prohibido - c.r.o

23

Tomás sintió que el mundo se había detenido, puso la palma en el hombro de Mauro y ambos salieron de la casa para montarse en el coche directo al hospital.

En menos de cinco minutos ya estaban atravesando las puertas del hospital, buscaron la habitación desesperados y abrieron la puerta de golpe.

Nicole miró a Tomás, quería sonreírle pero no podía, no entendía que estaba pasando...¿que hacía ahí?, ¿donde estaba su bebé?, ¿donde había estado Tomás?.

Miró su vientre de nuevo, obviamente se había dado cuenta de que no estaba llenita como antes, y podía sentir con la yema de sus dedos una cicatriz cerca del vientre.

—¿Que le han dicho?.— cuestionó Tomás y su mamá negó

—Nada, creemos que es mejor que lo hagas vos. Los dejamos solos.— dijo y la mamá de Nicole abandonó la habitación, después la mamá de Tomás y al final Mauro

Se hizo un silencio entre los dos, Tomás veía a Nicole y podía leerle la mirada. Estaba confundida, tal vez asustada.

—¿Q-que fue lo qué pasó?.— cuestionó hacia Tomás y él se pasó los dedos por su cabello desordenándolo

—Nicole... estuviste en coma casi dos semanas.— dijo y Nicole sintió una opresión en el pecho— Nosotros no llegamos al hospital.

—¿Cómo?, ¿por que?.— cuestionó y Tomás iba a responderle pero Nicole recordó lo más importante—¿Mi bebé?. ¿Donde esta mi bebé?.

—Amor...

—¿Donde está Tomás?.

—E-está...— los ojos de Tomás se enrojecieron y gruesas lágrimas cayeron por sus mejillas, se sentó en la camilla a lado de Nicole y la tomó de ambas manos —... tuvimos un accidente Nicole. Chocamos, y... el mayor impacto lo recibiste vos, intentaron sacar al bebé desde tu vientre pero... el accidente lo dejó muy mal, no... no nació Nicole.

—¿Cómo que no nació?. ¿Donde esta Tomás?.— insistió comenzando a llorar y Tomás no pudo evitar llorar también

—Lo enterramos hace una semana... lo pusimos en una capilla bonita, tiene muchas flores y...

—¡¡¡ESTAS MINTIÉNDOME!!!.— dijo en voz alta, los ojos picándole de lo rojos que estaban

Se soltó de las manos de Tomás como si su tacto le hiciera daño, como si la quemara. No, su bebé no estaba muerto, ella había visto cómo había nacido... estaba mintiéndole.

—Tranquila.— dijo el médico entrando al escuchar su grito

—Última vez que pregunto. ¿¡Donde estaba mi bebé!?.

—¿No le ha dicho?.— cuestionó el médico hacia Tomás

—Si pero...

—¡Yo lo vi nacer!. ¡Están mintiéndome!.

—Cálmese, no es bueno que se altere después de regresar del coma... le puede afectar.

—¡Me importa un carajo, ¿donde esta mi bebé!?.— cuestionó levantándose de la camilla

Lo peor de todo era que solo miraba a Tomás, lo estaba culpando por sobre todas las cosas. Y eso Tomás lo notó, iba por él, le estaba preguntando a él, quería algo de él.

—Ya se lo dijo su novio, su bebé sufrió en el choque, era irreconocible, murió, desde que usted entró en coma se culminó, entiéndalo.— intervino el médico y Nicole bajó la mirada a su vientre

Su cicatriz...

La tocó y negó con la cabeza, se sentó en la camilla y comenzó a llorar. El médico miró a Tomás y él se mordió el labio. Iba a acercarse a ella, pero entonces Nicole alzó la mirada y lo miró.

—¿¡No te duele una mierda no!?.— cuestionó con rabia en su voz— ¡Ese bebé no era tuyo siquiera, por eso estás tan tranquilo!. ¡Es tu puta culpa!.

—Nicole, ¿que estas...

—¡No te importaba un carajo mi bebé!.— lo amenazó y Tomás negó sintiendo algo caliente en el pecho— ¡¿Por que no lloras como yo!? ¡¡¡PORQUE NO TE IMPORTABA UNA MIERDA!!!.

—¡Sufrí en su momento Nicole basta!.— alzó la voz Tomás cansado de sus reproches— ¡Iba a cuidarlos a ambos, ¿que no entendes!?.

—¡Una mierda!.— dijo Nicole levantándose la camilla y lo empujó—¡Andate de acá, no te quiero ver, ándate Tomás!.

Tomás negó con la cabeza y salió de la habitación cerrando la puerta de un portazo.

—¿Que pasó?.— preguntó Mauro y Tomás negó con la cabeza, no sabía que hacer así que terminó buscando el cuerpo de Mauro y lo abrazó fuerte comenzando a llorar— Tranquilo.

—N-no se que le pasa. Me corrió, me dijo que su bebé no me importaba y me culpo de que este muerto. N-no lo entiendo Mauro.— dijo entre sollozos y Mauro suspiro acariciandole la espalda

—Tranquilo, dale tiempo.— dijo Mauro y Tomás se separó de él

—Voy a volver.— Mauro frunció el ceño

—¿Eh?.

—A la joda.

—No, estás loco.— dijo Mauro y Tomás negó

—Quiero volver Mauro.

—Te conozco, vas a ir a buscar a Ágatha, pues no mi amigo, acá te quedas. No vas a volver a la joda.

—¿Y que si quiero buscarla?. Aquí mi mujer no me quiere, ¿que hago acá?.

—¿Te acabas de escuchar?. Dijiste mi mujer no creo que necesites más que eso para saber que no tenes que volver allá. Porque tú mujer está aquí, no en esa joda.— dijo Mauro haciendo que Tomás se siente y esté bajó la mirada

Tenía tanta razón.

—No quiere ni verme, me duele Mauro, posta me duele. Y me duele porque me esta culpando.

—Más tarde se arrepentirá, no sabe lo que dice. También vos entendela, se despertó de un coma, al despertarse ya no tiene su pancita, y obvio piensa que su bebé nació; ahora el enterarse que realmente jamás nació, y sobre todo que murió justo cuando ella entró en trance es... traumático.

—Lo se, mierda... seguro no va a querer tener nada que ver con embarazos.

Mauro alzó una ceja y lo miró de reojo.

—¿Lo harías?.

—¿El que?.

—Dejarla embarazada. Digo este bebé no era tuyo.

—Si ella quiere claro que lo haría. No me molesta la idea, estuve preparándome para ser padre y... pasaron estas cosas.

—Veras que se va a calmar más tarde, tal vez unos días, meses, años...

Tomás miró a Mauro y él sonrió.

—Pero de que se tiene que calmar, se tiene que calmar.— finalizó Mauro y Tomás se rió negando con la cabeza

Se reía porque Mauro lo conocía muy bien, supo perfectamente que la iría a buscar a ella, porque cuando Tomás se enojaba se desquitaba de la peor manera con aquella persona, traicionaba, se ponía una venda en los ojos y hacía lo que le venía en gana, sin importarle nada.

Sino era con Ágatha iba a ver con Martina y eso era peor. Mucho peor.

Pero sabía que no lo podía hacer, si Mauro no hubiera estado ahí, se hubiera ido, pero antes de siquiera tocar a alguna mujer ajena a Nicole, reaccionaria y abortaría la misión.

Porque Nicole, era su mujer, era su razón de vivir, era ella y nadie más. Por mucho que ella lo mandara a la mierda ahora no se iría, no la dejaría.

Jamás.

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aveces cuando estoy bien me salen caps buenos no? jakajka

voten y comenten, lxs adoro 🥀