Estuvieron buscándole un buen rato. Entre los toboganes, bajo los columpios, tras los árboles... La gente, se iba llevando a sus hijos, ya que, que unos adolescentes de 16 años -uno con la mano vendada y el otro con media cara quemada- se movieran de aquí para allá, no era un escenario muy normal. Sin embargo, no tuvieron éxito.
-Esto es por tu culpa- Recriminó el menor de los dos, señalandole. La cara de Todoroki se frunció un poco.
-Disculpa, Bakugou, pero tú y yo estábamos ocupados- Rebatió ahora el bicolor. Era cierto que ambos estaban pendientes de otra cosa, así que, como respuesta, sólo pudo emitir un chasquido de lengua.
Se quedaron en silencio un rato, pensando en lo que podrían hacer y más, cuando el sol se estaba escabullendo.
La preocupación les carcomía por dentro. Bien era cierto que a Bakugou no le importaba mucho Deku, pero había sido su amigo de la infancia. Y, además, no podía aceptar su "misión fallida".
Por otro lado, Todoroki se sentía mal. Culpable. Midoriya se había perdido porque estaba pendiente de su compañero. ¿Es que tampoco servía para cuidar a un bebé?
-Disculpad- Una abuelita, de cara amable, se acercó a la pareja. Cuando estos se giraron, la reconocieron.
-La vieja del su- Todoroki interrumpió a Bakugou, poniendo una mano sobre sus labios.
-Buenas tardes- Saludó, cordialmente -¿Qué se le ofrece?
-¿Buscáis a vuestro hermano?- Cuando Bakugou iba a renegar, Shoto se adelantó y asintió -Lo he visto irse con vuestra hermana. Una chica rubia con ojos amarillos.
Desearon no haber escuchado esa parte. El alma viajó hasta sus pies en un abrir y cerrar de ojos, dejándolos petrificados.
-¿Iba sola?- Preguntó el rubio, con un hilo de voz.
-Sí, no le acompañaba ningún galán- Les sonrió -Así que no os preocupéis.
-Abuelitaaa- Una niña de pelo rosa...
-LA NIÑATA DEL SUPER- Explotó Katsuki, señalandole con rabia, a la canción le seguían banda sonora unos ojos inyectados en sangre. Shoto sólo pudo ponerse la mano en la cara, debido a la vergüenza.
-El feo debilucho- Resopló ella.
-¡Miyichi!- Su abuela, se giró hacia los adolescentes -Lo siento, nos vamos. Le recriminaré por su comportamiento- Hizo 3 reverencias antes de irse, regañando a la niña.
Pero Katsuki no pudo saborear muy bien esa parte, pues Toga tenía a Deku.
Una villana
-Vamos.
Tras dar la orden, los chicos salieron corriendo, hacia el bosque, ya que, si se hubieran ido por el otro lado, se habrían dado cuenta.
No había más que árboles por todos lados. Un frondoso manto negro que no les permitía ver más allá.
Bakugou decidió usar su quirk, para subir un poco, mientras Todoroki usaba su lado de fuego para iluminar.
No obstante, no encontraban nada.
Y se les echaba el tiempo encima. Ya casi no quedaba ni un rayo de sol que se colara entre las hojas.
Habrían pasado unos 10 minutos. Bastante, pero no lo suficiente como para que sea imposible encontrarles.
-Yo digo que nos dividamos- Propuso Shoto, en voz bajita.
-Mala idea. No sabemos cuántos hay- Bakugou, miró un poco a su alrededor y, justo tras ellos, sonó como si una rama se rompiera, antes de que un cuchillos fuera directo a la frente de Todoroki.
Sin embargo, Katsuki fue más rápido y empujó a su compañero.
-Sal de ahí, villana- Bakugou estaba desesperado al escuchar una risa sádica.
De entre los arbustos, surgió, en efecto, Toga, cargando a Deku, lleno de hojas.
Al verle, los chicos se sintieron aliviados, aunque todavía no se podían relajar.
-No queremos peleas- Dijo, pausado aunque seguro, el mayor. Estaba claro que tenían prohibido usar sus quirks para pelear. Se lo aclararon cuando batalló con Stain -Danos al bebé y nadie saldrá herido- Miró de reojo a Bakugou. Sabía que otro objetivo de la Liga de Villanos era su compañero.
No obstante, más que asustado, le pareció que estaba emocionado. ¿Hasta este punto era de rencoroso?
-Bueno, igual sí que sales un poco herida- De sus manos, comenzaron a surgir explosiones.
Y, al instante, estaba tras ella, quien se giro a la vez que tiraba dos cuchillos. Bakugou, los esquivó con habilidad. Asimismo, aunque resignado, Todoroki creo una base de hielo, que la villana esquivó, pero quedó indefensa frente al rubio, ya que se había adelantado a sus movimientos y la cogió por detrás, haciéndole una llave para que no se moviera.
No obstante, Deku ya no estaba con ella. Él estaba sobre un árbol, gateando. Todoroki se sintió aliviado cuando lo vio, aunque duró poco. Justo enfrente, había una trampa. Constaba de un hilo, casi transparente, conectado a un manojo de filos. Si se movía tan sólo un centímetro más, caería al suelo, repleto de cuchillos atravesados.
Bakugou estaba más cerca, así que le echó una mirada a Todoroki y este lo entendió. No necesitaban más gestos. Ni siquiera palabras.
Parecían estar conectados tanto mental, como físicamente.
En cuanto el oji-rubí soltó a la villana, Shoto la encerró en un bloque de hielo.
-¡Bakugou!- Todoroki se dio cuenta de que Midoriya estaba a punto de tocar el hilo.
Le faltaba un suspiro. Y Bakugou todavía estaba a medio camino.
Luego todo sucedió a cámara lenta. El peli verde se desiquilibró. Pero eso les dio más tiempo.
Cuando tocó la cuerda, Bakugou ya le había cogido por la camiseta, así que los cuchillos se clavaron en el árbol siguiente.
Cuando aterrizaron, comprobó que estuviera bien. Así que suspiró, tranquilo, al verle sonriendo, cogiendo las puntitas de sus pies para balancearse en sus brazos.
-Estúpido- Le insultó, pegándole a su pecho otra vez y echando la vista atrás.
Y fue entonces cuando se dio cuenta de que todavía no habían acabado. Su corazón se estrujó al ver a Toga sobre Todoroki, amenazandole con un cuchillo.
-¡Todoroki!- Exclamó, dejándose la garganta. Se había quedado paralizado. No podía imaginarse que ocurriría si Todoroki le abandonaba. Sabía que podía con ella. Que todavía no era su momento.
Y, Todoroki, empujado por la impulsividad del rubio, hizo un manojo de llamas, que provocaron que la rubia retrocediera.
Cuando Katsuki se situó al lado del bicolor, ella decidió desaparecer entre los arbustos.
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La casa por el tejado [Todobaku]
FanficDebido al quirk de un villano, Izuku Midoriya se había convertido en un bebé. Un bebé llorón del que la clase tenía que hacerse cargo. Por eso, el profesor Aizawa tuvo la gran idea de encargar a sus alumnos del cuidado del infante. Cada semana, una...