Capitulo 15: Momento

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— Simplemente Soo lo miro por unos segundos, para después formar en sus labiales aquella tan característica sonrisa en el; la encantadora forma de corazón decorando su rostro y mejillas, las cuales al elevarse se remarcaban y sus ojos se volvían dos medias lunas, simplemente aquello apreso el corazón del moreno que por un momento solo se quedo en silencio, olvidando lo que había dicho y el posible rechazo del chico, podría jurar que en esos momentos todo se había detenido y podría poner sus manos al fuego porque ahora el mayor resplandecía mucho mas de lo que debería ¿Y si era un estrella en pleno día? ¿Podria ser así? Si era así ¿Como seria en la oscuridad? ¿Un sol? Lo mas probable— No tiene porque molestarme Kai, ¿acaso debería alguien molestarse porque correspondan sus sentimientos? — Normalmente habría titubeado o se habría puesto nervioso simplemente huyendo lejos de ahí, pero era imposible alejarse del nombrado aun mas cuando le había dado aquella confesión con la cual solo en sueños pensó escuchar. ¿Que es lo que tenia? ¿Porque lo hacia sentir de esa manera? Tan...tan serena, tan confiada, tan...Tan no se, no sentía miedo, ni sentía vergüenza, solo tenia alegría, pensó que jamas tendría aquel honor para el.

— ¿Le gùsto también? —Si, sabia que su pregunta era mas que ridícula, pero, necesitaba asegurarse de que lo que había escuchado era real y no algo de su imaginación así que ansioso lo miro esperando a que este le respondiera y ese sutil movimiento de su cabeza de arriba hacia abajo le dio aquella paz — Ah... ¿Que tal si..va— No alcanzo a siquiera terminar su palabra cuando sintió sus labios ya ser apresados por los contrarios, aquel sabor tan conocido pero a la vez tan extraño se impregno entre sus sentidos y aquella suavidad de la piel de los labios le hicieron cerrar los ojos con tan solo el roce.

La arena poco a poco iba hundiendo su cuerpo en tan solo centímetros en cada paso que daba, había notado una clara diferencia entre la húmeda y la seca, la primera lo hundía rectamente dejando restos de estas en sus zapatos, y en la segunda lo hundía pero dejando que se esparciera por todo el largo de la plataforma...Por un momento había pasado por su mente ser arena húmeda en el menor, dejando en el una marca, quedándose agarrado en el para que este jamas se fuera, aunque sea un poco de el, haría que este lo recordaba ¿Que clase de arena seria aquel joven de cabellos castaños que ahora se encontraba agachado? Esperaba que fuera lo mismo que el, así ambos se mezclarían siendo uno pudiendo de esta manera jamas separarse, porque aun quisieran jamas lograrían saber cual grano pertenecía a quien, sabia que era algo ridículo pero su cabeza andaba de esa manera.

— Uh —Exclamo arrugando el puente de su nariz cuando metió tan solo la punta de sus dedo que había sido mojado por el agua.— Ay no, salado —Dijo el moreno levantándose de golpe para comenzar a limpiar como podía sus labiales con el dorso de su mano ya que aquel sabor era sumamente desagradable. — No me gusto — Murmuro levantándose a la vez que limpiaba sus manos en sus pantalones, exactamente en sus muslos para así dejar una parte mas oscura de lo que debía en la tela, por la humedad.

— Babo — Comento acercándose hasta el para ayudarle a limpiar sus labiales los cuales aun se encontraban húmedos con el agua salada— Eso te pasa por meter tu boca donde no debes —Reprocho ordenando uno que otro cabello que caía por la frente del mas alto, en algunas ocasiones le costaba creer que aquella persona era la misma, que en muchas veces le elevaba las hormonas y le dejaba el cuerpo temblando por aquellos toques y ahora aun mas, ya que había probado el placer de esos dedos recorrer cada parte de su cuerpo y junto con aquellos carnosos labios que este poseía. Rozando sus manos avanzaron por el camino imaginario que creaban sus pies y sus miradas al avanzar hacia donde habían dejado sus cosas. No sabían bien ni lo que hablaban pero lo hacían, con tan solo el pensamiento de escuchar la voz impropia, sin duda había una conexión fuerte entre ellos y aunque ellos quisieran pasarlo por alto, no había modo de detenerlo.

Lo primero que hizo Kai al llegar fue sacar el mantel amplio de cuadrille en tonos rojos y blancos, como en las películas del cine o algo así, había pensado que era tonto pero, ¿Que era de un picnic sin aquel detalle? Encima de la tela dejo una serie de fuentes de colores con frutas dentro las cuales se mantenían aun cálida por el hecho de que aquellos envases eran a prueba de la temperatura no deseada . En un plato transparente puso los panes de molde triangulares que le había costado casi los 10 dedos de sus manos, pero se veían bien y realmente esperaban a que al chico le gustaran, pero tenia un plan bajo la manga, si los encontraba malos solo diría que los compro y que la verdad también los hallaba malos por lo que tendrías que devolverlos a la tienda, si este pedía ir a acompañarlo estaría jodido de por vida. 

—¡wow! Esto se ve realmente bien — Se confeso recorriendo con su mirada todo aquello, era lindo, el contraste de las cosas eran llamativas, además aquel detalle de el mantel le pareció sumamente adorable de su parte ¿Como podía ser tan lindo algunas veces? ¿como podía ser tan sexy otras veces? Era un misterio y como nunca tenia ganas de descifrarlo, sabia que no se arrepentiría de ello, pase lo que pase, nada de lo que le pasara o hiciera se arrepentiría. Tomo  entre sus dedos un trozo de piña en forma de corazón y antes de echarla a su boca la observo divertido ¿Las habría hecho el? Era difícil pero, por un momento quería soñar, quería pensar que era importante. Dio una mordida y sonrió ampliamente, aquel dulce pero a la vez amargo sabor hizo que en sus mandíbulas creciera un pequeño escalofrío dándole un sabor perfecto.— Esta todo muy bonito —Se confeso echando por completo aquello que había sacado.— ¿Lo hiciste tu? —Necesitaba saber ya, sea un no o un si necesitaba saber que tanto era para el.

—Si..lo hice yo, en caso de que algo no le guste, no lo hice yo —Bromeo mirando cada expresión en el rostro ajeno, estaba nervioso, realmente se sentía nervioso por lo que pensara el chico, por primera vez en la vida habría deseado tener superpoderes...Leer pensamientos, pero ahí estaba muriendo por saber si lo que el decía era verdad o simplemente sus expresiones eran falsas para no hacerlo sentir mal ¿Quien sabia? — Uhm...¿Como esta? —pregunto mientras servía dos vasos con jugo natural también echo por el, aquello le había costado porque no sabia como encender una de esas cosas que daban vuelta y molían todo, si, era un asco en la cocina pero había dado su máximo esfuerzo en todo.

— ¡Esta delicioso! — Aquello había salido desde su corazón, lo había hecho el chico solo para el y estaba rico aun mas ahora. En su vida habría alguien puesto tanta atención en el como lo hacia el, había tenido dos relaciones, pero habían sido un fracaso total, lo que siempre busco ninguno se lo dio, no pedía tanto, pero suponía que nadie podía dar ni siquiera un poco, a excepción del joven que se encontraba frente a el. 

Alli pasaron casi toda la tarde simplemente comiendo, hablando y riendo, pasando el momento de la forma en que mas les gustaba, juntos, a pesar de el poco tiempo que estaban había sido todo maravilloso desde el primer momento había existido algo así como un ''crash'' que pronto haría un ''boom'' para nunca hacer un ''crac'' si, asi sonaba cuando algo se rompía o terminaba, así sonarían sus corazones y así terminaría su corto sueño. 

Las horas, los minutos y los segundos fueron avanzando, subiendo sus números y luego volviendo a bajar para así seguir avanzando hasta llegar al punto en que el sol comenzó a caer, todo era tenue, se podía percibir aquel horizonte partiendo en la mitad una gran figura naranja con amarillo a lo que algunos, mas bien todos, llamaban sol. 

—Venga Hyung — Dijo el de pieles oscuras mientras le estiraba la mano para que este la tomara y así pudieran caminar hacia el medio de la playa sumamente apegados hacia el mar. Soo se sentó y pronto sintió un calor abrazador tras su espalda y un pequeño peso en su hombro, sabia quien era y no tenia que confirmarlo ya que de inmediato aquella respiración lo calmo dejándolo ahí, simplemente perdido en el cielo que poco a poco iba oscureciéndose. Sabia que la oscuridad le daba miedo, incluso en esos lugares, siempre había visto películas de terror y había quedado con ese pensamiento, seria perfecto para que lo mataran, pero en medio de sus fuertes brazos, no le temía nada, incluso si un asesino en serie se cruzara en frene a ellos, tenia al menor con el y con el lo tenia todo. 

Save me •Kaisoo•Donde viven las historias. Descúbrelo ahora