𝒯𝓇𝑒𝒾𝓃𝓉𝒶

811 81 3
                                    

𝔚𝔢 𝔪𝔦𝔰𝔰 𝔶𝔬𝔲, ℌ𝔢𝔯𝔪𝔦𝔬𝔫𝔢

¡Ay! Esta imagen no sigue nuestras pautas de contenido. Para continuar la publicación, intente quitarla o subir otra.

𝔚𝔢 𝔪𝔦𝔰𝔰 𝔶𝔬𝔲, ℌ𝔢𝔯𝔪𝔦𝔬𝔫𝔢

Omnisciente

—Con la cantidad de veces que hemos estado cerca de ella en los aseos —dijo Ron con amargura durante el desayuno del día siguiente—, y no se nos ocurrió preguntarle, y ahora ya ven...

Dakota estaba sentada en medio de sus dos amigos. Nuevamente, no iba peinada, solamente llevaba sus ondas cayendo por sus hombros y espalda.

La aventura de seguir a las arañas había sido muy dura. Pero ahora, burlar a los profesores para poder meterse en un baño de chicas, pero no uno cualquiera, sino el que estaba junto al lugar en que había ocurrido el primer ataque, les parecía prácticamente imposible. Tal vez no fuera un gran problema para Dakota, pero era algo que si o si, harían juntos. Además, ahora los profesores hasta los esperaban afuera de los baños.

En la primera clase que tuvieron, Transformaciones, sin embargo, sucedió algo que por primera vez en varias semanas les hizo olvidar la Cámara de los Secretos. A los diez minutos de empezada la clase, la profesora McGonagall les dijo que los exámenes comenzarían el 1 de junio, y sólo faltaba una semana.

—¿Exámenes? —aulló Seamus Finnigan—. ¿Vamos a tener exámenes a pesar de todo?

Sonó un fuerte golpe detrás de Dakota. A Neville Longbottom se le había caído la varita mágica, haciendo desaparecer una de las patas del pupitre. La profesora McGonagall volvió a hacerla aparecer con un movimiento de su varita y se volvió hacia Seamus con el entrecejo fruncido.

—El único propósito de mantener el colegio en funcionamiento en estas circunstancias es el de darles una educación —dijo con severidad—. Los exámenes, por lo tanto, tendrán lugar como de costumbre, y confío en que estén todos estudiando duro.

¡Estudiando duro! Dakota estaba tan afectada por lo de Hermione y tan ocupada con el misterio que estaban resolviendo, que no se había puesto a pensar en los exámenes. Se oyeron murmullos de disconformidad en toda el aula, lo que provocó que la profesora McGonagall frunciera el entrecejo aún más.

—Las instrucciones del profesor Dumbledore fueron que el colegio prosiguiera su marcha con toda la normalidad posible —dijo ella—. Y eso, no necesito explicarlo, incluye comprobar cuánto habéis aprendido este curso.

Dakota miro los zapatos que anteriormente habían sido conejos, estaba pensando como organizaría su tiempo.

Harry contempló el par de conejos blancos que tenía que convertir en zapatillas. ¿Qué había aprendido durante aquel curso? No le venía a la cabeza ni una sola cosa que pudiera resultar útil en un examen.

En cuanto a Ron, parecía como si le acabaran de decir que tenía que irse a vivir al bosque prohibido.

—¿Te parece que puedo hacer los exámenes con esto? —preguntó a Harry y Dakota, levantando su varita, que se había puesto a pitar.

𝒯𝒽𝑒 𝒷𝑒𝑔𝒾𝓃𝓃𝒾𝓃𝑔 𝑜𝒻 𝒟𝒶𝓀𝑜𝓉𝒶Donde viven las historias. Descúbrelo ahora