❄️ Día 15 ❄️

22 7 0
                                    

Una de las cosas que más disfruto de esta época es la gran producción de postres caseros, estos días del año todos parecen estar muy inspirados y motivados a cocinar, especialmente postres.

Mi mamá no es la excepción. Es por eso que ahora me encuentro en la cocina ayudándola a preparar sus cuatro especialidades; cupcakes, galletas de ajonjolí, pies de manzana y fresas y sus famosos churros rellenos.

─¿Cómo vas con tu conquista, cariño? ─me pregunta, cuando termina de meter lo que pronto serán cupcakes al horno.

Automáticamente mis labios forman una pequeña sonrisa.

─Somos amigos, o algo así —Disfrazo un poco las cosas, porque en mi sanó juicio no le diré que estoy fingiendo ser su novio—. Estamos hablando más que antes, al parecer mi plan marcha bien.

Mi madre pone una mano en mi hombro. —Douglas, ¿Cuándo piensas decirle?

—No lo sé, mamá —Suspiro—, ella me gusta mucho, la amo y ahora que he conocido algunas cosas más sobre ella ese sentimiento ha crecido —Hago una pausa—. Pero tengo miedo de que ella no sienta nada y me rechace.

Mi madre sonríe. —La vida está hecha de riesgos. Puedes llevarte una sorpresa.

Ella continúa con su trabajo luego de guiñarme un ojo.

Arrugo mis cejas. —¿A qué te refieres con eso?

—A veces por no atrevernos nos perdemos de oportunidades —empieza—. Cuando conocí a tu padre ni siquiera me pasó por la cabeza que podríamos ser siquiera amigos, lo veía imposible. Pero míranos ahora, ¿Quién diría que los dos más tímidos de toda la escuela ahora están casados y con dos hijos?

Hundo mis cejas. —¿Lo que dices es que posiblemente exista la posibilidad de que Grace sienta algo por mí?

Ella ríe un poco. —Voy a obviar la evidente redundancia que dijiste —carraspea—, pero lo que quiero decir, pequeño Douglas, es que no te pongas límites solo por creer que sabes lo que pasará. Tu padre y yo estábamos en la misma página sin saberlo, ¿Te imaginas que a ninguno se nos hubiese ocurrido dar ese primer paso? —Se gira totalmente hacia mí y coloca su mano en mi mejilla sonriendo—. Las mejores experiencias de la vida se obtienen mediante la toma de riesgos.

Le devuelvo la sonrisa y continúo con mi trabajo de colocar la masa de galletas en la bandeja.

Las palabras de mi madre empiezan a dar vueltas en mi cabeza.

Creo que tiene razón... No, ella definitivamente tiene razón.

Nada me impide hablar con Grace.

Nadie me impide contarle todo lo que siento por ella y lo muy enamorado que estoy.

Voy a hacerlo.

Voy a decirle.

Desafío Navidad ✅ Donde viven las historias. Descúbrelo ahora