Capítulo 18: 8 Días

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Después de la partida de Ray y Emma, Norman comenzó a actuar diferente, dejó de buscar a Mia y aunque le sonreía y seguía pidiéndole que durmiera con él, parecía emocionalmente distante, cerrado.

Por su parte, Mia pensaba en Ray más regularmente que lo normal y dejó de asistir a las reuniones con respecto al plan, Vincent la llamó para probar el veneno, pero ella demostró una incomodidad notoria al ver retorcerse a la rata que sirvió como sujeto de pruebas. "Ray casi muere para obtener el elemento que faltaba para ese veneno ¿Qué pasa si Emma hace una nueva promesa? ¿Qué pasa si ellos no regresan? ¿Qué justifica el fin?"

Los pensamientos que rondaban su mente resonaban más fuerte cuando Norman mencionaba que el plazo ya estaba fijado, cuando pasaba por el sótano de los experimentos, cuando cosía la manga que le sobraba a Ren... Había sido mucho dolor ¿Era justo pedirle que parara ese ciclo? No, no era justo, pero la vida jamás había sido justa.

- Ma- Ren, sentado frente a Mia, la estaba llamando, había aprendido a decir algunas palabras en los últimos 6 meses.

- Mia, cariño, Mia - sonreía al verlo intentar, aunque sospechaba que él elegía decirle solo "Ma"- ¿Cómo te sientes?

Ren asintió con la cabeza y apuntó a Zazie, que estaba sentado a un par de metros de ellos. Mia insistía en mantener a Zazie en la guardería, por su edad y sus necesidades, así que siempre que podía se lo llevaba allí.

- Zazie - Ren ya podía decir su nombre claramente.

Zazie se giró y Ren le indicó con un gesto que se acercara, Zazie se acercó con su tigre de peluche en la mano, estaba sucio y estaba tratando de limpiarlo con un trapo húmedo.

- ¿Me lo prestas? - Generalmente Zazie se rehusaba a soltarlo, pero Mia se lo había dado en primer lugar y ya lo había tenido para coserlo cuando se había roto, se lo dio.

- Gracias Zazie, voy a lavarlo y podrás recuperarlo mañana - Mia lo guardó en su bolsillo y vio cómo Ren se ponía de pie y le llevaba otro peluche pequeño a Zazie.

Los niños se quedaron jugando y Mia se puso de pie para ir a avisarle a Sophie que pronto se iría a su habitación para continuar investigando.

- Ma - Mia sonrió y se giró, pero estuvo sorprendida al notar que había sido Zazie quien la llamaba.

- Muy bien Zazie, eres un chico muy inteligente, ¿necesitas algo?- él señaló la bolsa que tenía en la cabeza, ella la tomó por los bordes y la levantó lentamente - ¿quieres que te la saque? - Zazie asintió con la cabeza y Mia recibió un mensaje por su comunicador, Norman la estaba citando a su oficina. Terminó de quitarle la bolsa a Zazie, le ordenó el cabello y retomó la acción que se había dispuesto a hacer.

- Sophie, me voy, gracias por estar siempre aquí - la rubia le sonrió como respuesta

- Oh, ¿Zazie se quedará sin su bolsa?

- Por el momento sí, todo estará bien si él recuerda dónde está y puede volver a ponérsela cuando quiera.

Sophie asintió y Mia salió de la guardería.
En el exterior, Hayato, Ayshe, Don y Gilda se dirigían a la salida del pueblo, con suministros y ropa de exterior. Quedaban 7 días para atacar la capital ¿A dónde iban? Era un mal momento para separarse.

- ¡Gilda! - los chicos se giraron - ¿A dónde van?

- Norman nos envió a buscar a Mujika para protegerla - Una respuesta interesante y extraña ¿Había engañado nuevamente a Gilda y a Don? Norman no era el tipo de persona que cometía el mismo error dos veces.

- Qué extraño, no me dijo nada al respecto... Bueno, vayan con cuidado.

Otra despedida al estilo de Emma, Mia caminó un poco molesta a la oficina ¿Su plan de no-acción no era suficiente para Norman? Sí, claro que le dijo que lo apoyaría de todas formas, pero dividir a los chicos una semana antes de la guerra era un costo muy alto.

Mia entró a la oficina, como siempre, sin tocar. Vincent le había llevado un pantalón nuevo a Norman y él se lo estaba probando, él y Mia se miraron apáticos, mientras Vincent se avergonzaba notoriamente por la situación.

- ¡Pero el jefe está a medio vestir!

- Siempre nos vemos en ropa interior. - Mia se sentó en el sofá.

- Gracias Vincent, me queda bien, puedes retirarte. - Obedeció, Mia analizó la situación por un momento y entendió por qué los demás pensaban que estaban juntos. Nunca se preocupaban por esos comentarios que se podían malinterpretar.

-¿Qué estás haciendo? - el tono de Mia era de reproche, pero también denotaba curiosidad.
- Mantengo la situación bajo control - se sentó en el sillón frente al que estaba Mia y cruzó las piernas.

-¿Te preocupa aún decepcionar a Emma? Porque puedo asegurarte que esto será definitivamente un problema.

Norman no contestó.

-... ¿Crees que Emma regresará?

Esa conversación no estaba avanzando a ninguna parte, así que Mia se puso de pie y se fue. Se encontró con Vincent y Barbara en la puerta, seguramente estaban escuchándolos hablar.

Esa misma tarde, Mia se topó con Norman nuevamente, él y Vincent se encontraban supervisando el entrenamiento de la familia de Emma.

- Ellos serán desplegados en la retaguardia más lejana, siempre.

Era evidente que Norman trataba de protegerlos más que al resto, claro que le preocupaba lo que pensara Emma, ¿temía que no pudiera hacer una nueva promesa?

Cruzaron miradas, Mia fue la primera en quitar la suya, se fue a su habitación.

Después de la cena, Mia se encontraba colgando el peluche de Zazie en su habitación para que se secara. Se sentía sola, por eso nunca dormía en su cama, estaba bien tener opciones, había estado pensando en llevar a Ren a visitar a Chris, luego podría dormir con él, ambos tenían pesadillas a veces, el pequeño lidiaba sobretodo durante la noche con el síndrome del miembro fantasma.

Alguien tocó la puerta.

- Wow, ¿ahora mis pequeños problemas se solucionan solos? - abrió, era Norman.

- Está empeorando. - Rápido y directo, seguramente de eso quería hablar más temprano.

- Lo sé, Norman, pero por más que he buscado, todavía no encuentro una solución.

-Sobre lo otro... No te lo dije, porque nunca había hecho lo contrario a lo que me aconsejaste que hiciera, no sabía cómo ibas a reaccionar.

72194Donde viven las historias. Descúbrelo ahora