Capítulo 38: Ojos Perfectos

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Jungkook tenía un gran puchero en el rostro y sus orejitas agachadas, esto es porque la herida en su rostro dolía cuando hacía ejercicio, pero él no se quería quedar en reposo más tiempo. Por eso se estaba tragando el dolor, mientras Sungjae reía suavemente de sus expresiones.

─ Te vas a abrir esa herida. ─ Le dijo su amigo.

─ No me importa. ─ Dijo el pequeño Alfa, él estaba decidido.

Sungjae suspiró mientras continuaban las flexiones matutinas.

Pero entonces Jungkook se detuvo un segundo y se giró para ver a su amigo.

─ ¿Por qué no me dijiste antes que tenía algo con otro Alfa? ─ Preguntó en un susurro a su amigo. Sungjae se detuvo de golpe y sus mejillas se sonrojaron al ver a Jungkook.

─ Tuve miedo.─ Le confesó. ─ En realidad siempre tenemos algo de temor.

─ Yo no siento miedo. ─ Le dijo Jungkook. ─ Pero él sí teme. Dice que será horrible.

─ Es que lo será. ─ Afirmó el más alto. ─ Jungkook, nada será de nuevo lo mismo.

Jungkook rió suavemente.

─ Para mí eso no es malo. ─ Comentó observando a su amigo.

─Jungkook, te molestarán y dirán cosas hirientes, incluso podrían llegar a hacerte daño.

─ ¿Por amar a otro Alfa? ─ Preguntó, ambos hablaban en susurros.

─ Porque eres un Alfa amando a otro Alfa. ─ Le dijo Sungjae intentando convencerlo. ─ Por eso Jimin y yo lo mantenemos en secreto, porque no nos van a aceptar, porque en este mundo no hay un lugar para nosotros.

Jungkook lo miró con una expresión algo triste.

─ Sungjae... ─ Lo llamó. ─ Éste mundo tampoco tenía un lugar para mí, pero mira hasta donde he llegado con la ayuda de muchas personas buenas. Sólo necesitamos luchar, no hay que rendirnos, no pueden odiarnos por amar a otro Alfa.

─ ¡Orejitas! ¡Sungjae! ─ Ambos se pusieron derechos mirando al frente.

El oficial Park caminó hacia ellos, hasta estar de pie frente a los dos cadetes.

─ Orejitas, ¿Se siente mejor? ─ Preguntó y observó al pequeño Alfa sonrojarse.

─ Si, señor. ─ Respondió aunque le dolía la herida en el rostro, pero realmente se sentía tan tranquilo de que Hoseok estuviera en la academia. Sabía que ambos estaban seguros allí.

El Oficial Park suspiró, al menos no podía percibir el aroma del pequeño lobo, eso significaba que Hoseok le habría hecho caso con los supresores.

─ La próxima vez tenga más cuidado, cadete.

─ Si, señor. ─ Respondió Jungkook. ─ Seré más cuidadoso, no volverá a suceder.

─ Bien. ─ Dijo el oficial y continuó caminando para supervisar a los demás cadetes.

Sungjae y Jungkook suspiraron mientras volvía a hacer la rutina de ejercicio. Les faltaba poco y después irían a las clases del día.

El resto del tiempo en la academia se fue rápido y Jungkook pensaba respecto a su conversación con Sungjae, sobre los Alfas amando a otros Alfas. No le gustaba eso. Desde que salió del edificio, de todo lo que había aprendido, Jungkook pensaba que esto era lo peor. ¿Por qué no era libre de amar a quien quisiera? ¿Qué tenía de malo? ¿Era por el asunto de los Deltas? Jungkook sabía que él no tenía la intención de matar el lobo de su Alfa, y sabía que Hoseok tampoco lo mataría a él.

Ojos Imperfectos |HopeKook| ◇Donde viven las historias. Descúbrelo ahora