𝙏𝙬𝙤 𝘼𝙡𝙥𝙝𝙖𝙨, 𝙊𝙣𝙚 𝙊𝙢𝙚𝙜𝙖 . [𝘚𝘰𝘰𝘫𝘶𝘯𝘬𝘢𝘪]

[26]

— ¡Camillas, Traigan las camillas!.

En unos segundos la sala se lleno de doctores tomando el cuerpo de YeonJun y transportandolo a una camilla para llevarlo hacia una habitación.

— Tiene una herida en el brazo. Musculo deltoides. — Aviso el para médico. —Tomamos sus signos vitales, sigue respirando.

El doctor asintió. — Vamos, rápido o seguirá perdiendo sangre. —Grito hacia las enfermeras y todos empezaron a correr.

La camilla de YeonJun fue tomada y los pedales empezaron a moverse hacia el ascensor. Rápidamente fue transportado al piso 5 donde fue ingresado en la habitación 212. YeonJun solo miraba luces blancas por todas partes, sus pupilas estaban notablemente dilatas y el dolor seguía prominente en su brazo derecho.

Tal vez era el mareo que estaba haciendo que su cabeza diera vueltas y su equilibrio se perdiera. Miró hacia su izquierda y vio cómo los doctores empezaban a conectar el equipo y todas aquellas cosas que utilizarían. Estaba confundido más que nunca y aún en shock, su respiración se volvió errática al momento de recordar el porqué estaba ahí, con una herida de bala en su brazo, no quería aceptarlo. Era difícil aún analizar todo lo anterior...

— Traigan una mascarilla de oxigeno. —El doctor volvió a hablar conectando el equipo el cual empezó a medir su pulso.

Unas manos apretaron su pecho y rápidamente rompieron parte de su ropa con unas tijeras, todo se volvió negro cuando el doctor se acercó con una mascarilla y solo la puso sobre la boca y nariz de YeonJun.

— Doctor... —Los dos alfas se levantaron rápidamente y caminaron hacia el beta alto que llegó hacia la sala de espera con una bitácora en su mano.

El doctor dio un pequeño saludo y los alfas lo hicieron de igual manera nerviosos, siendo serios en todo momento.

— Doctor... ¿Cómo está YeonJun?. —Pregunto Soobin con voz quebrada.

— Él señor YeonJun está en excelentes condiciones. Al principio tuvimos problemas con su respiración, pues, había un cambio en la palpitacion que le hizo tener taticardia en la misma operación. Gracias al equipo de enfermeros pudimos restablecerlo. —Dijo y eso para los alfas fue tener aquella tranquilidad anhelada desde hace horas, cuando ambos llegaban de sus trabajos y les avisaron que YeonJun había tenido un accidente.

— Muchas gracias Doctor... —Los dos dijeron al unísono, sinceros y agradecidos.

— Por cierto. — Volvió el doctor— Hay un problema y no se si alguno de ustedes son los alfas de YeonJun...—Entre cerro sus ojos buscando una respuesta.

Ambos alfas se miraron entre sí.

— Ambos somos alfas de YeonJun Hyung. — Respondió Kai. El doctor miró sorprendido al par de alfas, pero no objeto...

Simplemente abrió su bitácora sobre sus manos y empezó a ojear hasta llegar a la página indicada. — Bueno, supongo que es correcto comentarles esto... —Les miró a ambos de reojo y  sobre sus lentes y esos solamente a sintieron en silencio. — El señor YeonJun está en cinta y tiene ocho semanas de gestación...

Hubo silencio.

HueningKai fue el primero en reaccionar ante la respuesta, sintiendo su corazón latir a un ritmo acelerado y tal vez la azúcar en su cuerpo había bajado de un tirón. Miró a Soobin con los ojos en blancos y este aún no reaccionaba manteniéndose espectante. Fueron minutos después cuando Soobin tomó con una de sus manos el hombro de HueningKai recargando su peso sobre esto y cayendo al suelo por un desmayo.

Él doctor soltó un quejido asustado y rápidamente se agachó para ayudarle al igual que el menor de los tres. — Doctor... ¿Es verdad...?

— Le tuvimos que hacer una prueba de sangre por si se requería una transfucion y los resultados dieron positivo...

1 semana después.

– Wonnie, hola bebito. —YeonJun sonrió tomando al bebé entre sus brazos. Él niño en cuanto sintió el calor del omega y olio su dulce aroma sobre su pecho, se regocijo y abrazo ahi mismo.

La puerta de la habitación fue tocada. YeonJun levantó su vista del bebé y miró hacia la puerta, donde se encontraban dos altos y grandes alfas esperándole.

— Buenos días YeonJun Hyung... —Saludaron los dos al mismo tiempo poniendo una sonrisa triste en su cara.

Ambos chicos se sentaron en la cama del omega, mirando como este sostenía a él bebé entre sus brazos mientras le hacía mimos.

Taehyun no había querido regresar a casa desde aquella vez y aún seguía en shock sin recuperar la noción del tiempo. YeonJun aún estaba triste, no sólo por Beomgyu, sino también por Taehyun, su mejor amigo. Ambos cumplieron y cumplen un rol importante en su vida, ver a su amigo devastado le quiebra el corazón. Sin embargo debe de ser fuerte ahora mismo y ayudar a Taehyun a levantarse de lo que actualmente parece imposible.

JungWon, aunque era un bebé, sabía que su papá no estaba ahí... No estaba su olor, no había rastro...