Cap. 7 Poción

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Una fogata los mantenía calientes durante la noche, Koga había caído rendido después de luchar contra dos guerreros de la muerte que encontraron en el camino, Jakotsu había aprovechado de esto para terminar durmiendo pegado a él, Kagome dormía del lado contrario y Bankotsu se encontraba sentado mirando la fogata.

-no, no por favor- ella se movía intranquila-NO-se levantó de golpe.

-otra vez-murmuro Bankotsu.

-mmm… -suspiro Kagome cabizbaja.

-no has logrado dormir nada desde que estamos juntos, siempre es lo mismo, despiertas gritando, es un milagro que esos no se levantaran.

-no pude salvarlo-susurro.

- ¿que?

-no pude salvarlo, de nada me sirvieron mis poderes porque al final él murió en mis brazos.

-lo amabas-la pregunta salió de la boca del mercenario sin poder evitarlo.

-si- sonrió jugando con el pulso- yo… no lo acepte hasta tarde, pero lo ame, lo amo y lo amare siempre.

-para ello quieres la perla, pretendes revivirlo-pregunto desconcertado el chico- es peligroso- siguió hablando.

-¿porque?

-cuando traes del otro lado a una persona regresa diferente, su esencia se pierde, es él pero no del todo.

-y si revivo a mi pueblo las personas pasaran por lo mismo.

-no, es diferente ellos no murieron como tal, su alma fue robada y esa es la que se liberara, para volver al cuerpo.

-sabes mucho de ello…

-yo lo hice- sonrió melancólico.

-¡reviviste a alguien! Una mujer acaso.

-sí, mira ella y yo éramos muy diferentes mientras yo me dedicaba a robar, matar, y más en los pueblos, ella se dedicaba a salvarlos de seres demoniacos, al final uno de ellos la mato y no pude hacer nada, fui en busca de la perla y logre quitársela a la bestia, mi deseo fue retroceder el tiempo mucho antes de conocernos, ya que por mi ella había enfrentado a esos seres, yo deliberadamente causaría su muerte.

-debiste amarla demasiado para dejarla ir.

-sí, pero bueno- sonrió nerviosos- ahora sé que esta con alguien más y me hace feliz saber que ella está bien.






En el pueblo fantasma Kanna había guardado en el baúl los pergaminos traídos por Yura, sin percatarse que faltaba uno, en una choza Sesshomaru alias Naraku observaba a la peli negra intentando seducirlo quitándose la ropa frente a él, para tomar un baño en un balde, por desgracia él termino acostándose en el futon y mirando el techo, al final ella salió hecha una furia, por su lado él no dejaba de pensar en esa chica, ¿Por qué? Se preguntó incomodo, se levantó, salió en busca de respirar aire, despejar la cabeza, pero escucho voces y se detuvo.

-según el rumbo que tomaron, pronto terminaran en el pueblo Piedra Negra, ahí solo hay ladrones, violadores, asesinos, estafadores, por ello los guerreros de la muerte no han matado a nadie, necesito de la misma pócima que le di a Bankotsu la primera vez para hacerle creer enamorado por mí, el muy idiota ni recuerda que ella fue por él, pero este lo rechazo por mí.

- entonces le daré a Bankotsu la pócima al igual que a esa chica y propiciar que ellos… jajaja señora su descendencia llegara pronto.

-bien, parte y cumple con lo mandado porque ya no tendrás otra oportunidad.





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