Bianca y Bautista.

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Tratar de hacer coincidir a toda la familia para la fiesta es un trabajo complicado, mis abuelos nos habían dejado inculcado las grandes fiestas donde toda la familia estaba juntos riendo y compartiendo entre todos cerca de la chimenea, este año era difícil porque la perdida de la abuela Giulia nos dejó bastante mal, primero años atrás se fue el abuelo Alfonso y hace unos meses nuestra abuela también había decidido partir a lado del amor de su vida, fue un golpe fuerte pero estamos siendo el apoyo de cada uno, es por esto que queríamos festejar está Navidad como siempre lo hicimos, mi tía Fran quería que estén también reunidos con nosotros la familia Meitzner, los Sokolov y los Bennet.

Difícil coincidir agendas con todos ellos.

La familia de mi esposa al igual que la de los Bennet tenía como costumbre viajar a alguna parte del mundo sobre todo en año nuevo, los rusos y su mafia también era difícil de organizar porque ellos nos decían que estás fechas es donde más problemas hay, debido que se les ocurre cobrar venganzas contra sus enemigos, pero todos conocemos como es la tía Fran cuando se le propone algo en la cabeza y ahora todos estamos llegando a la gran casa de campo de mis padres para pasar quince días todos juntos, esto será un verdadero descontrol.

— Cariño — despierto a mi esposa que venía durmiendo al igual que los niños.

— ¿Llegamos? — pregunta media adormilada.

— Estamos en eso — contesto viendo la cola de auto, todos eran de la familia.

De Luca, Salvatore, Clayton, Meitzner, Sokolov y Bennet, todos en una misma casa, en verdad tendríamos que tener cuidado de no terminar todos presos por alguna locura de mi tío, mis primo, de mi querido suegro o de nuestros hijos.

— Seremos muchos — acota Bian mirando a los autos.

— Espero que no nos matemos, somos muchos y muchos días  juntos — comento pensativo.

— Me preocupa mi papá — dice frunciendo su ceño.

— Junto con mi tío Giovanni son un desastre — aseguro negando mi cabeza.

— Si, hombre grande y quiere hacer locuras como si tuviera treinta años — se queja mi esposa suspirando.

Todos sabemos cómo es mi suegro y si se junta con mi tío Giovanni solo significa que habrá de quién reírnos por horas.

— Será una divertida Navidad — bromeo viendo como mi esposa rueda sus ojos.

Nos terminamos de acercar a la entrada de la casa de campo y me sorprende al ver que ya cada espacio tenía su nombre correspondiente dónde debíamos aparcar el auto.

— Se nota que tu tía está en todo — acota Bianca.

Cuando se bajamos del auto debemos despertar a nuestros hijos, Naomi es la primera que abre sus ojos y cuando la apoyo en el piso sale corriendo para abrazar a Atíye, su primita hija de Eric.

— Se vieron ayer — dice mi primo riendo.

— Pero es poco para ellas — bromea Jessica.

— ¡Annika! — gritan las dos cuando la hija de mi prima Helena y Dmitri baja de su auto.

— Bau — escucho que me llama mi esposa. La miro y hace señas para que la ayude con los gemelos que era imposible levantarlos por eso me acerco para cargar a Tobías mientras ella toma a Theo entre sus brazos, ellos piensan que son pequeños pero no sé dan cuenta que está tan grandes y pesados.

— ¡Son tan tiernas! — exclama Lena al ver cómo tanto su hija y las nuestras se abrazan con efusividad, solo falta la de Sebas y estaba el grupo completo.

Era lindo ver a nuestros hijos ser tan unidos como lo somos nosotros, nuestro grupo eran tres varones que cuidabamos a la loca de mi prima, pero ahora es diferente son tres niñas y un niño, Andrew tiene mucho trabajo, no solo cuidar a su hermana sino que a sus otras dos primitas.

— ¿Quien iba a pensar que nos iba a sentar tan bien la paternidad? — dice Sebas llegando a mi lado mientras su hija se une también al grupo mientras se abrazan ellas tan contentas de verse.

— Pobre de tí, Drew — acoto pasando mi mano el cabello del hijo de Sebas.

— Pobre de ustedes, ellas serán su mayor karma — declara Lena con una sonrisa divertida.

— Ya quiero ver eso — comenta Emily riendo.

— Tengo una pistola en casa así que puedo asustar a los mocosos que quieran enamorar a mi pequeña — asegura Eric.

— Esa pistola es mi arma reglamentaria y no la puedes usar — interviene Jessica mirando a su esposo.

— Yo creo que el peor que la lleva es Dmitri, Annika es una copia de Lena y pobre de ti, ruso — digo mirando al esposo de mi prima.

— Lo sé — suspira el pobre hombre mirando a las niñas.

— No lo hicimos mal — afirma Lena riendo.

— ¿Ese no es tu papá? — le pregunta Emily a mi prima viendo cómo el tío Gio baja de su auto con una gran bolsa.

— Como siempre será Papa Noel — contesta rodando sus ojos.

— Tendremos problemas porque mi padre también trae el suyo — comenta mi esposa mordiendo su labio inferior para no reír.

— Definitivamente será una divertida Navidad — declaro para que todos nos empecemos a reír.

No sería una Navidad sin la locura y drama al que siempre estamos acostumbrados, es lindo estar en familia nuevamente, después de todo como siempre decían mis abuelos lo más importante es esto, la familia.



























¡Feliz Navidad!

Un poco atrasado, pero no quería dejarlos sin este regalo. Nuestros chicos ya están tan grandes y son unos sexis papis.

Espero que lo disfruten y tengo otro regalo pero será para fin de año para terminar con todo 🔥

Extras (SAI)Donde viven las historias. Descúbrelo ahora