Captivating Enemy [Adapt./PinSon]

Cap.21

Plan miraba fijamente a Saint, éste otro mordía su labio inferior y miraba hacia el plato vacío que tenía frente a sus ojos. Su amigo ya le había dicho todo y pues, tenía razón en cada una de las cosas, tal y como él se lo había imaginado.

El maestro negaba con su cabeza y soltó un suspiro casi derrotado, realmente no comprendía que demonios pasaba por la cabeza de su castaño amigo.

– ¿Qué más quieres que te diga?. –torció sus labios en una mueca y se cruzó de brazos– Solo diré por última vez que realmente lo estás empeorando todo Saint.

– Lo sé.

– No. No lo sabes, o sino, no estarías aquí contándome todo esto con la semejante cara que tienes.

El castaño se quedó en silencio, le daba la razón al mayor frente a él.

– ¿Qué piensas hacer ahora?, –arqueó su ceja– ¿Pensarás en hacer la vista gorda a todo?.

– No.. de verdad no sé qué hacer Plan.. –lo miró con angustia– Le dije algo que no debería de haber dicho. Realmente me dejé llevar en ese momento y solo salió de mis labios, ni siquiera fui capaz de medir la estupidez que estaba diciendo –tomó su cabeza con ambas manos.

– Lo que tú dijiste no fue una estupidez, es lo que sentiste en ese momento o mejor dicho... es lo que sientes realmente. Ya no te engañes hombre.

Nuevamente silencio y el mayor nuevamente sintió que le había dado la razón.

Al solo mirarlo le daban ganas de darle un puñetazo por idiota, muchas veces se lo dijo en el pasado...

"Esa relación extraña que tienes con Tanapon se te saldrá de las manos, no juegues con fuego Saint.. porque vas a salir cubierto en llamas." 

Y así fue, e irremediablemente ya no había nada que pudiera apagar el gigantesco incendio que estaba consumiendo de a poco al castaño.

Pero por otro lado, nunca lo había visto tan mal, tan confuso, tan desorientado con respecto a si mismo y a lo que sentía. Saint era un tipo seguro, pero justo ahora era un manojo de enredos e inseguridades que estaban arremetiéndose contra él.

– Todo esto es tan confuso.. –dijo en voz baja, como si fuera parte de un monólogo.

– Piensa bien las cosas Saint, no te precipites y... hazle frente –el menor lo miró a los ojos– Ya no escapes, una vez que resuelvas tu conflicto personal, debes resolverlo con Perth lo antes posible. La situación en la que están es demasiado incómoda y estresante, no pueden seguir viviendo así. Ya es tiempo de que paren con toda esta estupidez y se aclaren de una vez por todas. ¿No crees acaso que es lo justo?.

– Sí, tienes razón.

– Bien.. –lo miró entregándole una sonrisa conciliadora– Piensa bien las cosas amigo, sé que todo esto es muy enredado, pero creo que sabrás tomar la decisión correcta.. –acercó su mano al pecho del castaño y señaló su corazón– Pero recuerda dejar de lado la racionalidad y decidir con esto. Porque por hacerle caso a tu razón todo este tiempo es que estás donde estás ¿Comprendes?.

El castaño asintió y esbozo una pequeña sonrisa. Era por esas razones las cuales le confiaba todo al maestro, siempre tenía algo que decir. Por fuera podría verse despreocupado, extraño, hasta infantil, pero en realidad era alguien que siempre tenía la palabra precisa en el momento exacto.

Luego de aquello, se quedaron por unos minutos más y se retiraron del lugar,

Plan debía comenzar su clase en breves minutos y no sería bueno que el profesor llegara tarde.