Un joven rodeado de dinero, lujos y fiestas.
Pero amor no tenía.
Llenaba aquel vacío con alcohol.
Su abuelo al borde de la muerte pide una absurda condición para su futuro heredero.
"Una esposa y familia"
¿Cómo podrá buscar esposa en tan solo dos me...
La noticia de la inauguración estaba en la boca de todos. Las invitaciones habían sido repartidas ya y solo esperábamos la hora para iniciar.
Estaba terminando de arreglarme
Decidí vestirme muy elegante un vestido con mangas caidas color rojo
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(Uno así imagino para Elizabeth, hasta con el peinado)
Me veía diferente a los demás días, pero tenía que verme así, ya que era un día especial
Mis hermanas habían elegido un vestido elegante también al igual que mi madre.
Me sentía algo nerviosa pero estaba segura que me iría bien.
Mis hermanas y mi madre me esperaban en la sala.
Camine delicadamente hasta ellas y ahí estaba Meliodas esperando.
Su traje gris lo hacía resaltar el color de sus bellos ojos esmeralda.
Me ruborice apenas lo ví, le sonreí y caminé hasta a él.
Me abrazó y me dió un tierno beso en la mejilla.
Nuestra burbuja de amor se rompió al escuchar el -Aaaawwww - De mis hermanas al ver esa tierna escena.
Mi sonrojo fue más evidente.
Meliodas me soltó levemente igual de apenado.
Me tomo la mano y junto a nosotros caminaron mis hermanas y mi mamá
Llegamos hasta a su auto.
Me senté adelante junto a él y mis hermanas atrás.
Cerró las puertas y luego subió al asiento del volante y prendió marcha hacia el evento.
Este sería la primera vez en dónde narro lo que sucederá en el evento ya que no exhibire mis modelos hechos con las telas de la fábrica.
En el camino estuve algo callada, pensaba en todo lo que diría y tratan de tranquilizarme.
Al llegar al evento toda la prensa enfoco sus cámaras hacia nosotros.
Sonreí tranquila y comencé a caminar hasta las escaleras y a saludar a cada uno que me movía la mano.
Entramos y junto a Meliodas recibía gustosa a cada uno de los invitados.
Sabía que tenía que lucirme y realizar todo bien.
Este día toda la atención estaba en mi y no podía fallar.
La hora de iniciar el desfile comenzó y con ello mis nervios aumentaron.
Pero tenía que lograrlo.
Las modelos iban una a una caminando mientras yo al micrófono decía cada detalle usado, como el modelo de tela, detalles y costuras.
Al finalizar la pasarela todos aplaudieron y yo pose junto a todas las modelos.
Estaba feliz de que la pasarela fue un éxito y que todos estaban satisfechos
Salí junto a las modelos y conviví con ellas, tomaban selfies, y las felicitaba por tan bello desfile
Las dejé cambiarse y salí de nuevo al salón principal donde la gente comenzaba a beber y comer.
Algunos invitados me llamaban para felicitarme, otros más para pedirme un modelo en especial.
Les daba mi teléfono para que hablara con ellos tranquilamente otro día.
Me enfoque tanto en mi momento que había perdido de vista a Meliodas
Comencé a buscarlo por todo el salón pero no lograba encontrarlo
Hasta que por fin lo hallé, estaba de pie cerca de la barra de bebidas con una chica de cabellera rosacea.
Caminaba hasta ellos, segura de mi misma.
Al estar ya tan cerca tome a Meliodas de la mano y le sonreí
-¡Te encontré amor! Estuve ocupada detrás del escenario con las chicas, luego me detuvieron algunos invitados.-
El me miraba sonriente, feliz y orgulloso de mi.
Desvié mi mirada de él y ví a detalle a aquella chica.
Lo primero que me percate es del color de sus ojos, parecidos a los míos, tenía cabellera corta, casi a la altura de sus hombros, vestía un atuendo bastante llamativo.
Le sonreí y le pregunté su nombre
-Soy Lizbeth, mucho gusto Elizabeth, no sabía que tenías novia Meliodas.-
Desviaba su mirada hacia mi rubio y yo lo mire a él también
-¿Quien es cariño?-
Meliodas me miró y sin apartar su mirada de mi respondió
-¿Recuerdas aquella chica que te mencioné que me destrozó? Pues es ella.-
Sabía de quien se trataba, sentí mucho coraje y confusión
La mire con resentimiento y fruncí mi cara
-¿Y que hace aquí?-
Pregunté realmente enojada
-Eso mismo quiero saber.-
Contestó el de igual manera.
Ella dió un paso hacia atrás.
Nuestras miradas y tono de voz le dieron mucho miedo. Podia verlo en sus ojos.
Sin pensarlo se dió vuelta y camino lo más rápido que pudo para alejarse de nosotros.
La vi llegar junto a Melascula
Ahora entendía todo. Aunque algo aún me comía en la duda.
¿Porque estaba junto a Meliodas?
Lo solté y me puse frente a frente de él.
-¿Porque los encontré juntos?
El se rascó la cabeza
-¿Te digo la verdad?-
Pregunto un poco nervioso
-Queroa que me fuera con ella.-
Ahora esa chica estaba en la mira, no iba a tolerar que me arruinara la noche ni mucho menos que molestará a Meliodas.
