Así que aquí estoy. En mi primer día de trabajo, con mi cámara montada en el trípode delante de mí, y una chica abierta de piernas sentada en un sofá enseñándome todo su precioso y operado chichi mientras lucho porque parezca que me parece una situación muy normal.
¿Cómo puede alguien operarse los labios vaginales? Es decir, ugh, qué dolor.
En cuanto le he hecho varias fotos a la chica en mil millones de posiciones diferentes, se despide dándole un beso en la mejilla al director de la película que van a filmar y dedicándome una sonrisa, y va a cambiarse. El director se me queda mirando como queriendo decirme algo, y yo le miro porque creo que va a decirme algo. Y así durante varios segundos.
-¡Sienna! -oigo la voz de Alice.
Oh, gloriosa y bella Alice, que me has sacado de esta situación tan incómoda, te amo.
-Alice -digo.- ¿Qué haces por aquí?
-¿Vienes conmigo a tomar un café? -me pregunta.
-Claro, desmonto el trípode y voy -sonrío, agradecida porque me saque un rato de este plató tan cargado de...sexo.
Tal y como lo estoy enfocando parece que odie el sexo o algo así. No os equivoquéis, amo el sexo, pero cuando lo tengo yo. No me gusta ver a otros haciéndolo. Pero bueno, es mi nuevo trabajo, así que voy a tener que acostumbrarme.
Nos sentamos en una de las mesas de una cafetería que queda al lado del trabajo y me pido un café con leche con un croissant enorme.
-Entonces, ¿buscaste a John Lyons? -dice de repente mientras tomo un sorbo de mi café, cambiando el tema de la conversación.
Casi escupo el café al recordar todo lo que vi ayer.
-Sí, lo busqué -admito.
-¿Y qué tal? -pregunta divertida.
-Tiene la polla más grande que he visto en mi vida -contesto seriamente, y Alice estalla en carcajadas.-¿Qué? ¡Es verdad! Bueno, no he visto demasiadas, pero de todas las que he visto definitivamente la suya es la más grande.
Alice prácticamente está ahogándose con su café de lo mucho que ríe mientras yo recuerdo lo que pasó la noche anterior, cuando abrí la galería de imágenes. Mierda, casi me dio un infarto al ver esas fotos de John desnudo. Sobra decir que tiene un cuerpo espectacular con algunos tatuajes -me ponen tanto los tatuajes...-,pero también está bien dotado. Muy bien dotado.
-Por cierto, ¿por qué querías saber si trabaja aquí? -pregunta Alice con lágrimas en los ojos cuando consigue respirar como una persona normal.
-Uhm... Le conocí hará unos dos meses en la playa de mi ciudad, San Diego, y estuvimos hablando y tal -contesto.- ¿Puedes creer que me dijo que se llamaba Evan? Y ahora va y resulta que se llama John, qué mentiroso.
Entonces Alice vuelve a reírse, no tanto como antes -reírse de esa manera dos veces en un mismo día puede ser mortal-, y analizo mis palabras buscando lo que sea que le ha hecho tanta gracia.
-¿Qué pasa? -pregunto.
-Pues que se llama Evan -contesta aún riendo un poco.- John Lyons es su nombre artístico.
-¿Nombre artístico? -ni que fuera cantante.
-Sí, la mayoría de actores porno tienen uno -me explica-, algunos lo tienen por gusto, otros porque sus familias o conocidos no saben que se dedican a eso y quieren ocultar su identidad. ¿No lo sabías?
-Pues claro que no, no es como si fuera una experta en porno -ruedo los ojos.
Me dedica una sonrisa divertida y terminamos nuestros cafés hablando sobre otras cosas sin importancia, para luego volver al trabajo. Alice se coloca de nuevo la pequeña placa con su nombre y se queda en recepción, y yo voy hacia el plató otra vez.
Llevo cinco minutos dando vueltas por los pasillos, ¿dónde mierda está el plató? Esta mañana, cuando Ken me ha llevado hasta allí, parecía un camino fácil, pero ahora me siento en el jodido laberinto de Harry Potter. Sólo me falta encontrarme a Voldemort asesinando al vampiro de Crepúsculo por aquí. Cuando estoy casi tirándome de los pelos de la desesperación, alguien aparece detrás de mí.
-Parece que alguien se ha perdido -esa voz debería estar prohibida de lo sexy que es.
-Hey, John, Evan, o como quieras que te llame -contesto.
-Aquí suelen llamarme John, pero por ser tú, te dejo llamarme Evan -sonríe.- Solo uso el nombre de John aquí, no quiero que sepan mi nombre real.
-Lo sé, Alice me lo ha contado.
-Solo ella y Ken saben mi auténtico nombre. Bueno, ahora tú también.
-Pensé que me habías mentido al decirme que te llamabas Evan cuando nos concimos.
-¿Por qué iba a mentirte sobre mi nombre? -ríe.
-Pues igual que me dijiste que eras una "especie de actor" -hago comillas con los dedos- en vez de que eras actor porno.
-No te mentí, soy una especie de actor -hace una mueca divertida.
-Sí, esa especie que es grabada mientras folla para que luego la gente se masturbe mientras lo mira -contesto frunciendo el ceño.
-Oh, mujer, dicho así parece algo muy vulgar y sucio.
-¿Y cómo quieres que le diga? ¿Que repartes amor para que las personas se hagan el amor a ellas mismas? -ruedo los ojos.- No me jodas.
-Tienes una boca muy sucia, tú.
-Sí, la tengo.
-Podrías hacer cosas muy interesantes con esa boca sucia -y ahí es donde Evan cae de mi pedestal de "chico simpático y tierno".
-Ew, no vayas por ahí -digo haciendo una mueca de asco, y me giro para irme.
-¿Cómo piensas volver al plató si no sabes el camino?
Mierda.
-Está bien, acompáñame -suspiro resignada.
-¿Cómo se piden las cosas? -me dice hablándome como si fuera una niña de cinco años.
-Llévame al plató, pesado.
-Bueno, me sirve -dice. Se acerca a mí, me levanta por las caderas, y me pone sobre su hombro.- ¡En marcha!
-¡¿Qué mierda haces, idiota?! -chillo intentando que me suelte.- ¡Bájame ahora mismo!
-Joder, cómo me ponen tus insultos -dice, riendo, y sigue su camino sujetándome con más fuerza.
Llegamos al plató y todo el mundo nos está mirando, probablemente porque han oído mis gritos desde los pasillos -no soy muy silenciosa, lo admito-. Evan por fin me baja de su hombro, me roba un beso en la mejilla y se va corriendo para evitar que lo asesine como le he prometido que haría durante todo el camino.
Me giro para empezar a trabajar, y veo que la gente que está trabajando en el plató me mira disimuladamente, muchos de ellos con sonrisas pícaras.
Voy a matar a Evan.
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ALOHA! Sé que dije que subiría ayer, pero el wifi de mi casa decidió suicidarse y he tenido que terminar de escribir el capítulo des del móvil. I'm sorry.Pronto empezaré a publicar dos días a la semana, pero de momento lo haré los miércoles. Así que, ¡hasta el miércoles que viene!
Beshitos,
Claire
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Detrás de las cámaras
RomanceSienna es una chica sencilla con una vida de lo más normal hasta que conoce a Evan, un hombre con una profesión un tanto peculiar que pone su mundo patas arriba. Historia ganadora de los WOW Awards en la categoría "Chick-lit/Erotismo". OBRA REGISTRA...