𝐋𝐢𝐭𝐭𝐥𝐞 𝐋𝐢𝐞 ➤ Han Seojun

♨０７

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— ¿Seojun? — lo llamo mientras me acerco. Sin dar señales de haberme escuchado, lo vuelvo a llamar y tocó su hombro. Sólo así el chico parece volver en sí.

Me ve desorientado algunos segundos, parpadea y ve a su alrededor antes de volver a enfocarse en mí.

— ¿Sihan? — asiento y el chico suspira recargandose más en la moto.

Estamos por algunos minutos sin decir nada. La temperatura baja en las noches y soy consciente de ello cuando el fino suéter que uso no es capaz de protegerme del frío. Frotó mi brazo distraída y me alejo algunos pasos del chico que de nuevo parece perdido con intención de irme.

— Espera — toma mi brazo deteniéndome. Lo observo.

Luce cansado.

— ¿Sucede algo? — le pregunto. Niega para sí y toma el casco que tiene apoyado en el asiento de la moto extendiéndome este.

Lo tomo sin saber que más hacer viendo cómo sube a la moto. Quita el seguro y la enciende. El suave ronroneo que está emite llama la atención de algunos transeúntes pero ambos lo ignoramos.

— Sube — me acerco los paso que me aleje pero no subo como me dice.

— No vivo lejos, Seojun. Algunas cuadras y...— no puedo continuar por su interrupción.

— Es de noche, cargas con bolsas y estas sola. Blanco fácil para cualquiera. Venga, sube — explica y aunque quiero negarme, tiene razón.

Aunque Seúl sea una ciudad 'segura', siempre hay peligros en las calles y más al estar tan oscuro. Sin más remedio, paso la bolsa hacia mi mano izquierda siendo un poco difícil por el casco, agarró el hombro del chico con la derecha y subo pasando una pierna sobre el asiento de esta. Me coloco el casco, coloco la bolsa entre mi abdomen y su espalda y coloco las manos en el borde del asiento.

Espero que arranque pero por las pequeñas sacudidas que tienen sus hombros, sé que se está riendo de mí.

— ¿Y ahora qué? — le pregunto malhumorada.

— No eres un ser inmortal, Lee. Y si caes por no sostenerte adecuadamente, podrías lastimarte. Ven — gira un poco su cabeza hacia atrás y toma mis manos pasando estás por su torso. Sólo la bolsa de mis compras hace que nos distanciemos unos centímetros. Pero estamos muy cerca — Sostente.

Asiento y agarró su cintura con firmeza. El chico me pregunta la dirección y se la doy. Frunce el ceño al ya conocerla pero igual no dice nada y yo tampoco. La conoce por Suho.

Arranca y avanza con rapidez por las calles vacías. Vamos pasando por un parque cuando detiene un poco la marcha. Quiero preguntarle por qué se detuvo ya que no veo mucho sobre su hombro, el chico es más alto que yo hasta sentado pero arranca sin decir nada y solo me queda ver cómo nos alejamos de dos figuras distorsionadas que veo cuando dobla en una esquina.

¿Quiénes eran?.

No pregunto y solo hablo cuando frena suavemente frente a mi edificio y bajo de la moto con las piernas un poco temblorosas. No estoy acostumbrada a viajar en moto. Le devuelvo el casco que me prestó.