Las lágrimas se corrían por mi rostro, y con un nudo en la garganta le dije: -Te voy a extrañar. -Y yo a ti. Pero nos volveremos a ver. -¿Lo prometes? -Lo promento. Después de esas últimas palabras, subió a su auto, y se fue para no volverlo a ver. [Historia editada] Historia completamente original. Queda prohibida cualquier tipo de copia o adaptación. Di no al plagio.