Desconectado, una mejor vida.

CAPITULO 2

OUTSIDE

2:56 P.M.

*Batería de su control bajo*

-Maldita sea, odio los controles de Xbox, ahora tendré que ir a comprar pilas nuevas, es mucho el tiempo que tardan en cargar.- Dije algo frustrado.

Mientras me vestía más o menos decente buscaba mi celular para ver algo en YouTube pero no lo encontraba, me comencé a desesperar.

-¿Dónde está? ¿DÓNDE ESTÁ?- Repetía desesperado sin respuesta, obviamente.

Busqué por todas partes, debajo de los almohadones del sillón y de la cama, debajo de mi escritorio, en la silla donde me siento. Buscaba y buscaba pero seguía sin encontrarlo. Cuando termino de vestirme pongo mis manos en los bolsillos para ver si tenía dinero y resulta que toco mi celular.

-Oh, acá está.- Me reí.

Recordé que lo había agarrado de mi escritorio y lo había puesto en el bolsillo inconscientemente. Era casi como una rutina hacer eso.

Comencé a bajar por el ascensor contando el dinero que traía.

-20, 40, 60, 80, 100, 200. Está bien.-

Una vez en la entrada del departamento camino hacia la salida para salir y cuando salgo la luz del sol me pega tan fuerte en los ojos que me obliga a cerrarlos poniendo mis manos sobre ellos. El lugar de recepción traía cortinas polarizadas para que en días de mucho calor el lugar no sea un horno de fábrica, con ello la luminosidad de la zona era muy baja.

-Grrr, una cegadora fue eso.- Suelto una risa de chiste.- Casi me muero...-

Una vez que mis ojos se adaptaron al cambio brusco de luz comienzo a caminar hacia la ferretería de abue. Así le decimos los de la cuadra de cariño. Tomo mi celular del bolsillo y comienzo a revisar las redes sociales para ver que había. Algunas actualizaciones en algunos perfiles de amigos y clanes llamaron mi atención pero no es relevante.

Sin darme cuenta llegué al local.

-Eeeeh, compañero.- Me dice abue- Que alegría verte a estas horas rondando por estos lados.

Solté una risa. Abue y yo fuimos vecinos de departamento durante mucho tiempo hasta que él se enamoró y se fue a vivir a una casa con la novia. Unos meses después se casaron.- Estoy necesitando pilas doble A, ¿tiene?

-Por supuesto.- Se pone a buscar un paquete que tiene detrás de él y me lo da- Todo suyo Mister Leandro.

-Muchas gracias, abue.- Dije aún mirando el celular.

-Un gran placer saber que ayudo.-

Cuando estoy terminando de pagar me llega un mensaje al WhatsApp que decía: Ninja murió, un accidente automovilístico. Luego hablamos, no termino de procesarlo.

-Queee... ¿Ninja murió?- Pensé que lo había susurrado.

-¿Quién es Ninja?

-Eeeh... alguien que trabajaba de lo mismo que yo, jugando videojuegos, y acaba de fallecer.- Dije con algo de tristeza.

-Uh, emm perdón.-

Me fui de ahí con el celular en la mano viendo noticias para corroborar lo sucedido y sí, había fallecido. El auto en el que estaba yendo chocó con otro auto y Ninja se fracturó dos costillas y una le perforó el corazón, muerte instantánea.

Obvio yo no fui el único en enterarse de esto, el clan Argentino 9z también lo hizo y quisieron hacer una especie de reunión, para honrarlo, en el bar "Eat that control".

Casi llorando entro a mi habitación y me lanzo a la cama, sin soltar el celular, miro el techo y ahí sí empiezo a llorar. Un sollozo sale de mí que hace que me caiga de la cama. Cuando me levanto me fijo dónde y a qué hora iba a ocurrir este evento.

Iba a ser entre la calle Entre Ríos y Corrientes, centro de Rosario, a las 19:00Hs. Yo vivía a unos pocos minutos de ahí.

...

No me gustaba para nada manejar así que usar el colectivo era mi única opción para ir a esa calle o que me dejara cerca. La noche era bastante algo calurosa pero era soportable, algunas estrellas se alcanzaban a ver y la luna era creciente. Una vez ahí me encontré con una fila inmensa de gente que quería entrar, a lo que parecía ser, una casa. Había mucha gente con remeras del fallecido así que supuse que iba a ser ahí. Cuando me puse en la fila noté como varios estaban con algunas lágrimas cayendo de sus ojos, no los culpo, si algún día Robert Downey Jr. muere más de uno, a pesar de conocerlo en persona, también lloraría.

Cuando nos dejaron pasar el ambiente se tornó raro, la temperatura del lugar estaba igual que afuera, templado, el logo estaba recién prendiéndose y había espacio para recibir más personas. ¿En qué momento este lugar se formó, creó o construyó?

El silencio era abrumador, era como si nadie quisiera hablar pero que el simple hecho de que todos estén en silencio comunicaran más que mil palabras.

-Ninja no solo era un Dios, era EL Dios de toda esta bella comunidad- Dijo uno parado en una banqueta de madera ¿Algo más presentable no podían poner?- Es por eso que hoy, aquí y ahora brindaremos en su honor.

-¡SALUD!- Gritamos al unísono todos ahí presentes.

Bebimos, charlamos, reflexionamos, lloramos. Todo eso en casi 3 horas en ese extraño lugar nunca antes visto.