¿porque estas a mi lado?

Entrenamienro oficial

*En cada golpe, cada esquive el silencio de los dos estaba plenamente hecho, dos caminos diferentes pero con un mismo destino estaba dado en sus manos, ambas historias entrecruzadas dejadas a conocer para una eternidad que pese a los golpes recibidos una sonrisa amigable se dejaba a relucir en los labios de los dos que incluso la cercanía no era impedimento que su lealtad hacia el objetivo sea inminente, las fuerzas de ambos eran claras en frutos; Dohko tras haber entrenado en aquel volcán por un buen tiempo para fortalecerse en su totalidad le dejaba buena habilidad de combate mientras que Shion, a pesar de tener un buen encuentro anteriormente con aquel espectro y tras ello Hakurei tuviese la mejor idea que llevarlo al orfanato para que aprendiese habilidades de sanación, estaba bien conforme en haber sido uno de los primeros en enfrentarse a grandes cosas de dura realidad como lo era la propia muerte frente a sus ojos.*

Dohko: ¡mejoraste bastante!

Shion: aagh, tu también has mejorado!

*Los golpes de ambos eran detenidos por esa misma fuerza, esa unidad que los ojos de cada uno de ellos mostraba en el reflejo del otro decía más que las mil palabras que podrían dejar sus silencios detras de una risita a los vientos por los dos individuos cuyos corazones apenas estaban comenzando a latir con fuerza. Así pasando el tiempo hasta que se habían excedido solo uno de ellos debería quedar en pie pero una cuestión era lo que decidía la armadura y otra su portador, por ello era mejor dejarlo a la suerte de ellos para ganarse las confianzas de éstas mediante acciones que durante el tiempo que han estado estableciendo sus aportes, variados pero importantes, dejaban algo por desear en esos momentos tan únicamente compatibles.*

*Sonaría una locura si se dijera que esos dos tenían mucho para dar a pesar de que hay quienes los acompañan que también formaban parte de sus historias, pero también queda claro que los protagonistas siempre tienen la decisión si dejar o no que esos terceros o cuartos llegasen a sus vidas, así como el recordarla a plenitud en una noche de grandes estrellas.*

Shion: dohko... ¿Recuerdas esa noche?

Dohko: ¿cuál de tantas?

Shion: esa donde hicimos la promesa.

Dohko: jajaja! Como olvidarla? Siempre suelo recordarla en noches así.