𝐋𝐋 [Donde una pequeña mentira, revela grandes secretos.
O
Donde Lee Si-Han oculta por el bien de todos su parentesco con Lee Su-Ho, sin pensar en las consecuencias que podría traer]
Heterosexual.
Han Seojun x OC Female.
True Beauty x OC.
✓Hermosa...
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6 años antes...
Mi hermano se encuentra nervioso. No entiendo el porqué. Muevo mis pies observando mis zapatillas azules que mamá me compro antes de irse de viaje. Suho sigue sin decir nada. Mantiene su vista fija en la blanca pared frente a ambos.
Involuntariamente busco a papá con la mirada. Veo gente vestida de blanco caminar rápido por el lugar. Papá aparece de repente hablando por el móvil mientras se acerca a ambos. Suho se pone de pie y lo imito agarrando su brazo con fuerza.
Cuando ambos adultos llegan, papá se agacha frente a ambos y me extraña sus ojos húmedos. Es como si hubiese estado llorando. Frunzo el ceño y veo con desconfianza al señor vestido de blanco. Algo le hizo a papá.
— Suho, Sihan. Acompañeme — nos dice papá y ambos obedecemos como siempre. Sigo aferrada al brazo de Suho mientras seguimos a papá.
Quiero salir rápido de aquí e ir a buscar el helado que papá me prometió y tomar fotos para enseñárselas a mamá cuando vuelva. Ella estará muy feliz.
Caminamos por algunos minutos y luego el señor vestido de blanco abre una puerta. Nos deja pasar primero y me confunde ver que la habitación tiene extraños aparatos que emiten un ruido extraño. Sigo con la mirada los cables de estos y llego a la persona que los tiene conectados.
Es mamá.
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Actualidad.
— No — mi voz, saca del trance en el que está a el gran Lee Joohun, como muchos de sus fans lo llaman.
Yo tristemente lo llamo padre.
Niega y si no fuera porque Corea está a varios kilómetros de Japón, estoy segura que mi respuesta negativa hubiese sido manipulada. Sus ojos se fijan en mi rostro y casi quiero cortar la videollamada ya sabiendo lo que dirá.
— Cada día eres más idénticas tu madre.
Dime algo que no sepa.
Mi mandíbula se tensa y sonrió con los labios apretados entre sí dando un pequeño asentimiento. A pesar de todo, sigue siendo mi padre y le debo respeto. Algo que Suho ignora.
El pequeño pitido que indica que la puerta principal fue abierta suena y por ella entra mi hermano. Me da un pequeño vistazo y su mirada se oscurece al ver la tableta en mis manos. Ya sabe con quién hablo.
Y papá ya sabe quien llegó.
— ¿Es Suho, verdad? — asiento esta vez soltando un suspiro de cansancio. Puede que ya hayan pasado años, pero ninguno de los tres puede aguantar estar en una misma habitación sin llegar a los gritos.
