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Las semanas habían pasado, habíamos decidido regresar a Midgard para poder ver a Jack y a los demás, quienes se llevarían una gran sorpresa al ver a mi pequeña, para mi suerte sería como un regalo de navidad, pues estábamos por pasar noche buena en casa.
-¿Qué es la noche buena?- preguntó el Dios de las mentiras mientras arrullaba a su pequeña -¿A acaso es una buena noche de sexo?- añadió con algo de picardía, cosa que me tomó por sorpresa.
-No, no es una buena noche de sexo Loki- respondí entre risas sintiendo el rubor subir por mis mejillas - Se celebra antes de navidad- aclaré, pero al ver sus cara sabía que no había entendido nada de lo que le dije.
Jack venía en camino junto con Thor el aterrorizador pomeranian que hice palidecer a Loki-Es como una celebración pagana, pero lo atribuyen al nacimiento de jesús- seguí tratando de alguna manera hacerle entender esta celebración.
-Entonces... celebran el nacimiento de un bebé- dijo confundido para después soltar una carcajada-¿Por qué festejarían el nacimiento de un bebé que no conocen?- preguntó entre risas y antes de que pudiese responder, tocaron a la puerta, siendo para mí un alivio pues ya no tendría que ser yo la que le explique todo esto sin que se lo tome con humor.
-¡Cassie! Dios mío, te ves hermosa- exclamó Jack al momento que abrí la puerta -¿Dónde está mi pequeña sobrina? apuesto a que es idéntica a ti- dijo con demasiada emoción soltando a Thor para que corriera hacía el pequeño jardín.
Se adentró a la casa para ir directo a porta bebé donde se encontraba la pequeña.
-Dios, es tan hermosa- susurró viendo a Eleanor quien dormía plácidamente.
Sí, definitivamente el sueño lo sacó de mi parte.
Jack tomó en brazos con cuidado para no despertarla, el pelinegro lo observaba con recelo al ver como sostenía a su hija, estaba loco si creía que él tendría que pedirle permiso para cargar a nuestra bebé.
-¿Cómo ha estado el local?- pregunté tomando asiento en el sillón de la sala y Loki se sentó a mi lado.
-De maravilla, sólo que nos estamos quedando sin piezas- respondió mientras arrullaba a la bebé -Tony ha estado preguntando por ti, quiere unas esculturas y cuadros- añadió alzando las cejas - Se ha hecho un cliente frecuente- explicó.
-Entonces podremos regresar a Londres por un tiempo, haré mas cuadros y esculturas, tengo muchísimas ideas- dije entusiasmada, Loki apretó mi mano y lo miré extrañada , no parecía convencido con mi idea, pero el debía entender que también pertenecía aquí, no iba a dejar mi vida de lado.
-Algo nuevo de seguro le encantaría a los clientes, en cuanto publiquemos las nuevas obras lloverán mas clientes, supongo que seguiremos cerrando las peticiones- continuó Jack quién estaba inconsciente de lo que pasaba por la cabeza de mi amado.
