Assistant (Sterek)

Espuma

Las abejas volaban alrededor de las plantas que estaban en una gran maseta en la parte exterior del restaurante ocultando un poco las mesas que allí se encontraban. Algunas personas recorrían las calles como si no tuvieran mucho de qué preocuparse mientras que otras trabajaban en los locales como si tampoco tuvieran mucho de qué preocuparse. La diferencia era notable.

El castaño limpiaba una de las mesas empeñándose en hacer bien su trabajo y algo pensativo a la vez, mientras Rhose tomaba las órdenes de unos clientes que acababan de llegar.

Las horas laborales pasaban rápidamente y la clientela se iba reduciendo a medida que llegaba la tarde, momento en el que el local cerraba durante un par de horas.

-Ya casi está -soltó Rhose observando a su compañero mientras este recogía los platos de las mesas y caminaba hacia la cocina. Ella lo siguió de cerca sonriendo y despidiendo a algunas parejas que se retiraban- .El sujeto que nos prestará el vehículo nos aseguró que para esta tarde estará todo listo. Ah y tengo que avisarte que el señor Tew vendrá con nosotros.

- ¿Nuestro Jefe? -preguntó Stiles algo sorprendido.

-Claro, como crees que saldremos de tarde en horas de trabajo. Aron cerrará el restaurante y vendrá con nosotros. A él le encanta la pesca y cerca de la cabaña hay un rio, aprovechamos eso para convencerlo.

- ¿No será algo raro pasar el fin de semana con nuestro jefe?

- ¿Has visto que edad tiene? Prácticamente es un niño, un niño rico -corrigió rodando los ojos-, pero eso no lo convierte en una persona seria y amargada, él siempre tiene buen humor y simpatiza con todos, es agradable -finalizó caminando hacia una de las mesas donde unos clientes pedían la cuenta para pagar. Stiles solamente miró a las pocas personas que se encontraban dentro del restaurante, eran solo dos mesas por lo que sus compañeros podrían con eso. Caminó hacia la puerta principal y se recostó en el umbral observando a las personas en las calles. Todo era tan tranquilo.

Un grupo de chicos pasaron frente al restaurante murmurando cosas inentendibles y riéndose a carcajadas en breves explosiones eufóricas, en total eran cinco y todos volteaban disimuladamente mirando hacia atrás.

Miró en el mismo sentido algo confundido y sus ojos se detuvieron en una persona que caminaba en su dirección, una mujer que aunque tratara de pasar de ser percibida llamaba la atención de las personas en las calles. Su figura era sorprendente y lucía muy bien unos Jeans azul marino, una blusa blanca ligera y unas sandalias altas a juego con sus accesorios. Sus ojos estaban ocultos tras unos lentes oscuros y sus labios rojos como la sangre se curvaron en cuanto vio al castaño.

Se acercó hasta una de las mesas del exterior y se sentó esperando que Stiles hiciera lo mismo. Este observó a través de una de las vidrieras del restaurante encontrándose con su compañera quien asintió con la cabeza mirándolo unos breves segundos, indicándole que se encargaría de reemplazarlo un momento.

El castaño sonrió en agradecimiento y luego avanzó hacia la mesa donde se encontraba esa figura exótica que contrastaba con el resto del lugar.

Celeste Moore sonrió ampliamente y lo saludó animadamente expresando lo alegre que estaba por el hecho de que él se encontrara bien. Su carácter, si no era fingido, era efusivo y comenzaba a causarle un ligero desagrado al castaño quien la observaba sonreír como si su vida no le pesara en absoluto, y creo que así era. Ella por su parte lo único que podía decir era que estaba algo preocupada.

-Por teléfono me dijiste que algo le pasaba a Derek -soltó sin más, abordando el asunto que los reunió, el motivo de todo. Celeste sonrió a labios cerrados un momento como si analizara esas palabras y luego asintió agachando la mirada unos segundos para luego mirar nuevamente al castaño con la misma sonrisa de antes.