Salí del instituto y caminé directamente al gimnasio en el que me había inscrito hace unos meses, no estaba demasiado lejos, de hecho se encontraba a unas cuatro calles, así que no tomaría el transporte, sería un desperdicio de dinero usarlo cuando puedo ir andando sin problemas.
A esta hora no hay mucha gente entrenando, a medio día solo quedan unos pocos y me resulta más cómodo, porque así puedo usar las máquinas sin tener que alternar con otra persona y terminar mis series más rápido.
—Jennie, que bueno verte de nuevo —saludó Taehyung al verme entrar.
El era el encargado de recepción.
—Hola, Tae —correspondí al saludo al tiempo que le mostraba mi tarjeta de miembro —¿Ha venido Namjoon? —mi entrenador.
—Sobre eso, a Nam lo han transferido a la nueva sucursal del centro, pero ya han asignado una nueva entrenadora.
—Mmm —torcí la boca.
No voy a negar que no estaba muy contenta con la idea.
Nam era un muchacho agradable, además de que el ya estaba al tanto de mis entrenamientos y llevaba un seguimiento de ello.
—Quita esa cara, chica, apuesto a que te va a caer bien.
—¿Ya has tratado con ella?
—¡Sí! Además está bellísima —si bueno —¡Mira, ahí está! —giré el rostro a donde apuntaban los ojos del castaño.
Posicionada bajo la barra olímpica se encontraba una mujer alta de cabello negro sujetado en una coleta, espalda recta, piernas separadas y con las puntas de los pies ligeramente abiertas, era una sentadilla perfecta. Su técnica era espectacular, lograba hacer la presión necesaria en los músculos de sus piernas, y observando con más detalle, tenía un cuerpo escultural, estaba divinamente proporcionada, lucía musculosa y tonificada sin quitar el aspecto delicado de su figura femenina.
—Eh, Jennie, que te has quedado pasmada —enfoqué a Taehyung que pasaba su mano frente a mi cara.
—Ah sí, pues ya la he visto, ahora iré a ver que pasa —guardé mi tarjeta —Deseame suerte.
—Suerte.
Fui a los vestidores y cambié mi uniforme por unos leggings color negro y un top a juego del mismo color, dejando al descubierto mi zona abdominal. Frente al espejo sujeté mi cabello en dos trenzas y salí dejando mis cosas en un casillero.
Hora de conocer a la entrenadora, de alguna forma me ponía un poco nerviosa, no sabía como sería.
—Hola —me acerqué tímidamente cuando estaba bebiendo de su botella de agua.
—Hola, tú debes ser Jennie, ¿verdad? —preguntó con una sonrisa —Soy Lisa.
—Esa soy yo —sonreí de igual forma y le tendí la mano.
Ella aceptó mi saludo, pero en vez de solo sacudir el brazo tiró de mí para abrazarme. Vaya, si que es muy animada.
—Namjoon me habló mucho sobre ti, estoy al tanto de tu entrenamiento —dijo al separarnos —Estás en un equipo de atletismo, ¿cierto?
—Sí, la próxima semana tengo una carrera —comenté.
—Vale, entonces nos enfocaremos en ejercicios de resistencia, ¿de acuerdo? —asentí —comienza con cuatro series de treinta burpees —ordenó.
Se me calló la mandíbula al piso. Me habría gustado ver mi propia cara, seguramente estaba como para enmarcarse y colgar el cuadro en el centro de una habitación.
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A Little Bit Of Jenlisa - One Shots
RandomHistorias Jenlisa que me vienen a la cabeza de vez en cuando y me place escribirlas. PD: El segundo libro de one shots ya está disponible en mi perfil. Créditos a quien pertenezca el fanart de la portada.