𝐒𝐈́, 𝐒𝐄𝐍̃𝐎𝐑 ━━𝑳𝒆𝒗𝒊 𝑨𝒄𝒌𝒆𝒓𝒎𝒂𝒏.

ʿ𝑪𝒂𝒑𝒊́𝒕𝒖𝒍𝒐 𝟓𝟖ʾ

Aún seguía yendo a la empresa. Debía seguir trabajando pues ahora compartía gastos con Eren, él obviamente no lo aceptó al principio pero no podía vivir de a gratis en su departamento así que después de tanto insistir accedió. Además aún tenía que ahorrar dinero para poder pagar mi matriculación en la universidad, nunca perdí las ganas de continuar mis estudios. A eso sumándole que también le mandaba dinero a mi familia como siempre lo había hecho.

Estaba en la empresa, nadie de mis amigos sabía lo que había pasado respecto a Rivaille. Sólo Eren y Mikasa. Ni siquiera Hanji o Nanaba que siempre estaban al pendiente de lo que sucedía entre ambos.

—¿Cómo te va con Marco?

Pregunté mientras escribía algo en mi computadora, no pude evitar reírme cuando la escuché suspirando como una tonta enamorada.

—Es un sol.

Entrecerré los ojos y volteé a verla, ella sólo rió por mi expresión pero siguió hablando.

—Es muy atento, romántico, tierno pero sobre todo es tímido —recargó su mentón sobre su mano derecha—. Me gusta mucho.

No pude evitar sentirme feliz por ellos. Me alegraba que al menos nadie de mis amigos estuviera sufriendo por rupturas amorosas.

—Aún no supero que no me lo hayas contado antes —me hice la ofendida.

—Charisse, no lo tomes a mal. Soy un poco reservada cuando de muchachos se trata. Además has estado pasando por momentos no tan buenos con el arquitecto. No podía llegar y contarte lo bien que me va con Marco cuando tú estás triste, sería muy egoísta de mi parte.

—Te entiendo, pero no importa. Me he acostumbrado a ver el amor de lejos así que no me hubiera molestado —me encogí de hombros.

Seguímos hablando de cosas vanas mientras hacíamos nuestro trabajo, aunque la mayor parte de lo que yo hacía era sólo serle de ayuda a Mina ya que ahora Rivaille se encargaba de acomodar su propia agenda. Suponía que lo menos que quería era que yo tuviera que verlo o hablarle. Así que no me tomé la molestia de reprochar sus decisiones.