17.- Un disparo y al suelo

333 34 1
                                    

Cuando Momo y Sana llegaron esa tarde, Nayeon y Mina le contaron lo que había sucedido con Elkie, la japonesa quería ir a hablar con Chaeyoung, pero sabía que su hermana necesitaba tiempo con Tzuyu ahora que las cosas claramente cambiarían entre ellas. Todo el mundo se había dado cuenta que la situación entre Tzuyu y Chaeyoung habían estado un poco tensa, las chicas esperaban que ahora, que Elkie no estaba entremedio de las dos las cosas mejorarían.

-¿En qué piensas? – le preguntó Sana a Momo mientras dejaba un pequeño beso en su hombro derecho.

-En que cada vez falta menos para que todo esto termine – Sana miró a la japonesa – no quiero que muera nadie más, no quiero lamentar más vidas.

-No digas eso, nada de eso va a pasar, créeme.

-Tú hermano es muy peligroso.

-Ese imbécil no es mi hermano – Momo miró a Sana – siempre se sintió como si sobrara entre las tres.

-Sana tiene razón – Nayeon llegó con cocteles para las dos parejas – Daniel siempre fue diferente a todas nosotras, lo cuál es raro, si nos ponemos a pensar que Tzuyu es su hermana biológica – Momo miró a Nayeon – Tzuyu jamás fue cómo él, pero eso no quiere decir que no tuviera motivos para querer muerto a mi padre o a nosotras.

-Lo dices porque la mantuvieron escondida ¿verdad? – preguntó Mina.

-Sí, para ella fue muy difícil, pero Sana y yo jamás la dejamos sola. Si lo hubiésemos hecho quizás, ella... quizás.

-No, Tzuyu jamás nos haría algo – arremetió Sana – aunque temo por ella.

-¿Por qué? – preguntó Mina.

-Tzuyu no es de mostrar siempre todos sus sentimientos, creo que todas nos hemos dado cuenta. Sólo se abre con Chaeyoung, y durante 7 años no estuvo Chaeyoung en su vida. En esos 7 años pasaron muchas cosas, incluso Daniel trató de hablar con ella, pero ella no quiso escucharlo, luego vino Elkie, la muerte de Sunmi. Muerte que estoy segura de que no ha podido superar del todo, pero tampoco habla con nadie de ese tema.

-Chaeyoung la ayudará – Momo colocó su mano en la rodilla derecha de Nayeon – sólo dale tiempo para recuperar todos los minutos, segundos y horas perdidas.

-En fin, basta de tragedias familias que tenemos mucho de eso en nuestras vidas – Nayeon se levantó de la silla - ¿Qué tal un asado? Muero por comer carne a la parrilla, escuchar música, bailar y conversar.

-Me parece muy buena idea – Sana se levantó y caminó hasta la cocina – Nayeon y yo limpiaremos las carnes y lavaremos las verduras. Ustedes pueden ir a buscar vino en la bodega e ir prendiendo el fuego.

-Claro que sí – Mina dejó su vaso sobre la mesa para luego caminar hacia Nayeon y abrazarla.

-¿A qué se debe esto?

-A que te amo – Momo no pudo evitar al escuchar las palabras de su hermana – y que han sido los mejores meses a tu lado, que sólo espero que sigamos caminando juntas de la mano y cumplir todos nuestros sueños, todas las cosas que quedaron pendientes del pasado hacerlas. No quiero seguir perdiendo tiempo.

-Woow – la voz de Chaeyoung hizo que todas las chicas giraran – eso fue muy romántico. ¿Qué harán?

-Tiraremos carne a la parrilla – respondió Mina.

-Que rico – Tzuyu apareció en el lugar – necesito carne y mucho alcohol.

-¿Cómo estás? – preguntó Sana.

-Cansada mentalmente – respondió la taiwanesa – pero ya hablé con Chaeyoung y creo que las cosas irán mejorando.

-Claro que sí, las cosas mejorarán para todas nosotras – Nayeon abrazó a su hermana – ahora ayuda a Momo y Mina a ordenar el pateo y a preparar el fuego.

A Merced Tuya/ 2da temporadaDonde viven las historias. Descúbrelo ahora