CAPITULO 13

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ENCERRADO

Desperté gimiendo un poco, las sogas hacían fricción sobre mis manos lo cual hacían que ardan. Yacía sobre la parte de atrás de una especie de camioneta, no veía nada por culpa de la noche, rayos de luz de los focos de la calle entraban por la ventana que estaba a mi derecha y eso me cegaba cada cincuenta metros, levanté la cabeza para ver mis pies, estaban atados al igual que mi abdomen. Comencé a respirar agitadamente por el miedo. ¿A dónde me llevaban? ¿Por qué era de noche? ¿Cuánto tiempo llevaba inconsciente? ¿Me iban a matar?

Miles y miles de preguntas surgieron en ese momento pero una cosa estaba clara, alguna "aventura" estaba de por medio ya que acepté ir de viaje con mi padre (aunque haya sido obligado).

Unas voces en la parte frontal del auto me dejaron absorto, los escuchaba decir cosas. Los escuchaba con un efecto como si estuviese bajo el agua y alguien por afuera me esté hablando.

-¿Qué se supone qué estamos haciendo? Es apenas un niño, tiene veinte años y parece que lo estamos llevando como si tuviera treinta y pico.- Dice el acompañante.

-No sé y no me importa. Führer nos espera y [INAUDIBLE] porque llegamos muy tarde.- El conductor se oía algo irritado.

-Son solo tres minutos, no nos hará nada.- Dice el acompañante.

Ey Lean, soy tu conciencia, ¿por qué dijeron "Führer"? Esa no es una muy linda palabra que digamos, menos si se refieren a mi padre que está loco. Quiero decir; Fhürer significa "Jefe" o "líder" en Alemán, lo cual no está mal, pero Richard para nada es Alemán y él es un obsesionado perdido por la historia del mundo, sobre todo la historia de la segunda guerra mundial pfff, la ama con toda su alma. ¿Será que él quiere...? ¿O sólo...? ¿Y si...? Ay no. No, no, no, no. ¡NO! ¡Esto no es nada bueno!

El sonido de un portón de chapa se oía raspando fuertemente el suelo, el auto se detuvo pocos metros de la entrada y las luces del lugar eran tan potentes que me cegaron haciendo que cierre los ojos y mueva mi cabeza hacia un costado de mi hombro. Las puertas del frente se abrieron y cerraron dándome indicio de que las dos personas se habían bajado. Luego vi a través del vidrio cómo ambos pasaban al lado mío y abrieron la puerta de la parte trasera, donde estaba yo, y me bajaron de lo que parecía ser un Oldsmobile Vista Cruiser. Sí, esos típicos autos para transportar cuerpos sin sospecha que usan en toda película de suspenso o terror. Me agarraron de las axilas y me tiraron con mucha fuerza al suelo. Me lastimé la espalda, estaba en cuero, me levantaron abruptamente y me sentaron en una silla atándome, esta vez, mucho más fuerte.

Mi padre se acercaba con una silla de escuela, la dio vuelta y se sentó de horcajadas con los brazos apoyados sobre el respaldar.

Uuuuy qué miedo...

-¿Sabes una cosa hijo? En todos estos años que no te he visto pensé que eras un completo inútil- Auch, eso sí que no dolió viniendo de un perverso.- pero resulta que me equivoqué, lograste arreglártelas para salir sano y vivo de todos los problemas que has tenido en tu vida.-

Si tan solo supiera como arruinó mi vida ese cretino enzarzado en el mal camino de la vida. Si tan solo supiera el uno por ciento... no le importaría porque ya vimos qué es perverso e insensible hasta con su propio hijo.

-¡Es por eso que te estoy dando esta oportunidad para unirte a esta gran familia y comenzar una nueva vida en el mundo del dinero fácil!- Levantó los brazos feliz y orgulloso.

Lo miré e hice un pequeño y casi imperceptible puchero con la cara.

-¿Qué? ¿No quieres verdad?

Desconectado, una mejor vida.Donde viven las historias. Descúbrelo ahora