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Ella se quedó quieta, sin decir nada, su respiración no estaba agitada, su mente en blanco, y sus ojos fijos en la puerta donde estaba Liam.

- Toma tu mochila, nos vamos de aquí - ordenó el chico caminando hacia a mesa para así poder tomar su mochila, al ver que ella no se movía tomó la de ella y se puso a su lado entregándosela

- ¿A donde vamos? - preguntó mirándolo

- A cualquier otro lado que no sea aquí - respondió

ambos caminaron hacia la puerta y comenzaron a caminar rápidamente, Gabriela saltó al escuchar otro estruendo, este cada vez mas fuerte, mas cercano, Liam la tomó de la muñeca y comenzó a correr junto a ella hacia la siguiente planta, cuando estaban mas lejos la soltó y se detuvieron respirando apresuradamente

- Liam ¿qué esta pasando? - preguntó un poco asustada

- No lo sé, solo se que hay algo que esta tratando de alcanzarnos, y no quiero averiguar que es - dijo el chico, ella tragó. El estruendo volvió, pero esta vez una oscuridad comenzó a aparecer

- ¿Ahora que hacemos? - preguntó retrocediendo

- correr - respondió el chico comenzando a correr con ella hacia uno de los salones.

Entraron a uno y cerraron la puerta con seguro, luego arrastraron muchas mesas para impedir el paso de alguien, o de algo. Al terminar ambos suspiraron - creo que hay que llamar a Scott - sugirió

- ¿Y si eso lo lastima? - preguntó con preocupación

- Créeme, ya esta acostumbrado a esto - ella solo asintió no muy convencida

Liam  fue hacia una de las esquinas, lejos de ella, cuando iba a prender su teléfono, este marcó un la pantalla el símbolo de apagando

- ¡Demonios! - exclamó molesto, ella volteó

- ¿Qué sucede? ¿que te dijo? - preguntó acercándose

- No le marqué, me quedé sin batería - gruñó molesto

- Usa el mio - ella se acercó a su mochila y sacó el celular, lo desbloqueó y se lo dio en contactos.

Él se alejó y buscó a Scott el cual estaba en la lista de los mas recientes, él antes de darle a llamar se dio cuenta de que hablan mucho. Llamó y no contestó, lo intentó siete veces y nada, el gruñó molesto y ella supuso que Scott no contestaba

- Marcarle a Stiles - ordenó, él le hizo caso y luego de unos repiques el chico contestó

- Hola

- Stiles, que bueno que contestas, ¿estas con Scott? - Habló rápidamente

- ¿Liam? ¿Por qué tienes el teléfono de Gabriela? - preguntó confundido

- Stiles, escúchame. - ordenó - Gabriela y yo estamos en la escuela, y hay algo, o alguien que nos esta persiguiendo, no sabemos que es, por favor los necesitamos - explicó rápidamente

- Vamos para allá - dijo, y Liam comenzó a contarle brevemente lo que estaba pasando mientras gabriela lo escuchaba caminando de un lado a otro, pero se detuvo al ver algo bajo puerta, abrió los ojos a mas no poder y comenzó a retroceder

- Li-liam - llamó nerviosa viendo como una niebla negra y espesa se extendía por el piso, y subía lentamente

el volteó, y abrió los ojos a mas no poder, ella seguía retrocediendo y chocó contra una de las mesas, la oscuridad se seguía extendiendo por todo el salón dando un aire denso al lugar.

La respiración de ambos adolescentes estaban totalmente aceleradas, ambos se impresionaron cuando la sombra se convirtió en una silueta "humana" echa de las tinieblas que flotaban al rededor de su cuerpo. Liam sacó sus garras y colmillos y al ver que ella no hacia nada le gritó

- Gabriela ¡Transformate! - ordenó - ¡AHORA! - gritó

- ¡No puedo hacerlo! - exclamó, él no hizo caso a sus palabras y se lanzo hacia la silueta que rápidamente sin dejar de mirar a la chica tomó el puño el beta entre sus manos y lo apretó fuertemente haciéndolo gritar

Aun teniendo al chico llevó su mano derecha a la parte trasera de la oreja de la chica y con su dedo tocó su piel haciendo que ella gritará de dolor y que sus ojos tomaran un color azul, que luego fue difuminado con el dorado

- Tu y yo tenemos una cuenta pendiente - habló la sombría voz

Al terminar la oración la figura se desvaneció entre las tinieblas y desapareció junto a ellas haciendo que Liam cayera al suelo recuperándose del dolor, Gabriela sentía un dolor punzante que acabó rápidamente.

- Liam ¿estas bien? - preguntó acercándose a él.

- Si, ¿y tu? - preguntó agitado, levantó la vista hacia ella y vió sus ojos azules difuminados en ámbar, esto hizo que el hombre lobo abriera sus ojos de la impresión

- ¿Qué pasa? ¿Por qué me miras así? - Preguntó rápidamente, él se levantó. Sus ojos volvieron a ser humanos

- Estaban azules - dijo casi en un susurro alejándose levemente de ella

- ¿Qué dijiste? - preguntó al no entender bien, sus cejas estaban unidas y sus ojos lo miraban atentamente.

Él la ignoró

- Liam, ¿Qué dijiste? - repitió con mas severidad en su voz, pero aun así su cuerpo estaba relajado.

- ¡Tus ojos estaban azules! - exclamó - ¡¡TUS PUTOS OJOS ERAN LOS DE UN ASESINO!! - gritó acusándola, esto la sobresaltó

- ¿De que mierda estas hablando, Dumbar? - Preguntó

- No te hagas la desentendida, primero te escapas, y luego esto ¿COMO DIABLOS QUIERES QUE CONFIÉ EN TI? - Volvió a alzar la voz.

Malia, Hayden, y Scott corrían por los pasillos junto con los humanos de la manada.

Llegaron a la puerta del salón y trataron abrirla pero no podían ya que las mesas al otro lado impedían su paso.

Al final Malia usó su fuerza para abrirla dejando caer las mesas que trancaban las puertas, y a los dos adolescentes peleando

- NUNCA HE QUERIDO TU CONFIANZA, DUMBAR - gritó manteniéndose derecha

- Liam, ¿qué esta pasando? - preguntó Hayden acercándose a él

- Pasa, que ELLA - la señaló - nos ha mentido a todos

- ¿Que que hablas? - pregunta Stiles

- Hablo, de que Gabriela ha matado personas, y que yo sepa aquí estamos en contra de ellos ¿No Scott? - Dijo mirando al alpha quien solo observaba en silencio

- ¡NO SOY NINGUNA ASESINA! - exclamó defendiéndose.

- No es lo que vi - dijo, todo se quedó en silencio.

Ella miraba a otra parte con los ojos cerrados tratando de calmarse, su ritmo cardíaco estaba acelerado, y todos los lobos podían oír y oler su impotencia y enojo. Liam al ver que no respondió, le gritó

- ¡¡SEGURAMENTE TU MATASTE A TU HERMANO!! - La chica volteó y abrió los ojos dejando ver el ámbar y el azul difuminados

- ¡¡¡CÁLLATE!!! - gritó - SI SUPIERAS UN POCO, SOLO ALGO MÍNIMO NO ESTUVIERAS DICIENDO ESO - Dijo acercándose a él, Hayden gruñó y Scott se interpuso

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Helou, espero que les haya gustado. ♥

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ALMAS PERDIDAS 🔹 Liam Dumbar |EN EDICIÓN|Donde viven las historias. Descúbrelo ahora