~Muchos años después~
He perdido la cuenta con exactitud, 60...70...80...90 años o tal vez más, pero en el paso de ellos he vivido muchas experiencias, ver como las personas que apreciaba tanto se mudaban a otros lugares, se casaban, tenían hijos, todo eso y más mientras iban envejeciendo hasta su último día y no voy a negar que cuando partían al otro mundo sentía un profundo dolor. Cuando el menor de los Rengoku falleció , dejamos nuestro templo en manos de un conocido de confianza para finalmente decidir partir a otras tierras a fueras de Japón, en pocas palabra serian unas extensas vacaciones.
Con Douma decidimos estudiar algunas cosas para poder mantenernos, con más razón si planeábamos formar una familia. Claro que hace mucho tiempo ambos habíamos perdido aquello que nos hacía puros, pero habíamos quedado en tener un hijo cuando el efecto de la dosis funcionará al 100% ya que seria muy raro que nuestro descendiente no nos vieran envejecer. ¿Cómo nos dimos cuenta que nuestra vida eterna llego a su fin? Pues ambos empezamos a notar cambios notorios en nuestros cuerpos.
Dando paso a nuestra primera hija, Makoto Hattori , quien era una hermosa niña que poseía el color de mi cabello y los hermosos ojos de su padre. Al paso de 10 años tuvimos a nuestro segundo hijo, Koji Hattori este pequeño se parecía en todo a su padre a excepción de los ojos que eran del mismo color que los míos; ambos eran de nacionalidad Italiana. Cinco años después decidimos volver nuestra tierra natal, al igual que otros países ya estaba desarrollado.
- ¿Mamá, en serio crees que pueda hacer muchos amigos hoy?- ya había practicado antes japonés pero de todas maneras se le escapaba el acento italiano.
- Claro que si cariño, todos van apreciar siempre y cuando demuestres tu amabilidad y respeto, no lo olvides.- unos pasos apurados llegaban a la cocina sobre todo iban en dirección a mi hija.
- Además quien no querría ser amiga de una niña muy preciosa como tú.- el ojicolor se acercó a ella para depositar un beso en su mejilla mientras ataba su corbata.- Va a ser un gran día mi pequeña Maki y si alguien te molesta papá va a protegerte.-
- Gracias papá.- lo abrazó para después ir hacia mi y darme un abrazo también.- Gracias por la comida mamá estaba riquísima.- Le di un beso en la cabeza para después irse corriendo para alistarse.
- Al parecer no hay beso para tu querido esposo ¿Eh?- se acercaba a mí, posó su manos en mis caderas para darme un beso que duró hasta quedarnos sin aire.- Sigues tan preciosa como el día en que te conocí, Yune-chan.- han pasado tantos años y aun logra que mis mejillas ardan.- Bueno me tengo que ir cariño, espero que tengas un lindo día y no olvides darle un beso de mi parte a mi pequeño y dormilón Koji.
- Gracias cielo, espero te muy vaya bien en el trabajo.- le di un beso para luego verlo salir de casa, se veía tan bien con su traje... Alguien interrumpió mis pensamientos impuros, pues sentí que me abrazaban por la pierna.- Oh, mi vida veo que ya estas despierto.- sobaba sus ojitos aun por el sueño, así que lo cargue.
- Mami tengo mucha hambre ¿Podrías hacerme mi leche con fresas por favor?
- Cómo no hacerlo, dame unos minutos ¿Estas listo también para tus clases mi vida?- asintió feliz así que preparé su desayuno y la lonchera de ambos para cambiarlo. Había encontrado una escuela que no estaba lejos del colegio de Makoto.
- Maki date prisa o llegarás tarde.- en cuestión de segundos apareció lista para irnos, había conducido hasta llegar a su nuevo colegio pero la veía totalmente nerviosa.- Tranquila cariño, sé que esto es nuevo para ti pero créeme que será un buen día.- la abracé para que se relajara, de pronto aparecieron dos muchachos corriendo y se detuvieron al ver a mi niña. La viva imagen de Tanjiro y Kyojuro se hicieron presente ante nosotras.
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Crossed lines [Rengoku Kyojuro] [Douma]
Fanfiction"Dos niños quienes son criados por los demonios con el propósito de destruir a los cazadores de demonios para así obtener su reino perfecto. Pero con el paso del tiempo y acompañado de la verdad aquel plan se desmorona poco a poco, logrando que el b...