[En busca de una Niñera]_KOOKMIN_

43🍼

Jimin

Mientras Jungkook se encargaba de llamar a sus empleados para comenzar con la mudanza, Jimin se encargaba de cuidar a Yeonsang, él cual había llegado al departamento después de que sus clases acabaran.

El tiempo se hizo tan corto que su madre apenas acababa de marcharse de regreso a casa donde su padre la esperaba ansioso y, él junto a Alfa aún se encontraban metiendo las cajas dentro del camión con la ayuda de los empleados que Jungkook había pedido desde temprano a su empresa.

Quería trasladar todo sin inconvenientes y tampoco es que fuera demasiado, pues lo que Jimin llevaba consigo en las cajas era aquello que le importaba y no dejaría en el edificio si ponía en renta este.

Las cosas que Jimin llevaba cabían bien dentro así que no hubo problema con nada de lo que guardaron y tampoco se oyó alguna de sus cerámicas romperse.

—Están livianas todas las cajas, ¿No hemos perdido cosas en el camino?

Jungkook cargaba la última de las cejas grandes junto a su Omega.

—¡Alfa tonto!.

Chilló el menor divertido pero sin quitar el ojo de Yeonsang.

Jungkook sonrió divertido, pues hace rato que molestaba a Jimin por lo ligera que eran las cajas con sus pertenencias y lo exagerado que él era mientras llevaba todo al camión.

Quizás estaba consintiendo un poco de más al pequeño Omega.

El Alfa ni siquiera se encontraba cansado aún y él creyó que lo estaría apenas comenzara a llevar sus pertenencias hacia el camión estacionado delante del edificio del cual abandonaría en pocos minutos.

—Ya he dicho que es porque no había mucho allí, y todo está bien protegido, debí poner todo en una sola caja para que tú la cargaras.

Jungkook sonrió divertido.

—Omega malo, solo era un pequeña broma.

—No me gustan las bromas, Alfa tonto.

Jaehyun, uno de sus empleados que trabajaba en el área de mantenimiento, rió divertido por la situación, jamás imaginó ver a su jefe de aquella forma, quizás era porque no lo conocía bien o porque después de lo que pasó con su antigua pareja no creía que volviese a estar con otra persona de la misma forma.

Tampoco podía reconocer al pelinegro si en la empresa era alguien serio que solo buscaba que todo estuviese en orden.

Pero aunque le gustaba ver su interacción con el Omega rubio, tuvo que lamentarse al tener que preguntar sobre las pertenencias de Jimin.

—Señor Jeon, está es la última caja que cargamos desde la sala. ¿Queda algo más que debamos guardar?

—Jimin—Miró al nombrado, este se encogió de hombros.

—Eso es todo Jae, puedes llevar esto a mi casa mientras terminamos algo.

—Está bien señor, estaremos esperando por ustedes en su casa.—Dijo para luego retirarse dando un par de reverencias.

Jae subió al camión dónde ya se encontraba su compañero de trabajo y cuando se cercioró de que todo estuviera en orden, comenzó a conducir hacia su destino.

Jimin soltó un suspiro viendo al camión alejarse, estaba asustado no mentiría, quería decir que todo estaba bien pero sabía que en el momento en que sus cosas ya estuvieran en casa del Alfa, todo cambiaría y suponía que él y su rutina también lo haría.