🐺Culpa a el celo🐻 [RUBEGETTA~OMEGAVERSE]

🐺CAPITULO L🐻

Narra Samuel

Despues de tanto tiempo las cosas al fin estaban saliendo a la perfección...
Ruben y yo nos habiamos casado, nuestros amigos ya tenian sus propias vidas y sus hogares armados junto a sus familias, los cachorros habían crecido en estos últimos años...aun no me podia creer que ya mis hijos tuvieran dieciséis años y que Brayan estuviera saliendo con Alexis mientras que Daniel se mantenia en un semblante mas calmado y tranquilo igual a mi, se le veía que él no tenia prisa por encontrar una pareja no como su hermano, sonreía al pensar en ello.

Sin embargo, hubo algo que en estos últimos años de matrimonio con Ruben me mantenían un poco pensativo...
Veia como todos convivian felices con sus familias, con sus pequeños hijos, todos ellos habian visto a sus cachorros desde su nacimiento crecer poco a poco, mientras que por mi lado me habia perdido gran parte de la vida de mis hijos y no es que me queje pues yo tengo responsabilidad en ello pero aun asi...me hubiese gustado verlos desde bebés...

No queria tratar el tema con Ruben, tal vez hablar de esto sería un tema un poco sensible para él asi que preferí evitarlo a toda costa y continuar como si nada, pero como era de esperarse que él tarde o temprano iba a enterarse del asunto.

Ahora mismo nos encontrabamos de camino al cumpleaños numero uno de el segundo hijo de Borja, su pequeño cachorro Camilo Luzuriaga, ese bebé, su primera hija Lana y Auron habian sido las luces que llegaron a salvar a Luzuriaga del vacio y la oscuridad en la que vivia constantemente.

Llegamos y lo primero que divisamos fueron a los hijos de Mangel y Lolito jugando con Lana, Maria y Alexander, bueno casi todos ellos, Ethan, uno de los trillizos esta solo supervisandolos junto a Alexis, él era el mas calmado de los tres cachorros incluso en comparación a sus padres él era mas sereno que Mangel pero sumamente inteligente.

Por otro lado estaban nuestros amigos disfruntando de una conversacion amena pero tan pronto nos vieron llegar nos saludaron mientras que Borja se acercaba a nosotros con su hijo en brazos para darnos una calida bienvenida acompañada de una sonrisa.

La tarde transcurrio tranquilamente entre risas y juegos, hasta que perdi de vista a Ruben, sin preguntar por él, me tome la osadía de adentrarme más en la casa y buscarlo...mientras caminaba por los pasillos de la conocida mansión veía fotos de los hijos de Borja y Raul adornando las paredes...