🔹56🔹

2.1K 172 3
                                    

— ¿Por qué estás así? — preguntó él tratando de disimular sus nervios por la reacción que podría llegar a tener

— ¿Como así? — preguntó confundida sin despegar la vista del camino

— Estabas sonriendo antes de venir, y ahora como estamos solos estás callada  — explicó

— No estoy callada — respondió inmediatamente. ya casi llegaban

— ¡Claro que sí! — exclamó — ¡Estas nerviosa! — exclamó nuevamente un poco desesperado

— ¡No lo estoy! — se defendió. Y paró el auto. Él se bajó, y ella tras él — ¿Por qué te bajaste? Falta poco para llegar — preguntó cruzando los abrazos, solo faltaban unas cuantas cuadras

— No estaré ahí, si te molesto, Gabriela — ella unió las cejas

— ¿Que? — preguntó confundida por su tonalidad

— Estás hablando y riendo con alguien y llego yo, y te vas, me evitas, cuando pienso que estamos bien, me ignoras ¡Y ni siquiera me dices la razón! — Exclamó

— ¿Quieres que te diga la razón? — preguntó un poco alterada

— ¡¡SI!! — exclamó impaciente

— PUES LA MALDITA RAZON ES QUE ESTOY ENAMORADA DE TI — Espetó, y no sentía vergüenza, ya había comenzado a hablar. — DESDE ESE DIA EN EL LAGO HE COMENZADO A SENTIR COSAS POR TI QUE QUERIA NEGAR — habló — ¡PERO YA NO PUEDO! — Liam estaba frío, mientras que ella caminaba de un lado a otro — NUNCA HABIA SENTIDO ESO ANTES, NUNCA. DIOS MÍO, LIAM ME PONES TAN NERVIOSA, NI SIQUIERA PUEDO VERTE A LOS OJOS SIN QUERER BESARTE — confesó

parecía que estuvieran peleando, pero no, ella estaba confesandole su amor al beta quién estaba estático

— NO ME IMPORTA LO QUE PIENSEN LOS DEMAS, PERO SI LO QUE PIENSES TU, PORQUE ¡¡DEMONIOS ESTOY ENAMORADA DE TI!! — exclamó desesperada casi gritando — Y ME SIENTO TAN TONTA PORQUE... ¡TENGO MIEDO! ¡POR ESO TE EVITO! — confesó — TENGO MIEDO AL SALIR HERIDA, Y... ¡AHHH! — Soltó un grito frustrado — JURO QUE EN ESTE MOMENTO NECESITO BESARTE — pausó y suspiró  — Te quiero, Liam. Y no como amigo...

Liam no respondió, estaba en shock. No sabia que hacer

— POR DIOS DI ALGO, TE ESTOY DICIENDO QUE ESTOY ENAMORADA DE TI, Y TE QUEDAS AHI COMO UN ESTÚPIDO — le reclamó. Pero el estaba en shok. Ella suspiró cansada — ¿Sabes que? Olvida todo eso — suplicó triste — Solo fui una idiota — dijo más para si misma y lo  miró con los ojos cristalizados

— Gabriela yo... Yo...

— Déjalo si, Liam — negó triste, subió al auto y comenzó a conducir.
Cuando escuchó el motor rugir su cuerpo salió de su transe.

Mientras ella le confesaba todo aquello su mente le gritaba que hiciera algo, pero su cuerpo ignoraba las órdenes de su mente. Al darle cuenta abrió los ojos

— OH POR DIOS LIAM ERES UN IDIOTA — se insultó a si mismo — ELLA TE CONFESÓ QUE SENTIA LO MISMO POR TI, Y NI SIQUIERA LE RESPONDISTE — él se golpeaba la frente

— ¿Liam? — preguntó Luke quién venía del trabajo en la camioneta — ¿Que haces golpeandote? — preguntó riendo

— Dile a mamá que me guarde la cena — dijo para comenzar a correr dejando al hombre muy confundido.

El Beta comenzó a correr como nunca, en dirección a su casa, pero al llegar, ella no estaba ahí

— piensa Liam, estaba decepcionada, pien... ¡El lago! — exaclamó y corriendo llegó a la entrada del bosque donde estaba su auto, suspiró aliviado. 

Corrió nuevamente y su aroma se hizo presente, se guió por él mientras caminaba, y ella estaba ahí en el lago como la última vez. Estaba llorando

— ¿Por qué tuviste que decirlo? Es obvio que el nunca se enamoraría de alguien como yo — hablaba sola entre sollozos

en ese preciso instante Liam se sintió la persona más malvada del mundo, se sintió culpable, muy culpable. Él se acercó a ella y se sentó a su lado

  — ¿Que haces aquí? — preguntó sin cambiar su posición

— vine a verte — respondió tocando su hombro pero ella le dio la espalda

—  No me veas, soy una idiota — dijo

— No más idiota que yo... Hoy la chica de la que estoy enamorado me confesó que estaba enamorada de mi, y en lugar de decirle lo que sentía me quedé ahí parado como un idiota — respondió, su corazón se quedó quieto por un segundo

— Y... ¿Que le querías decir? — preguntó insegura, aún no lo miraba

— Le quería decir, que también estoy enamorado de ella, de su caballo, de su sonrisa, sus ojos — habló — que estoy enamorado de su voz, y de su aroma. Estoy enamorado de la manera en la se que sonroja, como se comporta cuando está nerviosa, también le diría que estoy enamorado de su personalidad, y su cuerpo, de sus ideologías, sus sueños, le quería decir que estoy enamorado de ella desde hace un tiempo, y que siempre me pongo celoso cuando está cerca de Brett, le diría que tengo noches sin dormir pensando en lo que amo de ella, y que ya le conté a mi madre sobre ella. Y por último, diría que no tengo miedo, porque yo... Yo estoy enamorado de ti, Gabriela — confesó ella lo miró

— ¿En serio sientes eso? — preguntó cómo una niña pequeña

— y mucho más — respondió acercándose más a ella

Esta sonrió

— ¿Recuerdas que en nuestra cita dije que habían cosas que quería hacer? — Preguntó cerca de ella en un susurro, tanto que sus respiraciones de mezclaban quemando levemente la piel.

Ella asintió bobamente mirando sus ojos, sintiendo su aliento caliente en su piel

— Pues esto es una de esas cosas — dijo antes de que su mano derecha reposara en su mejilla y sus labios se juntaran, en ese momento ambos estaban en el paraíso, sus labios se movian lentamente, disfrutando el momento, al quedar sin aire, se separaron lentamente sin despegar la mirada del otro, Liam mordió sus propios labios extrañando el tacto tan suave y carnoso de los de la chica. Ambos sonrieron en un suspiro

— Creo que ya es hora de irnos — Opinó ella, ya eran casi las 2:00am.

Ella se levantó  y él la siguió, Caminaron hasta que ella se detuvo frente a un árbol para amarrar las cuerdas de los zapatos. Al terminar se levantó encontrandose con Liam frente a ella

— Sabes... No es justo que solo nos hayamos besado una vez — sonrió y la tomó de la cintura

— ¿Tu crees? — respondió ella rodeando sus manos en su cuello, para acercarlo a ella, y ambos volvieron a unir sus labios en un largo y profundo beso, mientras se besaban ella jugaba con su cabello, mientras que él acariciaba su cintura.

Ambos se separaron

—  ¡Basta Liam! Debo ir a casa — rió.

Ambos subieron al auto y comenzaron a hablar felizmente. Ella lo llevó a su casa, paró el auto en la entrada

— Nos vemos mañana, a las 5 — le informó, ella asintió

— Hasta mañana Liam — se acercó a él y le dió un pico, él sonrió como un idiota y salió del auto, ella arrancó nuevamente y llegó a su casa. 

🔹
¡AL FIN! LO QUE TANTO ME PEDIAN 💕

ALMAS PERDIDAS 🔹 Liam Dumbar |EN EDICIÓN|Donde viven las historias. Descúbrelo ahora