Bruno Denver compite contra el tiempo mientras intenta escapar de su padre. Y Daniel Cuzis no se lo facilita. O lo que queda del muchacho. Su padre lo había torturado hasta la locura y, mientras no estuvieran a salvo, no había nada que Bruno pudiera hacer para ayudarlo. Bruno encuentra refugio en un equipo de handball ubicado en El Paso, Estados Unidos que parece estar conformado exclusivamente por desequilibrados. ¿Serán suficiente para protegerlo de su padre?