Cincuenta Secretos©

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Me despierto sobresaltada cuando alguien bruscamente quita la sábana de mi cuerpo. Sonrío al pensar que se trata de Christian queriendo hacerme el amor, pero descarto esa idea al percatarme de que su brazo permanece anclado a mi cintura.

Abro los ojos y observo sin dar crédito la mirada furiosa de Mía. ¿Qué...? Rápidamente me levanto, sin despertar a Christian. Está tan agotado que no se inmuta.

Caminamos hasta la sala donde nos esperan Grace, Carrick, Elliot y Kate junto a Ava. Sus miradas lucen furiosas, excepto la de mi mejor amiga. Pienso en refugiarme detrás de ella, pero en su lugar suspiro y me planto a unos metros de todos ellos.

-¿Desde cuándo no nos incumbe lo que suceda en la vida de Christian, Ana? -Dice Grace. Frunzo el ceño, ya que no comprendo sus palabras.

-Disculpa, Grace pero...

-¡Pero nada! -Me interrumpe -Su comunicado a la prensa deja mucho que desear. ¿Que sus decisiones solos les importan a ustedes? ¡Por dios! ¡Somos su familia! -Se ve indignada y me siento diminuta en su presencia.

-Ana, debieron informarnos acerca del comunicado. Obviamente hemos sido perseguidos por los paparazzi. -Dice Mía con fastidio -Y las decisiones respecto a ustedes, lo quieran o no, nos incumben. No queremos que vuelvas a hacerle daño a Christian.

-No lo haré. Lo amo. -Declaro, con toda la seguridad de la que soy capaz.

-Eso dijiste antes de huír. -Gruñe Grace -Y mira todo lo que has hecho.

Es increíble como una mujer que suele ser tranquila en este momento llena la habitación con su presencia y sus palabras resuenan firmes y concisas en el espacio.

Lo que dice se clava como un cuchillo en mi corazón y estoy a punto de soltar un sollozo pero me contengo. Reuniendo toda la fuerza de voluntad que hay en mi cuerpo, encaro a la familia Grey.

-Sé que actué mal, pero no estoy dispuesta a seguir soportando esto. -Todos abren los ojos como platos. Grace está a punto de hablar pero soy yo quien se lo impide esta vez -Amo a Christian y pienso convertirlo en un hombre feliz. No puedo vivir sin él y no quiero que mis hijos vivan sin su padre. Renovaremos nuestros votos para sellar el compromiso que tenemos entre nosotros. -Mi voz suena clara y firme, me enorgullezco -No pienso permitir que manchen lo nuestro con el pasado, ya que nosotros no lo hacemos. Se acabaron los reproches y los reclamos, nos dedicaremos a intentar recuperar nuestra familia, y con esto también me refiero a ustedes, deseo ganarme su confianza.

-Nos privaste de cinco meses de la vida de mi nieta. -Grace nuevamente acierta en su comentario, pero no me permito flaquear.

-Me arrepiento y pido disculpas, como he dicho a partir de ahora podrán verla siempre que quieran. Sé que eso no ayuda mucho, pero no pueden juzgarme por lo que hice por el resto de sus vidas.

-Ana. -Carrick me sorprende, es la primera vez que entra en escena -Mi hijo quedó devastado, verlo así nos rompió el corazón. No puedes pretender que te perdonemos y hagamos como si nada hubiese sucedido.

-No espero eso. -Suspiro y pienso en qué decir -Deseo ganarme su perdón, pero si no me lo permiten, no puedo hacerlo. No quiero que Christian deje de ir a verlos solo por la tensión que existe entre nosotros.

-Christian puede ir sin ti. -Responde Mía resuelta.

-No, no puede. -Nos giramos para ver a Christian entrar en la sala. Me dirige una mirada reconfortante y se acerca a mi. Me toma de la cintura y suspiro -No pienso ir sin Anastasia a ninguna parte.

-Christian... Entiendo que necesitan tiempo para procesar todo esto. Tú puedes ir con los niños mientras yo me quedo en Escala o aquí. -Me encojo de hombros.