[En busca de una Niñera]_KOOKMIN_

23🍼

Jimin

Últimamente las clases de teoría se volvían un tanto tediosas, lo único que las salvaba era HoSeok y sus anécdotas de la infancia.

Pero a pesar de eso y de cómo el profesor trataba de explicar algo que al parecer ni él mismo sabía cómo hacerlo, Jimin no podía sacarse de la cabeza las últimas palabras que había compartido con la señora Jeon.

¿Debería pasar más tiempo con Yeonsang? Acaso...¿No eran suficientes las horas que pasaban juntos?
Debía pensar un poco más en aquello, pero no era ni el momento ni el lugar, minutos después la campana sonó y tomó su última nota antes de guardar su libreta azul que utilizaba solo para los temas que trataba el profesor.

—Oye, ¿Debes recoger al pequeño?

—Si, debemos ir al centro comercial—Asintió estando de acuerdo mientras dejaba que sus demás compañeros salieran del salón—¿Tú harás algo?

—En realidad no, así que si me permites acompañarte lo haré.

El rubio sonrió rodeando el brazo de su amigo con el suyo.

—Vamos hobi, de paso conoces a Yeonsang.

El mayor asintió dejando que Jimin lo guiara hacia la institución dónde el pequeño estudiaba.

—¿Qué tal la cena? No me has contado nada de nada eh.

—Lo siento, no es mí mejor día—Se disculpó apenado por no haberselo contado—Todo estuvo bien, de hecho todos son amables y el hermano del señor Jeon está igual de bueno que él, aunque noté que llevaba un anillo de compromiso o algo parecido.

—Valla! Eso quiere decir que no intentarás nada.

—Exactamente, además no es del todo mí tipo.

—Pero tú jefe sí—Sonrió divertido al ver las mejillas del rubio teñidas en un lindo rosado.

—No digas tonterías hobi—Pidió deteniendo su paso delante del jardín—El señor Jeon solo es mí jefe, nada más. Además, tampoco creo que le gustaría involucrarse con alguien como yo.

—Vamos Min, lo viste desnudo y tú eres el tipo de cualquier persona, solo mírate, eres una belleza no te rebajes así por un Alfa.

Jimin sonrió avergonzado—No lo hago, pero igualmente dejemos está conversación para otro día, ven que conocerás a Yeonsang.

Tomó el brazo del mayor y lo arrastró con él.

La maestra, quien ya conocía a Jimin sonrió y llamó a Yeonsang, segundos después el pequeño se acercaba corriendo y cargando su mochila con una de sus manos. Jimin sonrió cuando el pequeño lo abrazó por las piernas.

—Hola cariño, ¿Cómo estás?

—Muy bien señor Jimin.

—Me alegra escuchar eso!—Sonrió tomando la mochila del pequeño para cargarla él—Despidete de la maestra.

Yeonsang asintió y saludó a la maestra antes de tomar la mano del rubio.

—Que tengan un lindo día!—Dijo la maestra agitando su mano.

—Igualmente para usted.

Jimin sonrió tomando la mano del pequeño pelinegro paga caminar.

Yeonsang a pesar de ser un poco distraído, pudo notar que la persona desconocida que caminaba a un lado del Omega, los seguía, detuvo su paso y tiró de la mano de Jimin, este lo miró confundido y se paró delante de Yeonsang.