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Jimin



¿Hay algo más horrible que levantarse tarde y tener miedo de llegar tarde a clases porque la alarma no sonó?

La respuesta es no.

Bueno para Jungkook parecía ser correcta, ya que en cuanto terminaron con sus baños, el rubio decidió dormir y acompañar a Yeonsang en lo que veía la película, sin embargo, cuando puso la alarma para despertar temprano se olvidó de aumentar el volumen.

Todo un problema.

Había despertado desesperado y aterrado con aquello, hoy tendría una clase importante y a pesar de no ser en la primera hora, tenía la esperanza de llegar antes para repasar un poco el tema de la clase anterior.

Jungkook había despertado un poco desorientado cuando Jimin entró a su habitación pidiendo perdón por despertarlo tan temprano.

El Alfa negó haciéndole saber que no tenía problema con aquello, era alguien que se despertaba temprano por lo cual, era costumbre que su alarma sonara en ese horario.

Vió como el Omega abría su armario y tomaba uno de sus grandes abrigos.

—Se lo devolveré en la tarde, afuera hace mucho frío y pronto lloverá—Anunció corriendo hacia el baño para arreglar su cabello.

Jungkook salió de su cama y caminó hacia el baño, se recostó sobre el marco de la puerta y observó a Jimin de costado, notando como su abrigo le llegaba un poco más abajo de sus muslos.

Le quedaba grande y era una imagen demasiado tierna a su parecer.

—Lamento no poder acompañar a Yeonsang al jardín, debo irme—Dijo saliendo del baño seguido por el Alfa—Cuando despierte debe abrigarlo bien—Pidió—No necesito que me lleve, pedí un taxi estará aquí en unos minutos, prepararé el desayuno en lo que llega, así no tiene problemas con Yeonsang.

Jungkook sonrió y antes de que el rubio abandonara su habitación, tiró de su mano y presionó sus labios con los de éste, movió estos contra los de Jimin degustando a gusto la boca del menor. El rubio lo acepto sin problemas, estaba un poco alterado y aquello lo había calmado un poco.

El alfa se separó de él luego se unos segundos, corriendo el cabello que se esparció por la frente del rubio.

—Tranquilo, no te preocupes por su desayuno yo me haré cargo de eso.

Jimin sonrió y asintió antes de volver a unir sus labios con los del Alfa. Jungkook colocó sus grandes manos sobre la cintura de Jimin, mientras esté pasaba sus brazos por el cuello del pelinegro. Se sentía a gusto y no tenía nada de malo regalarle el poco tiempo que aún tenía, al Alfa.

Jungkook sonrió sintiendo el fresco aroma de Jimin, tenerlo así dispuesto a él era perfecto.

Y todo habría continuado así si no hubiera sido por el fuerte claxon de un auto, el cual llamó la atención del rubio. Este se separó de Jungkook para buscar su bolso en la habitación de Yeonsang.

—Intentaré salir temprano para pasar por Yeonsang—Dijo pasando el bolso por su cabeza, temía perderlo.

—Si no puedes me avisas, mandaré a alguien por él.

—Esta bien, hasta luego—Sonrió despidiéndose del mayor con un beso en la mejilla.

El mayor sonrió.

—Hasta luego—Dijo el pelinegro observando como Jimin salía con rapidez de la habitación.

Jimin bajó las escaleras y salió de la casa con rapidez, en cuanto subió al taxi pudo regular su respiración. Mordió su dedo índice intentando no pensar en lo que había visto cuándo bajaba las escaleras.

[En busca de una Niñera]_KOOKMIN_Donde viven las historias. Descúbrelo ahora