Our Baby Steps © ym

🍍19 - Estatus y etiquetas.

Jimin traga el resto de la ensalada y toma un vaso de agua para aligerar su garganta y ganar tiempo. El alfa tiene una sonrisa de oreja a oreja y le mira ansioso, como quien espera una respuesta.

Y Jimin no sabe si puede dársela, pero lo intenta.

—No tengo idea de porque hice eso. —murmura, bajando la vista a los platos que hay frente a él. —Yo..., yo no soy así.

—¿Así cómo?

—Dócil. —respondió sin dudar. —Tonto e infantil. Dios mio. —gruñó, llevándose las manos al cabello. —Fui tan ridículo, Yoongi. Tan, tan malditamente ridículo.

—No, no lo fuiste.

—¡Te llamé hyung! —chilló avergonzado. —Por el amor de dios, te llamé hyung, Yoongi.

Pensar en lo que había dicho y la manera en la que se había comportado era tan molesta y mortificante. Joder. En su momento no lo había sobre pensado pero ahora, con la ropa puesta y con el alfa frente a él, era imposible no sentirse ridículo e inexperto.

Seguramente Yoongi había estado con muchas personas y, seguramente, esas personas sabían que decir para mantener el interés del alfa en la cama. Sabrían hablar sucio o, como mínimo, sabrían decir otra cosa que no fuese "hyung" y "anúdeme".

Por dios. Había pedido un nudo cuando había pasado toda su vida odiándolos. Francamente había cruzado su límite.

El movimiento frente a él le hizo subir la vista para ver como el alfa se acercaba y se arrodillaba al lado de su silla.

—Eso fue lo más caliente que me ha pasado, Park Jimin. —juró Yoongi, tomando su mano. —Y ni siquiera puedo entender como lograbas hablar si yo a penas podía respirar, corazón. —confiesa con una sonrisa tímida. —Mi lobo estaba tan complacido y tan feliz que olvidé el mundo por un momento. Solo podía pensar en ti y en lo maravilloso que te sientes, y en lo bonito que eres. ¿Como crees que podría disgustarme que me llames así o que te comportes dócil? Solo me hace quererte más.

Jimin sonrió torcido y sus ojos se humedecieron porque, dios, estaba tan malditamente sensible que la sinceridad del alfa hacía que le doliera el pecho.

—Eres un pegajoso. —acusó, sonriendo pequeño cuando Yoongi acarició su rostro con una de sus manos y se inclinó a besarlo. —Alfa-pegajoso.

Yoongi gimió silenciosamente. —Después de lo de hoy es lo mínimo que puedes esperar. —aseguró. —Tu no eres mejor. ¿O crees que no noté que dejaste mi olor sobre ti?

Atrapado.

—No...no es así.

El alfa se acercó a oler su cuello. —Sí lo es. Puedo sentirlo. —su dedo índice acarició los labios entreabiertos del omega y sintió a Jimin estremecerse. —Eres un bebé necesitado y yo soy el hyung, así que obedecerás. Terminarás tu cena y volverás a la cama conmigo.

—Pero-...

—Obedece a tu hyung.

Y Jimin hizo exactamente eso.

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Más tarde, esa noche, Jimin se sorprendió pensando en lo mucho que le gustaba ser dominado por el alfa de Yoongi. Porque estar sobre sus manos y rodillas, cubierto de semen y saliva, realmente no era algo que le gustara particularmente.

Sin embargo, con Yoongi, se podría volver su actividad favorita.

—Hyung, mierda... —lloriqueó el omega cuando las embestidas aumentaron.