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Capítulo 22: Retorno A Gracefield

-De hecho, Ray, sería una descarga eléctrica leve.

Vincent había encontrado la herramienta que buscaba, faltaban dos láminas metálicas, cuando Ray lo supo comenzó a buscar a su alrededor algo que pudiese servir, dejando a Mia a cargo de Vincent.

Emma, Norman y los demás acababan de desarrollar el plan, estaban a tres días de viaje de Gracefield y comenzaban a prepararse para partir.

- Todo está bien, Emma - la pelirroja había estado atenta a cómo movían a Mia, así que apenas terminó la conversación se apresuró en llegar hasta donde la había dejado Ray, Norman la siguió.

- La condición de Mia se hizo más compleja esta mañana, Vincent ¿Qué podemos hacer?

- Evaluábamos la posibilidad de generar una cardioversión eléctrica*.
[http://arritmias.es/cardioversion-electrica/]
Es doloroso, pero rápido y tiene muchas probabilidades de funcionar.

- ¿Es urgente?

- No, jefe. Mia está débil, pero por el momento su cuerpo soporta la arritmia.

- Encontré esto ¿Servirá? - Ray regresó con un par de machetes y notó que ahora Emma y Norman estaban con ella.

- Si no es necesario que sea ahora, lo mejor será estudiarlo después. La llevaré en mi caballo y estaré atento a que no empeore.

- No, Norman - respondió Ray.
Emma y Vincent guardaron silencio ante este desacuerdo.

- Los machetes servirán, Ray. Vincent, ¿ajustaste el voltaje? - Mia había tomado una decisión, Emma le sonrió a Norman al verla tan determinada - debo rescatar a Ren, y tengo aquí a mi chica de la suerte - dijo en tono de explicación mientras miraba a Norman, le tomó la mano a Emma y la presionó contra su corazón.

Vincent se acercó con el dispositivo de corriente a Mia y Emma se puso de pie. Estaba nerviosa, quería seguir diciendo que todo estaría bien, pero provocarle dolor a un corazón que está teniendo problemas no suena para nada seguro.

Sacudió su cabeza, su amiga sabía lo que estaba haciendo, no era el tipo de persona que tomaba decisiones imprudentes.

- ¿Me permites? - Vincent se acercó con las herramientas improvisadas que usarían para la cardioversión y puso el metal bajo su ropa. Ray se acercó y le pidió el aparato que conducía electricidad a Vincent, pero Mia intervino.

- Quiero que lo haga Norman

Ray la miró confuso

- ¿Qué?

- Lo siento Ray, estoy siendo egoísta, te explicaré en el camino.

Norman no estaba muy lejos y había oído, así que se acercó. Ray caminó a dónde estaba Emma, manteniéndose atento y no demasiado lejos. Norman se arrodilló al lado de Mia y recibió el aparato.

Habló en voz baja, Vincent solía calificar esto como una mala costumbre en la que se habían especializado. Se leían los labios más de lo que se escuchaban.

- Pensé que preferirías que Ray te acompañara de aquí en adelante

- Vamos, Emma no te necesita en este momento, yo sí - sonrió.

- No se trata de mí y Emma, Ray quería hacerlo.

- No, no quería - Mia bajó la mirada.

- Emma dijo que al parecer se había ofrecido.

- Sé que quiere hacer lo que sea necesario, pero no estaría cómodo con esto.

- Mia, es imprudente asumir lo que siente Ray, no discutiré las decisiones que tomes sobre tu cuerpo, pero no alejes a Ray, no te sabotees.