La Gran Apuesta | Completa

•30• Vodka.. y a uva.

Mi consciencia iba regresando a mi, despertando gracias al olor a dulce que comenzó a alborotar mi nariz y mi estomago, mis ojos se abrieron de poco a poco, me giré sobre la cama, Trenton no estaba, presté atención al olor.

—Hot cakes —mencioné emocionada, estaba preparándome para salir de la cama y escuché como se abría por completo la puerta de la habitación.

—Buenos días —saludó Trenton al verme.

—Buenos días —le sonreí—, huele delicioso —él me sonrió—. Me quedé dormida viendo netflix.

—En la noche no te quise despertar, ya era tarde —se adentró a la habitación y se sentó junto a mí— pero como sé que hoy es un día pesado para ti, decidí hacer el desayuno para que vayas con algo en el estomago antes de hacer tu declaración, vamos a que desayunes.

—Gracias, solo voy al baño —me levanté algo flojerosa de la cama, me adentré al baño, al terminar mis necesidades me lavé manos, cara y boca y me dispuse a salir de la habitación. Me encontré con él en la cocina, sirviendo en los platos tres hotcakes—. Listo ya vine.

—Toma asiento, ya ésta listo todo —subió los dos escalones de la cocina, al regresar dejó una caja de jugo de naranja y se sentó conmigo—. ¿Cómo estuvo tu reunión anoche?.

—Muy entretenida, la pasé genial, ¿y tu reunión?

—Al principio fastidiosa y aburrida, tenía que firmar unos papeles con abogados míos y de Will, pero luego bebimos unos tragos y las platicas cambiaron, es todo —respondió algo desinteresado por su noche anterior.

—Que bien, yo estaba cansada, no dormí tan tarde —saboree un bocado de hotcake en mi boca.

—Vi que ya tienes casi listas tus maletas.

Lo escuché decir con su voz apagada.

—Sí, anoche adelanté algo antes de dormir —respondí—. ¿Y si vamos al Golden hoy?

— ¿Hoy? —volteó a verme.

—Sí, hoy, por la noche, yo con mis amigas y tu con tus amigos, podemos encontrarnos allá —sugerí animada.

—Como cuando te conocí.

Las comisuras de nuestras bocas se alzaron felices, y yo asentí con mi cabeza, él aceptó. Terminando de tomar el rico desayuno hecho por el hombre más sexy de Nevada, tomé una ducha, me arreglé rápido y Trenton me llevó a la estación de Policía, él me esperó en la pequeña sala que esta ubicada a la entrada, yo me dirigí a la oficina de Nava, quien me recibió amable, llené una especie de forma, cuando terminé él iba a llevarme a la oficina de un juez.

—Nava, ¿Qué tal el beso con Hanna? —pregunté antes de salir de su oficina.

—Supongo que se los contó —mencionó apenado y queriendo reír.

—En realidad la descubrimos, no tenía su labial como cuando se fue —me reí al decir eso.

—Mujeres, son mejor que el FBI —se detiene en la puerta—. Creo que  ya estoy aceptando el hecho de que tu estás enamorada de Stark, y que con o sin él, tu no te atreverías a dar otro paso por ella.

—No, no podría, créeme que a mi también me afectó eso por mucho tiempo, pero si superas por completo esto, sé que serás muy feliz con ella, claro, siempre y cuando ella quiera darte una oportunidad, no se espera a alguien por siempre amigo —hago énfasis en eso ultimo.