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Jungkook

La mudanza reciente de Jimin, había sido una de las mejores experiencias para Jungkook. Tenerlo en casa y pasar tiempo con el y con su cachorro eran lo mejor después de llegar de la empresa a casa, para ser recibido por los brazos del rubio y de su pequeño.

Habían transcurrido ya una semana desde que Jimin abandonó su departamento para instalarse en la casa de su Alfa. Ahora mismo continuaban adaptándose a pasar la mayor parte del día juntos y no perderse de las dulces travesuras del pequeño cachorro. Yeonsang asistía a sus clases, la mayor parte del tiempo acompañado por Jimin, puesto que su padre salía de casa más temprano.

Faltaban ya solo un par de días para la presentación del recital en donde actuaría Jimin, los nervios de este eran siempre opacados por la compañía y el sin fin de mimos que le deseaba Jungkook antes de ir a sus ensayos.

Hoy sería la prueba de vestuario, Jungkook prometió pasar por él luego de dejar al cachorro en casa de sus padres, pues no estaba permitido llevar a niños a la tienda. Ya habían ordenado to undo para que la familia pudiera asistir al recital, e inc de es s éslu6so los padres del Omega habían sido invitados, con el pequeño detalle de que después de la función conocerían a Jungkook.

Jimin estaba nervioso por su reacción, aunque Jungkook era mayor y ya tenía un cachorro sabía que sus padres lo aceptarían, amarían a Yeonsang igual que él lo hacía, pero aquella vocecita en su cabeza le hacían dudar de todo.

—Hola bonito—Se acercó a picotear sus labios un par de veces —¿Cómo estuvieron las prácticas?.—Dice aún con la mirada fija en el menor.

Jimin al igual que Jungkook presionó sus labios una vez más antes de responder —Mejor que ayer, estuvimos practicando la rutina completa por dos horas, luego nos permitieron hacerla de manera individual, me duelen los hombros creo que fueron los trucos, cuando lleguemos a casa tomaré un baño—Finalizó contando mientras Jungkook emprendía camino hacia el edificio en dónde tenían preparado el vestuario de los bailarines y bailarinas del recital.

—Te haré un masaje, quizás con eso puedas descansar un poco más.

—Gracias Kook, amaría que hagas eso—Le lanza un beso—¿Cómo estuvo tu mañana?.

—Lo mismo de siempre, solo papeleo.

—¿Quieres que almorcemos luego de salir del la prueba de vestuario?.

Jungkook le mira sonriente.—¿Lees mis pensamientos bonito?.

—Algo así.—Responde Jimin para luego guiñarle—Vamos a "Youth", tienen buenos platos.—Sugiere buscando su teléfono que ha comenzado a sonar por alguna parte de su bolso.

—Creo que lo tienes en el bolsillo de afuera.

Jimin mira este y asiente riendo por el desparramo que hizo al buscarlo.

—¡Hola!.—Dice tras contestar.

Jimin, hijo estamos fuera del departamento, quisimos entrar pero es todo un desorden de cajas—La voz de su madre le hizo mirar a Jungkook sorprendido, este le devolvió con una mirada cargada de confusión.

—¿Mamá? ¿Estás en Seúl?.

Jungkook le mira de reojo luego de escuchar la conversación de Jimin con su madre.

—Si cariño, acabamos de llegar—Responde la mujer alterada—Queriamos darte una sorpresa junto a tu padre.

—Oh, mamá debiste avisar que vendrían el departamento será arrendado mañana mismo.—Pide observando la hora en la pantalla de su celular —Estaré allí en unos minutos, hablaremos cuando llegue, no se muevan de allí, por favor.

[En busca de una Niñera]_KOOKMIN_Donde viven las historias. Descúbrelo ahora