Capitulo IV: Otro bando

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Narra Luzu: 

Estaba en esos días donde eran los típicos aburridos: tener oficina limpia, una secretaria tan hermosa e inocente y claro tener reuniones constantes para la planificación de desarrollo; aun me pongo a pensar como llegue a este punto cuando mi vida era prácticamente normal luego de graduarme en tratados internacionales. 

Pensé que no llegaría tan lejos como para que el mismo estado me considere como uno de sus perros, pero e de decir que mi imagen siempre se mantuvo limpia hasta esta fecha, con un supuesto compromiso entre mi secretaria y claro que soy super amigos de los otros. 

 Con Vegetta logre ayudarlo un poco en como desenvolverse ya que el estaba más pequeño, y como tenia dos años de experiencia más, pues decidí ayudarle un poco junto con Willy para que este al tanto, y ahora... solo mírenlo es un monstruo que supero cualquier obstáculo, inclusive me llego a rebalsar en experiencia. No soy competitivo ni nada de eso, y solamente quiero tranquilidad conforme a nuestra vidas controladas; todos nosotros estuvimos presentes cuando se mencionaron la nuevas reglas gracias a los actos ilícitos de los híbridos y sobre nuestro desempeño. 

Recuerdo que un día estaba con Staxx por Siria y nos dimos cuenta que las reglas con los híbridos son a tal grado que en las noches podrían haber confrontaciones como para lastimar a cualquier inocente y no ser castigados, solo por el hecho de que así es su naturaleza... No puedo incluir en su totalidad a esa especie, pero le tengo respeto en muchos sentidos, ya que ellos deben reprimirse durante el día solo para que las personas se sientan seguras; ese tipo de paz no va conmigo, pero así es el sistema. 

Y ahora con Staxx, el se graduó conmigo en la misma universidad y tiene los mismos años que yo; es un chico alegre, tranquilo e inteligente a lo que a él le tienen cierta preferencia por ser multilingüe o muy convencedor con los empresarios potenciales. Por fechas viene al pueblo y para con nosotros contándonos sus experiencias y sobre los lugares maravillosos que vio, a decir verdad muchas veces nos dijo que le encantaría llevarnos a ver el mundo, pero dará las responsabilidades es algo imposible de cumplir... "Por dentro es un chico tierno"

Luego tenemos a Karmaland que es un pueblo sencillo con algunas modalidades modernas como nuestros edificios, carreteras, vehículos y lugares de entretenimiento, pero hay una parte que me gusta de este lugar es que los pueblerinos nos se consideran afortunados por tenernos, sino viven sus vidas normales como cualquier otro, tenemos algunas personas que nos saludan y hasta podemos concurrir como si nada, con la obvia diferencia de comportarnos pero eso es lo de menos, al fin y al cabo ellos son los tranquilos mientras que algunos periodistas extranjeros son lo que arruinan ese lindo lazo; no entiendo la necesidad, pero trato de ser perfecto para que ellos no saquen malas cosas de mi o de mis compañeros o del pueblo que me vio crecer. Para los karmaliences, soy yo el que les da empleo cuando son las que mas requieren así como algunas oportunidades para que logren desarrollarse; mi idea es que si un pueblo prospera es porque si gente así lo decide y eso es lo que me mantiene contento con mi hogar, a lo cual a gente que ayudo, gente que no cobro porque es por el bien de una ciudadanía... "Así me gane el titulo de persona más bondadosa que existió"

Soy así, alguien comprensible y atento, alguien de tan buen corazón con una vida perfecta... Que podría pensar que todo esta bien y seguirá así si tengo mi imagen limpia... Pero esa perspectiva me cambio un poco cuando me entere sobre el rompiente de Willy con Vegetta; no entiendo muy bien la relación entre hombres, pero ambos eran mis amigos, más Willy quien era una excelente asistente y muy cariñoso con Samuel, pero creo que las responsabilidades los dejaron fríos. Lamentablemente luego de eso, no volví a comunicarme con él, por tanto que le llamaba o le escribía como los viejos tiempos, parece como si hubiera tomado su propio camino; solo espero que este bien...

Entre el bien y el malDonde viven las historias. Descúbrelo ahora