Me encantan esos días dónde puedo disfrutar a pleno mis nietos, nunca imaginé que ser abuela me cambiaría por completo la vida y vaya que si lo hizo porque es un amor completamente diferente al que le dí a mis tres hijos, mis seis nietos son nuestro todo con Julian pero debía reconocer que tenía una pequeña debilidad y era Matheo, el primogénito de mi hijo Alexander.
Es el primer De Luca y el cual haría que nuestro apellido siga a lo largo del tiempo.
Matheo es un niño tan dulce y a la vez con un carácter parecido al de su padre, todavía recuerdo esa día que los ví, tan solo observarlo caminando con su madre, sus gestos, su mirada tan parecido a las de Alex y de Julian que nadie podría negarme que era mi nieto, lo reconozco me dió un ataque de ansiedad que hizo que asustara a toda la familia pero valió la pena después de todo en especial para mí hijo.
- ¡Abuela! - grita al verme.
Había quedado con sus padres que hoy lo iba a buscar y pasaríamos la tarde juntos.
Día de abuela y nieto.
Con mis otros cinco nietos hago lo mismo, tengo un día especial donde salgo con cada uno y hacemos lo que más le gusta por ejemplo a Ellie y Faith les encanta la moda así que nos pasamos muchas horas en mi atelier creando nuevas cosas para mis colecciones, Nicholas y Julian van más por lo extremo así que los llevó a un lugar donde pueden escalar, saltar y hacer lo que quieran después con Cayden, mi nieto mayor nos sentamos en el jardín de casa para hablar un poco de la vida, a él le gusta contarte muchas cosas y a mi me fascina escucharlo.
Definitivamente soy la mejor abuela de este mundo.
- Hola mi pequeño - digo abrazándolo.
- Te extrañé abuelita - dice dejando dos besos en mi mejilla. - ¿El abuelito? - agrega observando todo a su alrededor.
- Está trabajando - respondo tomando su mochila.
- ¿Lo podremos ir a ver? - me consulta.
- Claro después de comer iremos a su trabajo y de paso vemos a tu papá -
- ¡Siiii! - chilla de felicidad.
- ¿Te gusta ese lugar? -
- Si cuando sea grande quiero trabajar como ellos - declara tomando de mi mano.
Sonrío, De Luca tenía que ser.
Si Julian y Alex lo escucharán se les caería la baba.
Llevo a mi nieto al centro comercial quería comprarle un par de regalos pero primero íbamos almorzar.
- ¿Es verdad que es el día de los enamorados? - inquiere Matheo tomando su gaseosa.
- Si, es el día del amor y la amistad - contesto limpiando su boca.
- ¿Y los chicos deben regalarle flores a las chicas? -
- Puede ser al revés también - respondo observando su rostro.
- ¿Podemos comprar flores? - me consulta pensativo.
- Claro que si, unas lindas para tu mamá - declaro contenta.
- Son para que papá le regalé a mamá así ella no está triste - dice con seguridad.
¡Vaya diablito!
Solo tres años y estaba ingeniando una pequeña estrategia para que su padre quede bien con su madre.
- A ella le gustará que tú papá le regalé flores - afirmo con una gran sonrisa.
Todos estábamos esperando el momento que Alex al fin nos diga que está con Amy en una relación sería, pero conociendo a mi hijo esto puede tardar bastante pero con un poquito de ayuda de Matheo y mía podríamos adelantar ese proceso.
- ¿Cuál te gustan? - le pregunto al pararnos en la florería.
- Estás abuela - me contesta agarrando un pequeño ramo de rosas mezcladas con otras más.
Íbamos caminando y escuchaba cada cosa que me decía, es hermoso disfrutar cada momento con mis nietos, él me comentaba si podíamos comprar juguetes y libros de colorear para donarlos a los niños que están enfermos porque Bruno su mejor amigo y sus padres que son superhéroes ayudan a los niños con Cáncer.
Dante y Abby desde siempre están acompañando a los niños en la larga lucha con el cáncer, juntos son los benefactores del área de oncología del Med y hacen grandes recaudaciones y donaciones para todos esos niños y familias.- ¡Papá! - grita Matheo al entrar a la oficina de Alex.
- Ey - dice mi hijo sorprendido de verlo.
- Te extrañé, papi - agrega con dulzura.
- Y yo a tí, hijo - murmuro Alex con mucho amor.
Me encanta ver a mi hijo en su faceta de padre, es totalmente diferente y cambio mucho desde que ese pequeño niño está en su vida.
- ¿Te gustó mi sorpresa? - interrumpo observando a ambos con mucho orgullo.
- Es lo más lindo de la vida - afirma mirando a su mayor tesoro.
- Iré hablar con tu padre - le informo para dejarlos un rato solo.
- ¡Espera abuela! - exclama Matheo al bajarse de las piernas de su padre.
Mi pequeño nieto corre a dónde está y se que quiere las flores que compramos, se las entrego y el me guiña el ojo. Sin dudas este niño le dará el empujón que les falta a sus padres para que de una buena vez por todos estén juntos.
Cierro la puerta de su oficina y camino directo a la de mi esposo que muestra su sorpresa al verme.
- ¿Qué haces aquí, cariño? - pregunta con una gran sonrisa.
- Quería saber si mi regalo de San Valentín lo podía usar ahora - acoto divertida cerrando la puerta de su oficina con el seguro.
- Ven acá, mi pelirroja - dice marcando que me siente en sus piernas.
- Creo que pronto tendremos una boda o más nietos - digo repartiendo besos en el cuello de mi amado esposo.
- Catalina - murmura al observar mi mirada.
- Matheo le dará el empujón que le faltan a sus padres - le cuento acomodando su cabello.
- Cata, ¿qué te dije sobre eso? -
- Yo no estoy haciendo nada, es ese pequeño De Luca que está haciendo de lo suyo - comento con una gran sonrisa.
- Ese niño - se ríe Julian.
- Te amo mucho, cariño - digo observando a hombre del cuál me enamore hace más de treinta y tres años.
- Y yo a tí, mi bella pelirroja - afirma juntando nuestros labios en un beso.
No había nada más lindo que este hombre y la familia que formamos juntos.
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Extras (SAI)
De TodoUn mundo paralelo dónde podemos saber un poco más de nos amados personajes de la Saga