buen apodo.
- Hola oyuelos. - saludé al chico, quien estaba de espaldas esperando a que saliera.
- ¿Oyuelos? ¿Así me llamarás? ¿Dónde quedó el respeto? - dijo haciéndose el ofendido, se veía muy tierno.
- No exageres Chan, es solo un apodo, ¿no te gusta? - este sonrió dejando al expuesto sus oyuelos, algo que captaron mi atención inmediatamente - ¿lo ves? Tus oyuelos me inspiraron para tu apodo. - ambos reímos y comenzamos a caminar hacia mi departamento, como vivía en el mismo edificio que su abuela aprovechaba para visitarla junto a su hermano.
- ¿Qué tal estuvo tu di- - alguien interrumpió, una voz que sería reconocible en cualquier lugar, era él, ese chico de pequitas corriendo hacia nuestra dirección.
- ¿Ya te vas? - preguntó intentando recuperar el aire - quería ir al parque contigo hoy.
- Tengo tarea Lix, tal vez mañana. - el pecoso se desanimó un poco por lo que se me ocurrió algo - ¿quieres venir conmigo? - sus ojos brillaron cuando le ofrecí venir conmigo, fue tan lindo.
- ¡Siii! - agarro mi mano y comenzamos a caminar nuevamente mientras entrelazaba nuestras manos, sabía que comenzaría a sudar en cualquier momento, nunca me habían tomado de la mano antes, por lo menos no un chico.
- Recordé que tengo algunos trabajos que hacer, mañana hablamos Daehyun. - hablo el rubio deteniendo mi andar, no quería que se fuera.
- No hay problema Chan hyung. - hablo el pecoso, era como si hubiera deseado desde antes que Chan no viniera pero eso no puede ser así, el es Félix, el es amigable, ¿o no?
- Per- - quise detenerlo pero me interrumpió mi acompañante.
- Daehyun, Chan debe tener trabajos que hacer, él no miente, mejor vamos y dejemos que los haga tranquilo. - comenzaba a tirar de mi para seguir el camino mientras yo miraba como el mayor caminaba en dirección a su casa, no se despidió.
Caminamos agarrados aún de las manos, fue muy lindo después de todo, Félix me hacía sentir tan bien y sus palabras me hacían muy felíz, también lograban ponerme un poco nerviosa.
Hablamos de diferentes temas pero había uno que quería hablar con él, Haneul, ella era un tema delicado para ambos, pues, estábamos involucrados en su vida.
- Pequitas. - dije colocando un tazón con unas palomitas en la mesa de la sala - ¿podemos hablar de Haneul? - él se tenzo inmediatamente, la tranquilidad había desaparecido remplasandose por un ambiente incómodo.
- ¿De que quieres hablar sobre ella? - preguntó mientras tomaba un poco de palomitas.
- Quisiera saber si Haneul y tú habían sido....ya sabes, novios o algo así, porque te conocía y no creo que solo se hayas suicidado por simplemente gustar de vos. - mis palabras salían sin pensarlo dos veces, sus ojos se perdieron en el suelo y todo él se perdió en sus pensamientos - Félix. - llamé logrando captar su atención nuevamente.
- Ella.....ella se me declaro, pero no hubo nada más que eso. - dijo algo nervioso, sus manos temblaban ligeramente y su voz parecía que saldría cortada - no éramos cercanos o algo así.
- Pero.....¿sabes? No importa, se nota que no quieres hablar del tema. - dije prestando un poco más de atención a la televisión - ¿por qué respondiste tan rápido cuando Chan dijo que se iría? - la duda había llegado repentinamente mientras veíamos una escena parecida a la que viví con ambos chicos.
- Porque quería estar contigo, además, Chan nunca miente cuando se trata de estudios o responsabilidades. - paso su brazo por mis hombros juntandonos más - ¿sabes? No quiero esperar hasta el sábado para decirte ésto. - el chico me agarró de los hombros haciendo que lo mirara.
- ¿Que sucede? - mis nervios comenzaban a recorrer todo mi cuerpo, desde la punta de los pies hasta mi cabeza. Sentía que la pregunta o lo que me diría es lo que pensaba, pero no quería hacerme falsas iluciones.
- Pasa que..... - su pausa me ponía cada vez peor, sentía que vomitaria en cualquier momento - lo que sucede es que me gustas, me gustas mucho y aún no sé como reaccionar cuando estás cerca, siempre tengo miedo de hacer algo mal frente a ti y que te termines burlando, desde que Innie nos presentó mi corazón comenzó a palpitar más rápido pero en ese momento no sabía que me pasaba, pero cuando hablamos más me di cuenta.....me gustabas y me traías completamente loco. - terminó de hablar tapando su cara, la vergüenza inundaba cada parte de su cuerpo.
Yo estaba en shock, realmente no sabía que responder, no sabía si me gustaba o solo era una pequeña atracción. Mis mejillas estaban que ardían, mi respiración era agitada y mi estómago dolía.
Cuando pensaba en decirle que también me gustaba mi corazón se estrujaba como si me dijese que no era así y que no debía afirmar nada sin si quiera tenerlo claro.
Mis manos jugaban entre ellas debido al nerviosismo, más lo que sudaban era una fea sensación de asco con felicidad. Era algo que no podía explicar.
Ojalá y las palabras que solté jamás las hubiera dicho.
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La chica de las cartas suicidas ⎯ Bang Chan
Fanfiction★ .......... 𝐁𝐀𝐍𝐆 𝐂𝐇𝐀𝐍 .......... ★ 𝗧𝗪: Suicidio, autolecion y violencia. "Bang Christopher Chan, un estudiante de último año, encontró un papel con unos escritos algo suicidas." ¡ N͟o͟ s͟e͟ p͟e͟r͟m͟i͟t͟e͟n͟ a͟d͟a͟p͟t͟a͟c͟i͟o͟n͟e͟s͟ u͟ c͟o...