Sana no entendía que hacía en el aeropuerto a las 6 de la mañana un día sábado. Había estado teniendo días de mierda en la oficina, para tratar de que todo volviera a funcionar. Cada día que pasaba se le hacía más difícil, llegaba tarde a casa, pero Momo hacía todo un poco más fácil. Cada vez que entraba por esa puerta, sentía el olor a comida deliciosa que su novia le cocinaba, al principio creía que sería sólo de vez en cuando, pero no, Momo se encargó de que Sana comiera bien y eso la empresaria se lo iba a agradecer siempre.
-No entiendo que hacemos acá.
-Nuestro vuelo ya va a salir, anda vamos.
-¿Para dónde vamos?
-Es una sorpresa.
-Odio las sorpresas.
-Eso es porque nadie nunca te hizo una sorpresa como la mía.
-Odio tu ego.
-No arruines mi plan, por favor te lo pido. Sólo estaremos una semana y volveremos a viajar.
-Supongo que será una semana de vacaciones.
-Mmm... la verdad es que será más de una semana, pero sí, puedes decir que estaremos en unas vacaciones.
-Momo... sabes que no puedo tomarme todos los días que te gustaría, las cosas no están...
-Prométeme algo.
-Dime.
-Prométeme que intentarás estar bien y despreocuparte por todo lo que ocurre acá en Corea, prométemelo.
-Momo...
-Por favor – la japonesa tomó las manos de Sana junto con las de ella – por favor.
-Está bien, pero dime a donde vamos – "Pasajeros del vuelo con dirección a Barcelona por favor abordar"
-Ese es nuestro llamado.
-¿Qué?
-Anda, vamos o nos quedaremos abajo del avión.
-¿Estás hablando en serio?
-Si Sana, nos vamos a Barcelona, vámonos.
El vuelo fue tranquilo, una que otra turbulencia, pero nada fuera de lo común. Sana estaba emocionada por ir a Barcelona, le traía recuerdos de cuando solían viajar a esa ciudad con su madre y sus tres hermanas. Un sentimiento de nostalgia y melancolía la embargaba, pero no podía negar que estaba feliz. Barcelona era una de sus ciudades favoritas sin duda alguna.
En camino al hotel, Sana notó un leve nerviosismo en Momo, no entendía porqué la verdad, pero lo encontraba tierno. Apoyó su cabeza en el hombro derecho de la japonesa mientras bajaba la ventana del auto y dejaba que sus pulmones se llenaran con la brisa de la ciudad de sus sueños.
-¿Estás bien?
-No te imaginas cuanto – la japonesa sonrió – gracias por esto.
-No tienes que agradecer nada, absolutamente nada.
-Tengo que agradecerte mucho Momo, ambas lo sabemos.
-Creo que no es necesario, somos pareja después de todo. Cada una tiene que velar por la felicidad de la otra, si no, no funcionaría está relación.
-Gracias por tus palabras Sana.
-¿Qué haremos hoy día?
-No lo sé, lo que quieras supongo – Sana sonrió mientras se acercaba al rostro de Momo y dejaba besos en su mejilla derecha, notó un leve rubor sobre la piel.

ESTÁS LEYENDO
A Merced Tuya/ 2da temporada
General Fiction6 chicas volvían a unirse después de 7 años. Se supone que se volverian a ver para año nuevo del 2027, pero una tragedia inesperada volvía a unirlas antes de tiempo. Muchas habían comenzado de cero, otras seguían estancadas con su pasado. Nuevos y v...